(Minghui.org) Comencé mi viaje de cultivación en 2008 después de que mi hija, quien vivía en otro estado, siguiera llamándome e insistiendo que leyera un libro en particular que acababa de encontrar.

Como estaba ocupado en ese momento con mi trabajo de acupunturista, no me entusiasmaba demasiado tomarme un tiempo para leer un libro. Pocos meses más tarde, le hice una visita, y puso en mis manos el libro que había insistido en que leyera, y me dijo que me lo llevara a casa. Miré la portada, que era de un azul precioso, con las palabras Zhuan Falun impresas en dorado, y de alguna manera me sentí en paz. Acepté leerlo.

Sin embargo, antes de comenzar a hacerlo, mi salud me dio un susto.

Un pequeño lunar en la parte superior del brazo había comenzado a crecer rápidamente y cambió de color marrón claro a oscuro. Los amigos y la familia también lo habían notado e insistían en que acudiera al médico. Sentí que ese no era el camino a seguir, no tenía fe en que pudieran ayudarme.

Luego, cuando leí Zhuan Falun por primera vez, instintivamente supe que el Maestro Li Hongzhi [el Autor del Libro y el Fundador de Falun Dafa] era alguien en quien depositar mi confianza, y así lo hice.

Unas semanas más tarde, me desperté una noche con una extraña sensación en el brazo donde estaba el lunar, justo como si alguien se inclinara sobre mi brazo y usara un láser apuntando al lunar. Al día siguiente, el lunar se veía y se sentía diferente, y pasados uno o dos días, se convirtió en una costra y se cayó, dejando una piel rosada y clara. Sabía que era el Maestro Li quien me había salvado, y estaré eternamente agradecido a Shifu.

Mientras continuaba leyendo Zhuan Falun una y otra vez de principio a fin, me di cuenta de que no era un libro ordinario, y deseaba seguir las enseñanzas. Principios simples y muy profundos a seguir: Verdad, Benevolencia, Tolerancia. Sin embargo, aprender a cambiar mi forma de pensar no fue fácil, y cada vez que no pasaba una prueba, me sentía como abatido. Traté de aprender de los errores que cometí, y era posible a veces, pero muchas veces me parecía demasiado difícil.

Aquí, me gustaría recordar las palabras de Shifu:

"…si parece difícil de realizar y dicen que es difícil, entonces prueba un poco, a ver si realmente va o no va. Si de veras puedes llevarlo a cabo, descubrirás realmente que, ¡tras el verde oscuro del sauce, se hallan resplandecientes flores y otra nueva aldea!" (Novena Lección, Zhuan Falun).

A menudo he estado decepcionado conmigo, porque sé que a veces me relajo. Pero aumentar el tiempo para el estudio del Fa me ha ayudado cuando ha sido más difícil.

El propio yeli debe ser disuelto 

He sufrido muchas tribulaciones físicas a lo largo de mi cultivación, algunas incluso muy graves. Y me he mantenido firme en mi sendero para llegar a ser una mejor persona, además, en lugar de tomarlos como síntomas de enfermedad, he tratado cada tribulación como una manera de eliminar el yeli (karma) y no como algo a lo que hay que temer. Si tienes yeli, (karma) tiene que disolverse, y eso generalmente implica un proceso doloroso.

A lo largo de los últimos diez años, mi modo de pensar ha evolucionado, y puedo ver a los demás con más benevolencia, sabiendo que si estás vivo en este mundo debes estar sufriendo también. Cultivarse es verdaderamente una forma de salir del barro, y tal vez el único camino.

Es tan importante solo levantarte tú mismo y estar más determinado a tener éxito. Las lecciones son interminables, es un viaje de vida para tener éxito en la cultivación, y sé que seguiré decidido a hacerlo mejor. Lo haré mejor.