(Minghui.org) Soy un joven discípulo de Dafa. Comencé a practicar Falun Dafa a temprana edad, ahora tengo 27 años. Cuando era niño, aprendí mucho por estudiar el Fa. Mi entendimiento básico del Fa me ayudó a reconocer el adoctrinamiento de la propaganda del régimen comunista que comenzó en 1999. Firmemente entendí que Falun Dafa es el Fa más recto y la cosa más preciosa en el mundo. Fui bendecido al obtener este Fa.

Sin embargo, la adicción a los juegos en línea ha sido un problema desde mi juventud. Este se convirtió en el más grande obstáculo en mi cultivación. Busqué renunciar a él incontables veces. Una vez me arrodillé frente al cuadro del Maestro Li (el fundador) y dije que no lo haría de nuevo. No obstante, lo hice una y otra vez. Esto me angustió mucho. A menudo pienso que si no hubiese tenido esta adicción a los videojuegos, mi cultivación habría sido mucho mejor. Solo fallé en superar esto. Pero, recientemente las cosas cambiaron.

Mi adicción al Internet proviene de la lujuria

El Maestro dijo:

“Estos videojuegos son tan dañinos para la gente, esos no solo están apuntando a los hijos de los Dafa dizi. Es muy atractivo, y también genera en la gente común un tipo de efecto muy pasivo, que hace que no puedas hacer bien el trabajo, no puedas dormir bien, no descanses bien, hace que no tengas qing humano, que no te ocupes de la familia, si eres estudiante no te importa el estudio, te atrae, te hace meterte adentro, esto es igual a malograr a los seres humanos. Esos comerciantes de videojuegos, para promocionarlos, continuamente hacen un gran esfuerzo para mostrar nuevos trucos, lo hacen así con gran esfuerzo, promocionándolo de esta manera. ¿Qué hace que el hombre cree un yeli de pecado tan grande? Están malogrando a los seres humanos” (Enseñanza del Fa en el Fahui de San Francisco).

Por largo tiempo, estuve obsesionado con los juegos en línea, dibujos animados, y programas de televisión. Descubrí que todos esos apegos provenían de la lujuria. Esto es un apego de bajo nivel. Te seduce a que lo veas, a pensar en sentirte complacido, a perder todo tu tiempo.

Me di cuenta de que, en cuanto empieza cada juego en línea, aparecen personajes que muestran demasiado su piel. Estos me afectan, incluso sin haber ninguna tentación en la superficie.

En noviembre de 2019, accidentalmente vi un juego muy popular donde los animales son capturados por agricultores. No tenía expectativas de que esto se volviera una gran distracción. Antes de eso, había dejado de jugar video juegos y mirar las series de televisión, y me había dedicado a mis proyectos de Dafa por al menos por un año y medio. Este había sido el tiempo más prolongado desde que obtuve el Fa en el que me mantuve lejos de este tipo de entretenimientos, y en el cual me había concentrado en la cultivación. Ya no me encontraba en la escuela; pensaba que era demasiado grande para esas cosas.

Aunque pensaba haber olvidado los videos juegos. Ver ese anuncio resultó en que pensara en él día y noche; incluso me imaginaba comprando el sistema de video juegos. Si esto hubiese sucedido el mes anterior, no hubiera creído que me perturbaría de esta manera.

Me di cuenta de que esta “recaída” en la adicción a los juegos en línea se mantenía arraigada en la lujuria. En el fondo, vi que me gustaban las imágenes de animales pequeños. Sin embargo, era un tipo de lujuria, un concepto alienígena mutado. Dos años antes, conocí a una chica y luego rompí con ella. A ella le gustaba mucho el juego que había visto ese día. Luego me pareció que tenía la tendencia de recordar los sentimientos que tenía al jugar ese juego, como pasión y lujuria y varios tipos de conceptos modernos mutados. Sentí que esos pensamientos eran una fuerte obsesión. No obstante, lo tenía fuera de control. El demonio en mi corazón parecía que siempre trataba de seducirme y hacerme sentir que tenía la libertad de tomarme un descanso.

Sé en mi corazón que este enfoque no está en línea con los estándares humanos. Pienso en los días cuando era adicto a los juegos, no comía ni dormía y había perdido mucho peso. Podía estar en un cibercafé por más de un día, tenía insomnio en la noche e iba a la escuela al día siguiente. Una vez, incluso me quedé dormido en el autobús escolar y no me di cuenta de que el conductor había llevado el autobús hasta el depósito y me había encerrado en él. También me estafaron por miles de yuanes jugando a juegos en línea. Durante esa tribulación, de momentos estudiaba el Fa. Sin embargo, sin importar cuánto estudiara, no podía absorberlo así como cuando era niño.

Eliminando la adicción al Internet

Pasé un par de días dolorosos tratando de deshacerme de mi adicción al Internet. El proceso fue realmente como lo que dijo el Maestro:

“Esos computadores, máquinas de juegos, generan la misma función, es el mismo principio. Tú lo dejas, pero si tú lo dejas, ¿entonces muere? Él no lo acepta: “Tú tienes que seguir viendo. ¿No quieres ver más? Bueno, no te dejo trabajar, no te dejo estudiar, hago que tú pienses que quieres jugar con esos; si no lo haces, hago que incluso juegues en tus sueños...” (Fahui de Nueva York 2019).

En esos días, mientras dormía, estuve jugando juegos y mirando películas. Esa cosa trataba de matar mi voluntad. Me volví irritable, sospechoso y emocional. Algunas veces estaba tan adicto a esto que sentía que no tenía ningún otro apego en el mundo ¿Por qué me encontraba con tantas dificultades? Trataba de pedirle ayuda al Maestro, pero no encontraba la solución. También sabía en mi corazón que esto era una prueba que tenía que superar, pero había fallado tantas veces antes, que me sentía temeroso.

Cuando el yeli estaba corriendo salvajemente en mi mente y a punto de hacerme malgastar dinero en juegos, sentí no poder aguantarlo más. En la noche, recordé que ese día no había practicado los ejercicios de Falun Dafa, así que comencé a hacerlos. No tenía ninguna expectativa.

Cuando comenzó la música, un pensamiento vino a mi mente: al jugar video juegos estás obsequiándole tu estado de fruto; ¿no era eso lo que estaba haciendo? Si juego, iré al mundo de ese otro como un ser consciente. Si no juego, podré alcanzar la consumación. ¿Qué es lo que realmente quiero?

Repentinamente me di cuenta de que no quería jugar más; esa cosa terca que se burlaba en mi mente se había ido. Continué hasta terminar el resto de los ejercicios. Mi corazón nunca antes había sentido tanta quietud. Luego, fui a estudiar el Fa. Las cosas que me habían molestado durante tantos días se veían incapaces de alcanzarme. Supe muy bien que el Maestro Li había sido quien me había ayudado a entender el Fa.

Al día siguiente, tuve otro pensamiento: ¿qué sentido tiene la vida si no estoy comiendo bien, no miro películas o no juego video juegos? Sabía que esos pensamientos venían por los elementos de yeli dentro de mí. El yeli estaba moribundo debido a que yo no estaba tentado por él. Se sentía inútil. Le dije que había estado viviendo una vida interesante. Yo había obtenido el Fa y tenía que ser responsable. Hacer estas cosas retrasaba el ofrecerle salvación a la gente.

El Maestro dijo:

“Algunas personas piensan que la vida sería aburrida sin qing –no más películas, no más interés en encontrar parejas atractivas, no más deseo por comidas deliciosas– sería tan aburrido. Sin embargo, te diré que así parece cuando lo miras desde el punto de vista de una persona común. Si asciendes a reinos más altos, descubrirás el hermoso estado de esos reinos, y descubrirás que todo es mejor que aquí en el mundo humano. Tanto es así que no hay palabras para describir cuán bello es allí arriba. Pero si quieres disfrutar esa belleza, deberás deshacerte de los apegos comunes manejados por el qing que tienes hacia los intereses humanos. Sólo cuando abandones los apegos humanos comunes obtendrás cosas mejores” (Enseñando el Fa en la ceremonia de Fundación de la Asociación de Falun Dafa en Singapur).

Estoy muy claro en que el tiempo es poco y no debería desperdiciar más el tiempo. Si malgasto tiempo en entretenimiento de la gente común, retrasaré la salvación de los seres conscientes ¡Gracias Maestro por su benevolencia y compasión! ¡Los practicantes deberíamos hacer las tres cosas bien y caminar rectamente el camino de la rectificación del Fa!