(Minghui.org) Una residente de la ciudad de Jilin, provincia de Jilin, ha estado detenida en aislamiento durante más de dos meses, después de ser arrestada por practicar Falun Dafa. El padre de la Sra. Jin Min, un hombre de 80 años, se acercó a preguntar por el estado del caso de su hija.

Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, es una antigua disciplina espiritual de ejercicios y meditación perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

La Sra. Jin Min

La Sra. Jin, de 53 años, fue arrestada el 11 de septiembre de 2020, después de ser denunciada por hablar con un taxista sobre Falun Dafa. Fue enviada al centro de detención de la ciudad de Jilin el 14 de septiembre y su arresto fue aprobado el 23 de octubre. Como el centro de detención impide a su familia visitarla, ahora su caso permanece en la oscuridad.

Las autoridades de la ciudad de Jilin están usando la pandemia como excusa para prohibir que los practicantes locales de Falun Dafa contraten abogados de afuera de la ciudad. Solo se les permite contratar abogados locales que les ordenan declararse culpables. Al igual que en el caso de la Sra. Jin, la mayoría de las familias de los practicantes no están al tanto del estado de su caso. Algunas familias se enteraron de la sentencia, de sus seres queridos, mucho después de que habían sido enviados a prisión.

El 8 de noviembre de 2020, el padre y la hermana mayor de la Sra. Jin fueron al departamento de policía de la provincia de Yongji para preguntar sobre su caso. Se quejaron de no haber recibido ninguna notificación del caso, tras dos meses de su arresto. El agente que los recibió negó tener conocimiento del arresto de la Sra. Jin y los dirigió a la comisaría.

Después de que el padre y la hermana de la Sra. Jin fueron a la comisaría, el oficial de policía que los recibió fue muy grosero. Dijo que ya habían entregado su caso a la procuraduría y que ya no tenía nada que ver con ellos. El oficial culpó a la Sra. Jin de practicar Falun Dafa y le dijo a su padre que hablara con la procuraduría de la provincia de Yongji.

El padre y la hija se dirigieron, entonces a la procuraduría. Un funcionario de allí dijo que no podían encontrar el caso de la Sra. Jin en su sistema y que todavía el caso se encontraba en el departamento de policía.

El padre y la hermana de la Sra. Jin volvieron al departamento de policía y el director les dijo que todos los casos de Falun Dafa son confidenciales y que no podía revelarles nada. El padre de la Sra. Jin exigió reunirse con el jefe de policía, pero el director de la policía dijo que su jefe estaba muy ocupado y que era casi imposible concertar una cita con él.

Esta no es la primera vez que la señora Jin fue objeto de persecución por su fe. Fue arrestada nueve veces anteriormente, detenida en un centro de lavado de cerebros, y estuvo en un campo de trabajo forzado. Fue sometida a torturas y estuvo al borde de la muerte, después de mantener una huelga de hambre durante más de un mes, tras su arresto el 19 de agosto de 2016.

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