(Minghui.org) El Sr. Cheng Huaigen vivía en la ciudad de Chengdu. Fue arrestado el 13 de mayo de 2015, por colgar una pancarta que decía: "El mundo necesita Verdad-Benevolencia-Tolerancia".

Verdad-Benevolencia-Tolerancia son los principios centrales de Falun Dafa, una disciplina espiritual que está siendo perseguida por el régimen comunista chino.

El Sr. Cheng fue condenado a 4 años de prisión y murió el 29 de mayo de 2017, menos de un año después de haber sido recluido en la prisión de Jiazhou. Tenía 54 años.

La prisión no explicó a su familia cómo murió. Una rápida mirada a su cuerpo no mostró ninguna herida o moretón visible. Sus seres queridos no podían creer que un hombre que alguna vez estuvo sano, muriera tan joven y sospecharon que podría haber sido abusado en prisión.

Más de un año después de su fallecimiento, la nueva información disponible ha revelado que el Sr. Cheng había sido efectivamente maltratado en prisión.

Según información privilegiada, el Sr. Cheng fue admitido en la prisión de Jiazhou en junio de 2016. Apenas un mes después, fue llevado apresuradamente a un hospital de la policía por síntomas no especificados. Fue devuelto a la prisión en noviembre de 2016, pero nunca se recuperó.

Como él se negó firmemente a escribir declaraciones para renunciar a Falun Dafa fue castigado. Una forma de abuso que sufrió duró desde enero hasta a mayo de 2017; solo le daban 15 segundos para comer cada comida, que generalmente era avena. Por lo general, solo podía tomar un par de sorbos de sopa de avena antes de que terminara el tiempo.

A partir de febrero de 2017 se le ordenó caminar o correr alrededor del campo. Este llamado "entrenamiento" se realizaba diariamente desde las 8 de la mañana hasta las 5:40 de la tarde. El único descanso era de unos 30 minutos para almorzar.

Se lo obligó a permanecer de pie durante largos períodos de tiempo después de regresar a su celda. No se le permitió dormir hasta después de las 10 p. m. Incluso después de acostarse, dos reclusos fueron asignados para vigilarlo las 24 horas para evitar que se levantara en medio de la noche para hacer los ejercicios de Falun Dafa o encontrar algo para comer.

Este abuso duró hasta abril de 2017. El Sr. Cheng se negó a abandonar su creencia en Falun Dafa. Dos guardias lo llevaron a un lugar sin cámaras de vigilancia y lo agarraron de la mano para tomar sus huellas dactilares en una declaración preparada de antemano denunciando a Falun Dafa.

El Sr. Cheng había sido reducido a piel y huesos para mayo de 2017. También lo obligaron a tomar píldoras desconocidas todos los días. Su familia recibió una llamada de la prisión el 29 de mayo de 2017 diciendo que estaba muriendo. Cuando se apresuraron a ir al hospital, él ya había fallecido.