Hombre de 69 años detenido por colocar un adhesivo con las palabras: "Falun Dafa es bueno"

(Minghui.org) Un vecino de 69 años de edad de la ciudad de Harbin permanece detenido tras ser arrestado el 24 de mayo de 2018, por colocar una pegatina autoadhesiva con la leyenda "Falun Dafa es bueno" en un lugar público. Los colegas y amigos del Sr. Zhao Lin piden su liberación.

Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, es una disciplina espiritual y meditación de la Escuela Buda basada en los principios universales de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Sin embargo, el régimen comunista chino persigue a este grupo desde julio de 1999.

Registraron la casa del Sr. Zhao poco después de arrestarlo. Entre los responsables se encontraban el Jefe Wang Shengguo de la comisaría de Xianfenglu y sus agentes, Liu Sheng y Fu Bohan; Zhang Xumin de la oficina de seguridad interior de Nangang; y el agente Sun Baochuan de la comisaría de Tongtian.

Su nuera y su nieto de un mes de edad, que también viven con él, se aterrorizaron cuando la policía irrumpió y saqueó su casa.

Su esposa visitó muchas veces a Zhang Xumin para solicitar la liberación de su esposo. Zhang la insultaba al tiempo que amenazaba con arrestarla.

Zhang presentó el caso ante la procuraduría del distrito de Nangang el 20 de junio. El Sr. Zhao se enfrenta ahora a una acusación por mantenerse fiel a su fe.

Colegas y amigos alzan su voz en defensa del Sr. Zhao

Aunque la familia del Sr. Zhao no tenía mucho dinero, él siempre se preocupaba de mantener a sus seres queridos. Buscaba consuelo fumando y bebiendo ya que no vislumbraba ningún tipo de esperanza en la vida. Sin embargo, su perspectiva cambió completamente después de que comenzó a practicar Falun Gong en 1996. Dejó de fumar y de beber, y encontró un punto de vista más brillante en su vida. Además recobró la salud.

Era gerente de almacén en 'Harbin Bearing Factory' antes de jubilarse. Mientras que muchas personas en posiciones similares se llevaban a casa artículos del inventario de sus compañías, él no lo hacía porque Falun Gong le enseñó a no aprovecharse de los demás.

Encontró trabajo en una compañía de telecomunicaciones después de jubilarse. Su nuevo jefe a veces no podía pagar a sus trabajadores, así que él incluso prestaba el dinero de su pensión para ayudar a sus colegas.

Su nuevo trabajo le exigía patrullar y vigilar los tendidos de cables. Lloviera o tronara, siempre hizo bien su trabajo. Se ganó la confianza y el respeto de su jefe y colegas.

Resultó atropellado por un ciclomotor eléctrico en 2013 cuando se dirigía en su bicicleta a revisar algunas líneas de cableado. El accidente le ocasionó numerosas lesiones, como la rotura del puente de la nariz. Incluso se desmayó debido al impacto. Cuando volvió en sí, le dijo al conductor del ciclomotor que no se preocupara y que no buscaría compensación porque no lo había golpeado intencionalmente.

Cuando regresó a trabajar unos días después, sus colegas no daban crédito a que hubiera manejado el asunto del accidente de la manera en que lo hizo. Explicó que como practicante de Falun Gong, era su segunda naturaleza ser considerado con los demás bajo cualquier circunstancia.

Tanto sus excolegas como los actuales, y sus amigos, quedaron consternados al enterarse de su detención y pasaron a la acción defendiendo su derecho constitucional a la libertad de creencias y exigiendo su liberación.