(Minghui.org) La Ópera de Sídney es una de las atracciones turísticas más famosas del mundo y recibe a turistas de muchos países. Los practicantes de Falun Dafa a menudo colocan carteles para presentar la meditación y la disciplina espiritual, así como exponer su persecución por el régimen comunista en China. A-wen es una de las practicantes de Falun Dafa que colabora en el sitio.
A-wen habla con turistas chinos cerca de la Ópera de Sídney sobre la persecución a Falun Dafa en China.
Una vida dura
A-wen nació en una familia budista. Después de que Mao Zedong inició la revolución cultural en 1966, A-wen se graduó en 1968 y fue enviada al campo como una "joven educada". Dijo con inocencia que creía que la campaña política terminaría pronto, pero luego desperdició diez años de su juventud en una provincia remota y montañosa.
A los jóvenes como ella que fueron enviados al campo entre 1966 y 1968 por el partido comunista se los llamaba laosanjie o "los tres viejos".
Después de regresar a casa en 1978, ella misma aprendió medicina, obtuvo su licencia y abrió una clínica. Entre los años 70 y 90, vio el deterioro de la moralidad en la sociedad bajo el régimen comunista. Incluso los médicos no estaban exentos y muchos profesionales médicos comenzaron a tratar a los pacientes según la cantidad de sobornos que recibían.
Sin embargo, también vio a muchos chinos practicando Falun Dafa y a muchos de sus pacientes recuperando su salud como resultado. Su abuela de 73 años de edad practicó Falun Dafa durante solo seis meses y todas sus afecciones cardíacas, cerebrales y cardiovasculares desaparecieron.
A-wen sabía que Falun Dafa era bueno pero ella no practicaba. Como vivió la revolución cultural, cuando el partido comunista comenzó a perseguir a Falun Dafa en 1999, sabía que la postura del partido era otra gran mentira.
Comenzando el viaje de la cultivación
A-wen se mudó a Australia en 2001. En 2003, comenzó a experimentar dolor en su columna vertebral. Se acordó de Falun Dafa y compró un ejemplar del libro principal, Zhuan Falun, en el barrio chino de Sídney.
Recordó: "Era nochevieja, abrí el libro después de la cena. Me senté toda la noche y leí el libro. Lo terminé a la mañana siguiente".
"Estaba tan emocionada. Este es un libro extraordinario. Las enseñanzas son profundas, sabias y tocaron mi corazón. Muchas de los interrogantes de la vida y las preguntas que tenía -que las escrituras budistas no podían responder- fueron respondidas en Zhuan Falun.
"¡Estaba tan feliz de haber encontrado lo que había perdido! Todo mi cuerpo se sentía ligero y relajado, algo que nunca antes experimenté. La espondilosis cervical desapareció incluso antes de que empezara a practicar los ejercicios".
A-wen también sufría de enfermedades cardiovasculares, arritmia, artritis reumatoide y bronquitis crónica, por lo que los días de invierno eran muy duros para ella. Solo leer el libro alivió su dolor.
Desde entonces, A-wen continúa leyendo Zhuan Falun todos los días.
Aplicando los principios
A-wen sigue los principios de Falun Dafa, "Verdad, Benevolencia, Tolerancia" como guía en su vida diaria.
Dejó de luchar por su parte de los bienes familiares en China. La familia de su nuera es feliz y ahora A-wen se siente en paz.
Para ayudar a los turistas chinos a aprender sobre la persecución en China, decidió ir a hablar con ellos a la Ópera de Sídney.
A-wen era tímida y no estaba acostumbrada a hablar en público. Al principio, no podía abrir la boca ni decir nada. Se puso de pie y observó cómo llegaban y se iban los autobuses llenos de turistas chinos.
Sin embargo, su urgente sentido de misión la ayudó a dejar de lado sus nociones y a tener el valor de hablar con grupos de extraños.
Empezó hablando con una persona a la vez y luego con un grupo a la vez. Poco a poco, fue capaz de hablar con un autobús lleno de turistas.
"Si escuchan, por lo general aceptan renunciar al partido. A veces no hay suficiente tiempo, pero al menos entienden los hechos", aseguró A-wen.
Un autobús lleno de turistas chinos abandona el PCCh
Un día de invierno de 2017, un gran grupo de turistas chinos terminó de visitar el teatro de la ópera y regresó al estacionamiento. Sosteniendo un gran cartel, A-wen se acercó y les dijo: "Amigos, ¿escucharon sobre los crímenes que cometió el exlíder del PCCh? ¡Sustraer de órganos de los practicantes de Falun Dafa vivos! Todo el mundo sabe de este mal sin precedentes. El mundo entero pide el fin de la persecución. Pero el régimen comunista sigue encubriendo los hechos".
"Falun Dafa recibió más de 3.000 proclamaciones en muchos países. El libro principal, Zhuan Falun, fue traducido a más de 40 idiomas. Practicar y seguir los principios mejora la salud y la moral. Dafa enseña a la gente Verdad, Benevolencia, Tolerancia y a ser una persona buena y amable".
"No pierdan la oportunidad de abandonar el PCCh ahora. Cuando el régimen comunista se derrumbe, será demasiado tarde para dejarlo. Si escucharon y entendieron, ahora es su oportunidad de abandonar el partido y sus organizaciones afiliadas".
Un turista señaló a otro hombre y le dijo: "Él es nuestro líder. Haz que renuncie primero".
A-wen se volvió al líder y le dijo: "Por favor, toma la iniciativa y renuncia". El hombre estuvo de acuerdo y dijo: "¡Sí, renuncio! Todos nosotros renunciamos al PCCh".
El autobús estaba llegando, así que los turistas formaron una línea para abordar el autobús y todos le dieron su nombre.
Pareja china abandona al PCCh
Un día de 2017, una pareja de chinos se detuvo a leer los carteles. A-wen se acercó a ellos y les contó sobre el engaño de la autoinmolación organizado por el régimen comunista en 2001 para incitar al odio contra Falun Dafa.
Ella dijo: "Deben haber estado en Beijing y en la Plaza de Tiananmen. ¿Vieron a algún policía patrullando con extintores a sus espaldas?".
A-wen señaló: "El llamado incidente de la inmolación solo duró unos pocos minutos. ¿Cómo es posible encontrar más de diez extintores de incendios y traerlos al lugar en tan poco tiempo? Si fue un evento inesperado, ¿cómo podría un equipo de cámaras estar cerca y filmar todo el evento de principio a fin?".
"El exlíder del PCCh temía ser llevado ante la justicia, así que ordenó que se construyera un cortafuegos de internet para bloquear las noticias desde el extranjero. En China, hay que penetrar el gran cortafuegos para leer la verdad. Hoy, estás aquí. Deberían apreciar esta oportunidad y saber la verdad".
A-wen les mostró información sobre el asesinato de practicantes por sus órganos, autorizado por el PCCh y la pareja dijo que no lo sabían. El marido condenó la crueldad del crimen. La pareja aceptó renunciar al partido.
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