(Minghui.org) Los practicantes en Bulgaria se reunieron por dos horas en una protesta pacífica el 25 de abril de 2019, en el consulado chino en la capital de la ciudad de Sofia. Hace 20 años en esta fecha, aproximadamente 10.000 practicantes de Falun Dafa viajaron a Beijing para apelar a la dirección del régimen comunista después de que los practicantes en Tianjin fueran arrestados ilegalmente por su creencia.

Después de negociaciones con el entonces primer ministro chino, Zhu Rongji, los detenidos ilegalmente en Tianjin fueron liberados el mismo día. Los protestantes dejaron la escena rápidamente, limpiando cualquier basura que quedara.

Ese mismo día, el líder del partido comunista chino, Jiang Zemin, contradijo la decisión de Zhu Rongji y declaró que si el partido no podía derrotar a Falun Dafa, sería un hazmerreír. Para Jiang Zemin, la popularidad enorme y filosofía de Falun Dafa basada en los principios de Verdad, Benevolencia, y Tolerancia, ponían en riesgo la ideología materialista y atea del comunismo. La tensión política en escalada estalló tres meses después cuando el 20 de julio de 1999, una campaña ilegal a nivel del estado para exterminar a Falun Dafa de China fue lanzada.

Apelaciones pacíficas se han llevado a cabo alrededor del mundo para conmemorar este histórico evento de hace 20 años. Los practicantes de Bulgaria se reunieron al frente del consulado chino temprano por la tarde para crear conciencia sobre la persecución ilegal de la práctica en China. Se mostraron carteles sobre la sustracción forzada de órganos a practicantes vivos.

Falun Dafa se practica libremente en Bulgaria y en más de 100 países en el mundo. Los practicantes son muy conscientes de los efectos nocivos de la propaganda de difamación comunista en China. Algunos de ellos lo experimentaron de primera mano. Con una mente compasiva y una completa falta de intención de venganza, los practicantes aspiraron a aclarar la verdad a los funcionarios de las embajadas chinas a través de tales apelaciones pacíficas.

En China, los seguidores de Falun Dafa conmemoraron la apelación del 25 de abril exhibiendo banderas y carteles en áreas públicas. Colocaron las banderas en medio de la noche para evitar ser arrestados por las autoridades.

La policía de seguridad armada estuvo presente durante el evento en Sofía. Algunos de los policías escucharon por primera vez sobre la persecución en curso en China. Uno de ellos estaba profundamente consternado por la brutalidad de la persecución. Leyó cuidadosamente los materiales y ofreció su apoyo a los practicantes.

Los peatones firmaron la petición internacional para pedir por el fin de la persecución a Falun Dafa, y llevar a la justicia a su iniciador Jiang Zemin.

Otro espectador que viaja a China a menudo se sorprendió al conocer las atrocidades. Tomó un volante y les dijo a los practicantes que examinaría los detalles de la persecución.

La persecución a Falun Dafa es ilegal y está en contra de la constitución de la república popular de China (RPC), así como los acuerdos internacionales firmados por la RPC.

Los practicantes de Falun Dafa son asesinados en hospitales estatales en China por sus órganos. El propósito de los asesinatos es para beneficios lucrativos del negocio de transplantes de órganos autorizado por el estado, según el informe "Cosecha Sangrienta/El Matadero": Actualización (edición 2016) por David Matas, David Kilgour y Ethan Gutman. Taiwán, Israel, Italia y Noruega, aprobaron leyes, restringiendo a sus ciudadanos a viajar para realizar cirugías de trasplante de órganos en China. Recientemente, también se llevaron a cabo debates parlamentarios sobre el tema en la República Checa, Croacia, el Reino Unido y Canadá.

Esta operación de sustracción forzada de órganos ha generado más de mil millones de dólares estadounidenses al año para el gobierno comunista en China, dijeron los expertos.

Siguiendo la recomendación de la Coalición Internacional para poner fin al abuso de trasplantes en China (ETAC por sus siglas en inglés), en diciembre de 2018, un tribunal independiente en Londres comenzó a investigar las acusaciones de la sustracción forzada de órganos de prisioneros de conciencia vivos en China.