(Minghui.org) He cultivado Falun Dafa durante 22 años. Siguiendo los principios de Dafa de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, pongo mi corazón en mi trabajo y trato bondadosamente a mis compañeros de trabajo. Uno de ellos dijo: "¡Lo hace, verdaderamente, por nuestro bien!”.

Encarcelado y despedido injustamente

Una vez trabajé en la sucursal de una gran compañía farmacéutica estatal. En 2006, debido a la persecución del partido comunista a Falun Dafa, me arrestaron y me internaron en un campo de trabajos forzados, por mi fe. Mientras permanecí encarcelado, el director de la empresa matriz obligó a mi gerente a despedirme.

Algún tiempo después me encontré con alguien con quien trabajaba. Me contó que el director de la empresa matriz había muerto en un accidente de tráfico con tres mujeres jóvenes dentro de su auto, y que la compañía gastó mucho dinero para resolver el caso.

Se sorprendió al comprobar que esta noticia no me alegrara o resarciera. En realidad, sentí pena por aquel hombre ya que perdió su oportunidad, al no entender qué es Falun Dafa.

Pruebas de xinxing

Encontré un trabajo en una compañía farmacéutica mucho más pequeña después de que me permitieran abandonar el campo de trabajos forzados. Trabajé como ayudante del ingeniero Chen, que estaba a cargo de los proyectos de construcción de infraestructura de la empresa.

Mi salario era solo un tercio de lo que ganaba antes. Durante mi período de prueba, cuando vi en mi recibo salarial que la cantidad era solo una pequeña parte de mi anterior sueldo, me sentí muy decepcionado. Entonces, me dije: "Como practicante, tengo que dejar ir los apegos a la fama y al dinero. Mi tristeza me demuestra que todavía tengo algunos apegos”. Ajusté mis pensamientos rápidamente y me concentré en el trabajo.

Descubrí que al seguir los principios de Dafa: Verdad-Benevolencia-Tolerancia, Dafa ajusta todo. Mi xinxing mejora, y mis colegas son bondadosos conmigo.

El ingeniero Chen me pidió que le diera una tarea particular al carpintero. Cuando lo hice, me preguntó: "¿Quién eres? ¿Quién te dijo que hables conmigo? Ese no es mi trabajo. No tengo tiempo para eso".

En mi otra empresa me respetaban, pero aquí me desafiaban. Se lo conté al ingeniero Chen. Me llevó a ver al carpintero, quien rápidamente accedió a realizar la tarea, como si su mal genio anterior fuera solo para probarme.

No me sentí molesto, solo intenté entenderlo. Averigüé que era un carpintero de primera categoría pero que nunca había sido reconocido como tal. Le mostré respeto compartiendo algunas de sus tareas, compartiendo hojas de té frescas con él y comprándole bebidas en los días calurosos de verano. Con el tiempo, me aceptó. Me enseñó carpintería y me dijo que me veía como si fuera hijo suyo.

Ser una buena persona

El propietario dirige, él mismo, la compañía y si alguien comete un error, el dueño le descontará de su siguiente mensualidad. Pero no hay ninguna recompensa por un buen desempeño. Esto hacía que la gente tratara de evitarse responsabilidades.

Sentí que no debía preocuparme tanto por la ganancia o la pérdida personal. Shifu nos enseñó:

“Si siempre eres misericordioso, tratas a los demás benevolentemente, consideras a los demás al hacer cualquier cosa, y cada vez que se presenta un problema piensas primero si los demás podrán aguantar o no y si dañas a otros o no, entonces no surgirá ningún problema” (Zhuan Falun).

Por lo tanto, no evito tomar responsabilidades. En cambio, trato a mis colegas como a mi familia y hago lo mejor por ayudarlos.

Una vez, hubo una fuga en una tubería de agua subterránea. El gerente se marchó a casa después de las 5 p. m., dejándome a mí y al personal de servicio trabajando en el arreglo. Al ver al personal soldar aplicando calor, con la ropa empapada en sudor, les prometí que los llevaría a cenar después. Completaron el trabajo rápidamente. Los llevé a un bonito restaurante y pagué la cuenta de mi bolsillo.

El cuarto de las escobas, situado en la oficina de la recepcionista, tenía un problema en el drenaje. Le pedí ayuda al equipo de mantenimiento, pero se negaron porque ya lo habían reparado varias veces y la recepcionista seguía obstruyendo el desagüe. Traje a un contratista para reemplazar el drenaje de fino metal con uno de plástico más grueso.

En otro incidente, cuando estábamos arreglando un cable eléctrico en la oficina de otra recepcionista, le pedí al electricista que lo conectara con una línea de tensión más gruesa para que pudiera manejar los calentadores en invierno.

Un colega afirmó: "Solo tú puedes tomarte algo como esto seriamente”.

Algún tiempo después, cuando el ingeniero Chen se jubiló, el dueño de la compañía me ascendió a su puesto. Empecé a supervisar algunos proyectos de construcción y a administrar sus fondos. Muchas veces, los contratistas intentaban invitarme a restaurantes de lujo o entregarme regalos. Siempre me negué. Les advertía que era un practicante de Falun Dafa y que no tomaría nada que no me perteneciera.

La asistente de un contratista me dejó un cheque regalo. Le devolví el equivalente en efectivo a una ejecutiva de la misma compañía explicándole que mi fe me llevaba a un estándar más alto. Me respondió que me entendía y respetaba: "¡Una persona con creencias es, simplemente, diferente!”.

Otro proveedor de construcción quería regalarme un iPhone. "Conoces mis principios”, le manifesté. "No lo tomaré. Sé que no es fácil para usted ganar tanto dinero”. Me hizo un gesto de aprobación levantando su pulgar.

Shifu dijo:

“Dafa dizi, ustedes son una luz dorada en el mundo turbulento, la esperanza de la gente del mundo, discípulos del Fa que ayudan al Shifu, y futuros Reyes del Fa” (Saludo de felicitaciones, Escrituras esenciales para mayor avance (III))

Siempre he recordado esto. Me doy cuenta de lo valiosas y sagradas que son estas palabras.

Ayudando a la gente a entender Dafa

Ya que las personas me estiman y confían en mí, me es más fácil contarles acerca de Falun Dafa. Muchas personas en la compañía ahora saben que practico Dafa. También saben que los cultivadores son amables, honestos y buenos.

Un colega dijo: "Miren a los miembros del partido comunista. ¿Hay alguno mejor que un practicante de Falun Dafa?”.

Después de aconsejar a un joven gerente que renunciara al partido, me respondió: "Si te sigo, siempre tendré comida y bebida", lo que significa que comprendió que recibirá buena fortuna si sigue mis consejos en cuanto a apoyar a Falun Dafa y renunciar al partido.

Cuando voy a visitar un sitio de construcción, trabajo con los albañiles y, a veces, les compro bebidas. Muchos han dicho: "Eres más bondadoso con nosotros que nuestro propio jefe". A menudo les llevo materiales sobre Dafa y la persecución. Algunos disfrutan leyéndolos y, con frecuencia, me piden que les lleve más.

Cuando hablo con los trabajadores nuevos acerca de Dafa, el personal les advierte: "Es un buen hombre. Lo que hace es verdaderamente por nuestro bien”.

(Presentación para "Celebrar el Día Mundial de Falun Dafa" 2018 en el sitio web de Minghui)