(Minghui.org) Un hombre de 76 años con una seria condición médica ha sido encarcelado  por su fe en Falun Gong para cumplir un término de 2 años.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual perseguida por el régimen comunista chino desde 1999.

En la mañana del 3 de noviembre de 2017, el Sr. Liu Shuhe, residente de la ciudad de Yantai en la provincia de Shandong, se encontraba en su casa cuando un grupo de agentes de policía irrumpió en el edificio. Se negaron a mostrar sus documentos de identidad y procedieron a registrar su casa. Confiscaron sus libros de Falun Gong antes de llevar al Sr. Liu a la comisaría local para interrogarlo.

Alrededor de las 5:00 de la tarde fue liberado. Pensó que el incidente había terminado, pero un año después, el 28 de noviembre de 2018, fue convocado por Zhang Meng, un procurador de la procuraduría del distrito de Mouping.

Zhang le preguntó sobre la práctica de Falun Gong y dijo que pronto lo acusaría.

Traumatizado por la amenaza de ir a la cárcel, el Sr. Liu cayó enfermo. Sus piernas se hincharon mucho. También tenía dificultad para orinar y tuvo que usar un catéter.

A finales de 2018, se mudó a la casa de su hija mayor para que ella lo cuidara.

El 20 de septiembre de 2019, la policía fue a la casa de su hija y arrestó al Sr. Liu. Lo llevaron al hospital para un examen físico, donde le diagnosticaron hipertensión arterial, palpitaciones cardíacas, cálculos biliares y acumulación de orina en los riñones. A pesar de su condición, la policía esa noche, lo mantuvo en el centro de detención de Mouping.

Al día siguiente, fue llevado al tribunal de Mouping y juzgado. El juez lo condenó a 2 años de prisión con una multa de 10.000 yuanes. Se le permitió volver a casa después del juicio.

El 19 de noviembre de 2019, la policía volvió a detenerlo. Lo llevaron al hospital para otro examen físico. Dos días después, el 21 de noviembre, a pesar de su mala salud, el juez ordenó a la policía que lo enviara a la prisión de hombres de Shandong.

Solía sufrir de alta presión arterial, problemas cardíacos y otras dolencias antes de comenzar con Falun Gong. Atribuye a la práctica la curación de sus enfermedades y el cambio de su mal carácter. Podía llevar objetos que pesaban 40 kilos hasta su apartamento del tercer piso sin sentirse cansado. También dejó de beber y se volvió más considerado con los demás.

Sin embargo, las detenciones repetidas a lo largo de los 20 años de persecución han afectado su salud. Su familia fue notificada recientemente por la prisión para que le enviara pañales. Están muy preocupados por él, sin saber si está recibiendo atención médica.