(Minghui.org) La ciudad búlgara de Stara Zagora, también conocida como "La ciudad de los poetas y los árboles de Tilo", acogió la Exposición Internacional "El Arte de Zhen, Shan, Ren" (Verdad-Benevolencia-Tolerancia) antes de su última parada en la capital de Bulgaria. La exhibición visitó Bulgaria del 19 al 27 de julio de 2018, y fue vista por docenas de visitantes en la biblioteca regional de Stara Zagora, Zacharyi Knyajevski.

Durante la apertura de la Exposición, dos ancianas se sorprendieron al ver que los artistas solo se mencionaban de paso en las anotaciones. Fue difícil para ellas comprender que tales artistas serían tan modestos. Más tarde, después de ver la obra "¿Dónde está papá?", que mostraba a una mujer con su hijo sosteniendo una foto del padre detenido por practicar Falun Dafa, comentaron que estaban al tanto de Falun Dafa y de la persecución, gracias a un documental que vieron en televisión.

Una pareja mayor que a menudo viajaba al extranjero y aprecia los diferentes tipos de arte compartió que lo primero que les gusta hacer es visitar las exposiciones de arte en su tiempo libre. Escucharon con gran interés la historia de cada pintura y luego contemplaron cuidadosamente cada uno de los lienzos.

En la pintura de "Vela de Loto", el esposo notó un halo alrededor de las cabezas de los practicantes torturados. También le interesó escuchar a un practicante local explicar que el cristianismo podría considerarse parte de la Escuela de Buda si se cultiva Shan (Compasión). Él y su esposa también estaban interesados en las esvásticas representadas y querían saber más sobre la persecución. La pareja condenó los crímenes del comunismo y agradeció saber que todavía hay personas que tratan de promover valores morales más elevados. Dijeron que esperaban que los jóvenes apreciaran y que también se sintieran inspirados.

Un joven que pasó una cantidad considerable de tiempo mirando todos los lienzos y leyendo las anotaciones también revisó cuidadosamente el catálogo de las obras de arte. Cuando lo cerró, tenía lágrimas en los ojos. Cuando se fue, sin compartir sus sentimientos, tomó un volante de Falun Dafa y agradeció a los practicantes.

Una mujer embarazada que vio la exposición, regresó al día siguiente con un amigo.

Una niña, que vino a ver la exposición con sus padres, insistió en tocar las pinturas e incluso hizo un dibujo en el libro de visitas. Sus padres se sorprendieron por la reacción de su hija.

Un artista local elogió el trabajo de las obras de arte y escribió en el libro de visitas: "La bondad salvará al mundo".