(Minghui.org)
Hola Shifu, hola practicantes.
Nunca me he considerado una persona envidiosa y al principio de mi cultivación me parecía que las palabras de Shifu sobre la envidia eran solo para los asiáticos. Sin embargo, los celos y la mentalidad competitiva se convertirían en grandes obstáculos en mi xiulian.
Un día una colega me pidió que resolviera un problema matemático para ella. Eventualmente llegué a la solución. Al mismo tiempo ella también llegó a una solución pero obtuvo un resultado diferente. Después de hacer comparaciones, le dije que como mi método era más elegante, probablemente no tenía error así que mejor revisara su método para encontrar el error. Parecía un asunto menor, pero mientras iba a casa en la bicicleta después del trabajo, comencé a sentirme muy incómodo. ¿Por qué la traté así? De repente me di cuenta que mis sentimientos de celos eran muy fuertes. Tengo que admitir que no podía soportar que ella haya encontrado la solución -¡y a la misma velocidad que yo! Recordé las palabras de Shifu sobre la envidia y me calmé.
En casa revisé mi propia solución. Para mi sorpresa mi solución tenía el error y el de mi colega estaba bien. Al día siguiente le hice saber que ella tenía razón. Me sentí muy calmado porque había reconocido un gran apego y renunciado a una parte de la envidia alimentada por mi mentalidad competitiva. Esa noche tuve una meditación muy tranquila y me sentía muy liviano. Me sentí liberado con esta elevación de mi xinxing pero no sabía que esto era solo el comienzo de mi lucha contra el apego a la envidia y competencia.
Tenía que compartir mi oficina con un colega nuevo que me irritaba a menudo. Siempre que le preguntaba algo, no me daba una respuesta directa, sino que me comenzaba a explicar todo desde el comienzo como si yo no supiera nada. ¿Por qué siempre tenía que usar tantas palabras y tomar tanto de mi tiempo, y por qué siempre intentaba ostentar su conocimiento tanto?
En realidad es muy común y normal que la gente luche y compita por quién tiene razón y quién tiene el mayor conocimiento por las nociones adquiridas en el mundo humano. Yo fui criado en círculos académicos para no cometer errores y siempre probar que soy el mejor.
Eventualmente tuve que admitir que hacía lo mismo que mi colega y que también ostentaba mi conocimiento y competía: de hecho simplemente no podía soportar que poseyera tanto conocimiento. La envidia también era la raíz de este problema y tenía que removerla. Dejé de prestar atención a mi colega y decidí mirar hacia dentro, para cultivarme, y dejar ir esta mentalidad competitiva. La situación en el trabajo mejoró considerablemente.
Sin embargo, el apego a la envidia y la mentalidad competitiva iban mucho más profundo y entró en un reino más peligroso en algunos casos. En el trabajo podía dejar ir y ser desinteresado con las cosas personales y la fama, y todo parecía andar bien. Sin embargo, pronto, esta mentalidad giró hacia el ambiente de cultivación. El número de actividades de la rectificación del Fa había incrementado. Comenzamos a salir más para repartir volantes y contactar al gobierno, medios, sitios web, etc. Hice lo mejor que pude para hacer el trabajo de la rectificación del Fa, pero lentamente y casi sin notarlo comencé a desarrollar pensamientos de envidia y competencia cuando veía que otros practicantes hacían cosas. Especialmente cuando hacían cosas que yo no podía, me desequilibré y comencé a sentir que yo no era lo suficientemente bueno. Esto duró por un largo tiempo y nunca mejoró mi estado.
En vez de eliminar el apego y mirar hacia dentro, dirigí mi atención hacia afuera, dirigí mi atención hacia afuera sin ser consciente que yo mismo estaba causando el problema. Lo más fuerte era que desaprobaba algunas de las acciones de los practicantes y los criticaba en mi mente, porque aparentemente no se conformaban a mis propias ideas o entendimientos del Fa. Yo usaba muchas palabras para explicar mis propias ideas. Parecía como si mi atención estaba puesta en los practicantes a los que consideraba negativos y los criticaba en vez de eliminar mi mentalidad competitiva y envidia en mí, que era lo que causaba problemas. Incluso llegué tan lejos como considerar algunos problemas que tuvieron los practicantes como retribución por hacer mal las cosas. Un ejemplo fue cuando algunos practicantes, occidentales entre ellos, fueron a China y los atraparon.
La presión en mí creció hasta que un día tuve suficiente y recordé las palabras del Maestro sobre la envidia y comencé a mirarme hacia adentro. ¿Por qué criticaba tanto a algunos practicantes en mi mente, mientras que Shifu enseñaba en Zhuan Falun que los practicantes son considerado lo más preciado?
Los practicantes son personas preciadas. ¿Por qué estaba mirando así a los practicantes? Era como si estuviera muy ocupado probando a los practicantes en mi mente, y aprobándolos en mi mente solo si sus acciones se conformaban con mi entendimiento del Fa. Shifu dijo en “Exponiendo el Fa en el Fahui del Oeste de los Estados Unidos”:
“Pero en cuanto a nuestro Dafa, déjenme decirles que nadie es digno de probarle. Ya que todo ser, y esto incluye cada ser en el cosmos, es creado, hecho y formado por él, nadie es digno de probarle”.
¿Qué estaba haciendo? ¿Me había puesto del lado de las viejas fuerzas y estaba apoyando la persecución a los practicantes de Falun Gong? ¿Era yo digno de probar a los practicantes? Era como si el entero sistema de celos de las viejas fuerzas estuviera hablando a través de mi cuerpo. De repente podía hacer la distinción. Mi voluntad se fortaleció: “No quiero ser así. ¡Este no soy yo! ¡Tú no eres yo! Intentas hacerme celoso, pero me niego. Me niego a ser envidioso y no me importa cuánto intentes. Sin importar cuán envidioso intentes ponerme, me niego a serlo, y me niego a tomar parte de la persecución a los practicantes”. Mantuve fuerte el timón para seguir a Shifu en el mar de Dafa y me negué a ser influenciado por las viejas fuerzas.
Desde ese tiempo la situación en mi práctica de cultivación ha mejorado bastante. La raíz de este problema fue removida y cuando algunos elementos de esto regresan, soy capaz de detectarlos. Con la ayuda de estos pensamientos rectos, mis críticas hacia los practicantes se han convertido en un poderoso apoyo. Me siento cercanamente conectado a los practicantes y desde entonces he experimentado muchos momentos conmovedores en los cuales fui verdaderamente feliz desde el fondo de mi ser cuando vi a otros practicantes hacer cosas de Dafa. Soy la persona de contacto de uno de los sitios de práctica, y una vez vi a un practicante explicando los ejercicios a alguien que pasaba. Usualmente yo explico los ejercicios en ese sitio, pero después de haber perdido mis apegos, me conmoví profundamente y sentí el campo recto hacerse más fuerte cuando miraba al otro practicante demostrar los ejercicios con tanta compasión.
Después de leer las palabras del Maestro en “Exponiendo el Fa en la ciudad de Los Ángeles” este año, mi entendimiento de los celos y la mentalidad competitiva se profundizó. Shifu dijo:
“Por eso es que ellos están pensando: “Ya que este asunto nos involucra, ¿cómo podemos permitirle hacer lo que quiera con nosotros? Yo, al igual que otros, tengo incontables seres conscientes, y yo también quiero intentar ser elegido”.
Después de leer esto, se me ocurrió el pensamiento de que cada practicante pertenece a un increíble número de seres en el cosmos y que hay muchos seres en su cuerpo. Los seres correspondientes a mí quieren ser elegidos y lo intentan por todos los medios posibles. Pensé que cada movimiento de ellos puede manifestarse en la superficie de mi ser como mentalidad competitiva, ostentación, y celos, en ideas de que tengo razón y en criticar a los practicantes, etc., cualquier pensamiento que parece mío pero que realidad no vienen de mí.
Shifu dijo en “Exponiendo el Fa en el Fahui de Filadelfia, Estados Unidos, 2002”:
“Como he dicho, todo lo que pasa hoy en la sociedad común es el resultado de los apegos de los Dafa dizi. A pesar que las viejas fuerzas existen, si ustedes no tienen aquellos apegos, ellos no pueden hacer nada”.
Reforzar los pensamientos rectos y remover el apego a la envidia y la mentalidad competitiva hace que estos seres sean incompetentes.
Shifu enseñó en el mismo jingwen: “¿cuál es la verdadera razón de esta persecución? Simplemente los celos de un bufón”. He puesto mi lucha contra la envidia y la mentalidad competitiva en palabras, porque ha sido realmente difícil atravesarlas. Me gustaría citar unas palabras del libro Falun Gong, y espero que los practicantes presten atención a esto:
“La envidia es un obstáculo tremendo en la práctica de gong y tiene gran influencia sobre el practicante. Afecta directamente su potencia de gong, hace daño a sus compañeros de cultivación e interfiere seriamente en nuestra cultivación hacia niveles altos. Un practicante de gong debe eliminar el corazón de envidia al ciento por ciento. Pero algunos, pese a haber llegado a cierto nivel, simplemente no pueden eliminarlo. Además, cuanto más difícil les resulta abandonarlo, tanto más éste se intensifica”.
Mi entendimiento es que la parte de “hace daño a sus compañeros de cultivación” se refiere a mis compañeros practicantes y a mí.
Como practicantes tenemos que exponer estos apegos dañinos juntos si surgen entre nosotros, ayudarnos y apoyarnos para sobrepasarlos, y mantener recto nuestro sendero de la rectificación del Fa.
¡Gracias Shifu! ¡Gracias practicantes!
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