(Minghui.org) A solo unos meses antes de la boda de su hija, una mujer del condado de Wen’an, provincia de Hebei, murió al caer cuando intentaba escapar de la policía al bajar de un balcón del tercer piso de un edificio. Tenía 55 años.

La policía apuntó a la Sra. Yang Xiaohui por negarse a renunciar a su fe en Falun Dafa.

Falun Dafa es una disciplina espiritual que está siendo perseguida por el régimen comunista desde 1999.

Ocho policías golpearon la puerta de la Sra. Yang alrededor de las 11:00 p.m. del 8 de abril de 2019. Cuando se negó a dejarlos entrar, usaron una herramienta para abrir la puerta.

Su esposo e hija, que estaban presentes durante la invasión, estaban aterrorizados sin saber qué hacer.

Cuando la policía estaba por entrar, la Sra. Yang se fue al balcón e intentó escapar por ahí. Se cayó al piso. No respondía, y se la llevaron al hospital, donde la pronunciaron muerta alrededor de las 2:00 a.m.

La policía vigiló y grabó a la familia durante el intento de revivirla.

Li Zongjie, jefe de la división de seguridad nacional, negó cualquier responsabilidad por la muerte de la Sra. Yang y dijo que ellos solo estaban siguiendo órdenes de arriba.

Su familia se enfureció cuando la policía no los dejó hacer los arreglos para su funeral, ya que dijeron que tenían que conseguir aprobación de los niveles altos antes de poder cremarla y enterrarla.

Repetidamente perseguida por su fe

Desde que el régimen comunista ordenó la persecución a Falun Dafa en 1999, la Sra. Yang fue repetidamente objetivo de persecución. Los repetidos arrestos, hostigamientos y saqueos de su casa, dejaron a su familia viviendo con temor en las dos décadas pasadas, causando también el deterioro de la salud de su esposo.

La Sra. Yang fue enviada dos veces a sesiones de lavado de cerebro en noviembre de 2003 y junio de 2004. La patearon en la espalda y abofetearon en la cara. El personal del centro de lavado de cerebro la ató a una cama y la alimentaron a la fuerza, dañándole severamente su esófago. También le inyectaron drogas desconocidas que no la dejaban dormir, y luego no se podía despertar.

Su última ordalía fue el 2 de enero de 2017, cuando ella y ocho practicantes de Falun Dafa (dos hombres y seis mujeres) viajaron al mercado de los granjeros en el pueblo de Daliu, condado de Wen’an para repartir calendarios con información sobre Falun Dafa. Los denunciaron a la policía y los arrestaron nueve días después. La policía saqueó la casa de los practicantes y se llevó sus materiales relacionados con Falun Dafa.

Las siete practicantes fueron liberadas bajo fianza al día siguiente después que la policía encontrara que tenían presión alta. Los dos practicantes fueron retenidos por un mes y luego liberados bajo fianza el 23 de febrero.

Desde entonces, la policía hostigaba a los practicantes por medio de llamadas telefónicas o tocando sus puertas. También les pedían a los practicantes que se presenten en la comisaría cada tres meses. Cuando los practicantes se negaban a obedecer, los colocaban en una lista de buscados.

La Sra. Zheng Lili, una de las practicantes, luego fue arrestada por usar su tarjeta de identificación (por estar en la lista de buscadas) y sentenciada a un año y medio en diciembre de 2018. La Sra. He Yan fue arrestada en su casa en noviembre de 2018. El Sr. Liu Yongmei, un maestro, fue forzado a renunciar a su trabajo y ahora vive lejos de su casa para evitar ser arrestado. Sus padres, en sus 70, necesitan de su cuidado, y ahora están a la deriva.

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