(Minghui.org) Orgullo y prejuicio, una obra maestra de Jane Austen de principios del siglo XIX, describe una historia de amor que trasciende los tiempos. Considerada una de las novelas más famosas de la literatura inglesa, ha inspirado innumerables obras en la literatura moderna.

La novela describe el cortejo entre el Sr. Darcy y Elizabeth Bennet. Elizabeth conoce al Sr. Darcy en un baile y este se niega a bailar con ella, aduciendo que no es lo suficientemente atractiva para él. El orgullo del Sr. Darcy le causa una muy mala primera impresión a Elizabeth.

El Sr. Darcy también desprecia la baja posición social de Elizabeth, lo que profundiza el juicio erróneo y los prejuicios de Elizabeth respecto del Sr. Darcy. No es hasta después de numerosos obstáculos que los dos se libran de su orgullo y prejuicio y llegan a apreciar las excelentes cualidades del otro.

La moraleja de la historia sigue siendo provocadora y de relevancia en la sociedad actual. Es muy fácil formar prejuicios contra los demás, especialmente bajo la influencia de informes mediáticos selectivos o incluso falsos. Debemos renunciar a nuestras nociones para poder ver a las personas por lo que realmente son.

El presidente Trump es uno de esos casos que ha recibido varias etiquetas y muchos prejuicios contra él, incluso por parte de los medios de comunicación, cuando en realidad es mucho mejor de lo que se describe. Lo que ha hecho desde que asumió el cargo en 2016 es testimonio de su buen carácter.

Durante las administraciones anteriores a Trump, los factores del comunismo se han ido infiltrando gradualmente en diversos aspectos de la sociedad estadounidense, desde los medios de comunicación hasta Hollywood, y desde la política hasta la autocensura de las empresas.

No fue hasta que Trump asumió el cargo que se tomaron medidas concretas para frenar las influencias corruptoras del diablo comunista y la propagación de sus diversas formas, como el liberalismo, el progresismo y el socialismo. Tales acciones son necesarias para contrarrestar la erosión de los valores tradicionales por parte del comunismo. Sin embargo, los esfuerzos de Trump se han encontrado con una intensa resistencia.

Aunque no se puede encontrar una verdadera semblanza de Trump en los principales medios de comunicación, sus puntos de vista se pueden percibir en su discurso de apertura en la Universidad Liberty en mayo de 2017:

"Recuerden esto, nada que valga la pena nunca, nunca, nunca será fácil. Seguir tus convicciones significa que debes estar dispuesto a enfrentar las críticas de aquellos que no tienen el mismo coraje para hacer lo correcto. Y ellos saben lo que es correcto, pero no tienen el coraje o las agallas o la fuerza para tomarlo y hacerlo. A eso se le llama el camino menos transitado", afirmó.

"Sé que cada uno de ustedes será un guerrero por la verdad, será un guerrero por nuestro país y por su familia. Sé que cada uno de ustedes hará lo que es correcto, no lo que es el camino fácil, y que serán fieles a sí mismos y a su país y a sus creencias", explicó. "En mi corto tiempo en Washington he visto de primera mano cómo se rompe el sistema. Un pequeño grupo de voces fracasadas que creen saberlo todo y entender a todos quieren decirles a todos los demás cómo vivir y qué hacer y cómo pensar. Sin embargo, no vas a dejar que otras personas te digan lo que crees, especialmente cuando sabes que tienes razón".

Trump dijo que esos estudiantes habían donado medio millón de horas de caridad el año pasado y afirmó: "En sus corazones están inscritos los valores de servicio, sacrificio y devoción. Ahora deben salir al mundo y convertir sus esperanzas y sueños en acción. Estados Unidos siempre ha sido la tierra de los sueños porque Estados Unidos es una nación de verdaderos creyentes". Continuó diciendo: "Cuando los colonos desembarcaron en Plymouth rezaron. Cuando los fundadores escribieron la Declaración de Independencia, invocaron a nuestro creador cuatro veces, porque en Estados Unidos no adoramos al gobierno, adoramos a Dios".

"Por eso nuestros funcionarios electos ponen sus manos sobre la Biblia y dicen, 'que Dios me ayude' mientras hacen el juramento del cargo. Es por eso que nuestra moneda lleva inscripto orgullosamente, 'en Dios confiamos'. Y es por eso que proclamamos con orgullo que somos una nación conforme a Dios, cada vez que decimos el Juramento a la Bandera", añadió.

Animó a los estudiantes a hacer las cosas con dignidad y orgullo. "Exige lo mejor de ti mismo y no tengas miedo de desafiar intereses arraigados y estructuras de poder fallidas. Por cierto, ¿te suena familiar? Cuanto más te digan que no es posible, que no se puede hacer, más debes estar absolutamente decidido a demostrar que se equivocan. Trata la palabra 'imposible' como una mera motivación".

Cerca del final, Trump aseguró su fuerte apoyo a la libertad de creencia: "Estados Unidos es mejor cuando la gente pone su fe en acción. Mientras yo sea su presidente, nadie les impedirá practicar su fe o predicar lo que está en su corazón", garantizó.