Venciendo las propias limitaciones

(Minghui.org) La noticia sobre la epidemia del coronavirus de Wuhan se dio a conocer recientemente en todo el mundo. Con la propagación del virus, varias ciudades han adoptado una serie de medidas preventivas, como bloquear la comunidad y cerrar aldeas. En cierto modo, estas acciones me movieron el corazón.

Bloqueada por la pereza y las nociones humanas

Antes del estallido de la epidemia, cada vez que tenía tiempo, solía salir junto con los compañeros practicantes a aclarar la verdad sobre Falun Dafa a la gente. Especialmente los sábados y domingos, aclarábamos la verdad sobre Dafa a las personas durante ciertos períodos.

El bloqueo de las comunidades se inició el tercer día del Año Lunar Nuevo Chino. Antes de que mi distrito residencial fuera cerrado, pensé que debía apurarme y colgar folletos informativos de Dafa en las puertas de las casas de la gente. Mientras se quedan en sus casas, tienen tiempo para leer los folletos y conocer la verdad.

Así lo pensé, pero no salí debido a mi pereza y porque no había alguien que se me uniera. Me quedé en casa y perdí mi tiempo. Junto con los compañeros practicantes, planeamos salir en la sexta noche del Año Lunar Nuevo para colgar pancartas, pero no lo logramos, ya que creíamos que habría poca gente en la calle. Incluso si colgábamos pancartas, las vería poca gente. En resumen, estábamos bloqueados por estos pensamientos negativos.

Normalmente, navego por Internet con relativa fluidez. A veces, otros practicantes no pueden acceder al Internet, pero yo no he tenido este tipo de problemas. Siempre pude ingresar, aún si a veces hice varios intentos, o la conexión se tarda un poco más de tiempo. Sin embargo, mi buena fortuna se detuvo en el segundo día del Año Nuevo Lunar. Durante cinco o seis días seguidos, no pude acceder a Internet, sin importar cuánto lo intenté, incluso a la una de la mañana, cuando había menos gente usando Internet. Miré hacia adentro. ¿Estaba pasando menos tiempo estudiando el Fa? No, recito el Fa todos los días para memorizar una o dos lecciones. Pude enviar pensamientos rectos con una mente tranquila. ¿Entonces, cuál era el problema?

El día de ayer, intenté por largo tiempo acceder a Internet, y le pedí a Shifu que me ayudara, pero seguía sin poder iniciar la sesión. Me sentí muy impotente, suponiendo que otros practicantes podrían haber experimentado lo mismo, así que decidí compartirlo con ellos al día siguiente. Últimamente he estado en casa y no he tenido contacto con otros practicantes. Si visito a otros practicantes durante este período especial, sus familiares se preocuparían, así que no fui a ninguna parte, y permanecí aislada.

Impulsada por los practicantes diligentes a difundir la verdad

Junto con otros practicantes, habíamos programado que saliéramos el día de hoy para difundir la información sobre Falun Dafa. Antes de salir, seguía pensando que no habría mucha gente en la calle, y que podría haber menos compañeros practicantes. Solo quería echar un vistazo.

Al llegar al destino, primero vi a mi compañera Ge Mei. Dijo que no había salido hasta ese momento, creyendo que nadie iba a estar en la calle –y tampoco había podido acceder a Internet, igual que yo.

Llegaron también otros dos practicantes. Dijeron que no habían tenido problemas para acceder a Internet desde el primer intento. Ambos son jubilados. Ellos administran muy bien su tiempo y salen a hablar con la gente sobre Dafa casi todos los días. No se han visto afectados últimamente, y siguen saliendo todos los días para hablar de Dafa. Dijeron que todas las personas que conocían se muestran interesadas en saber de Dafa.

Les pregunté: "La gente ahora necesita registrarse cuando visita cualquier comunidad. ¿Aún se visitan entre ustedes?".

Respondieron: "Hacemos lo de siempre. Cuando entres por la puerta, no pienses que el portero te preguntará algo, solo actúa como si irías a casa".

Escuchando sus palabras, vi la brecha entre ellos y yo, y me di cuenta de que estaba equivocada. Estaba bloqueada por mis propias expectativas. Mis pies y el Internet estaban bloqueados por mis pensamientos no rectos.

Estos practicantes se fueron para difundir la verdad. Ge Mei y yo seguíamos ahí, sintiéndonos perdidas. Mirando a las pocas personas en la calle, no sabíamos adónde ir. Ambas nos dimos cuenta al mismo tiempo de que nuestras nociones humanas nos habían bloqueado hablar con la gente sobre los hechos de Falun Dafa.

Caminamos en la misma dirección, con la esperanza de alcanzarlos e intercambiar más, pero estaban demasiado adelantados de nosotras. A lo largo del camino, empezamos a hablar con la gente sobre Falun Dafa y renunciar al partido comunista chino (PCCh) y a sus organizaciones juveniles. El efecto fue bastante bueno. La gente con la que nos encontramos aceptó nuestras palabras. Ge Mei dijo que todo fue arreglado por Shifu.

Eliminando las nociones, todo vuelve a la normalidad

Las personas que conocimos básicamente aceptaron el folleto con la aclaración de la verdad, y algunos renunciaron a las organizaciones del PCCh. Mientras hablábamos, sentimos cómo se desintegraba el material que ataba nuestros corazones. Nuestras mentes se abrieron. Acordamos que antes de ir a trabajar, saldríamos todos los días a salvar a la gente, ya sin considerar el número de personas que hubiera en la calle.

En el camino de regreso, pensé que ya debería poder acceder a Internet. Llegando a casa, lo primero que hice fue conectarme a Internet. Sin pensarlo, accedí fácilmente, después de solo hacer clic en el software antibloqueo. Descargué rápidamente revistas semanales, folletos y otros materiales de Falun Dafa. Esto continuó durante dos días consecutivos. Cuando regresaba a casa después de aclarar la verdad, entraba en línea muy fácilmente. Sabía que era una pista de Shifu.

Lo anterior es un poco de mi propia experiencia. La comparto para que los compañeros practicantes que están bloqueados de la misma manera que yo puedan vencer sus propias limitaciones, y aclarar la verdad a la gente.