(Minghui.org) Solía tener mal genio y a menudo peleaba por cuestiones menores. Si alguien me ofendía, nunca lo perdonaba. Usaba un lenguaje muy duro para maldecir a la gente. Incluso yo misma no me consideraba una buena persona.
Un día, un compañero de trabajo me presentó Falun Dafa. Le pregunté si una mala persona como yo puede cultivarse en Dafa. El dijo: "¡Sí! Dafa puede cambiar todo".
Así que pedí prestada una copia de Zhuan Falun (el libro principal de Falun Dafa). Terminé el libro en dos días. "Esto es lo que he estado buscando", pensé. "Ofrece respuestas a muchas de mis preguntas sobre la vida". Con un profundo suspiro de alivio, declaré en mi corazón: "¡Finalmente encontré a mi Maestro!".
"Si algo es tuyo, no lo perderás"
Desde que comencé a leer los libros y hacer los ejercicios, me han sucedido muchos cambios. En mi trabajo diario, trato de hacer lo mejor para seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.
Soy una vendedora de muebles en un centro comercial. Este es un campo muy competitivo. Los representantes de ventas compiten intensamente. Después de comenzar a practicar, nunca competí con otros por negocios. En cambio, trato de ser compasiva y perdonar.
Una vez, hablé con un cliente sobre mis productos. Le gustaba el mío y estaba a punto de firmar el contrato. Pero una vendedora de otro puesto se acercó y le pidió que fuera a su estand. Antes yo habría peleado con ella y presentado una demanda contra la autoridad del centro comercial, porque lo que ella hizo fue en contra de la política del centro comercial. Probablemente ella perdería su trabajo o al menos tendría que pagar una multa.
Pero, como practicante, no lo hice. Me dije: "Cultivo Falun Dafa. Necesito ser compasiva y poner a los demás primero. No debería hacer que pierda su trabajo por esto".
Entonces, le dije al cliente: "El mobiliario es caro, debería hacer la comparación. Adelante, eche un vistazo al de ella y compre lo que mejor se adapte a usted". Sonrió y me dio las gracias. Después de un rato, regresó y compró el mío.
Gracias a este incidente, tuve una comprensión más profunda de la enseñanza del Maestro:
“…si algo te pertenece, no lo pierdes, y si algo no es tuyo, no lo consigues por más que luches” (Zhuan Falun).
Si realmente siguiera esta enseñanza del Maestro, no perdería lo que me pertenece. Pero en este proceso, puedo cultivarme y deshacerme de las malas ideas y apegos, como la competitividad y el egoísmo.
"Hago negocios contigo, porque no mientes"
Vendo muebles de lujo, que son bastante caros. Cuando hablo sobre mis productos a los clientes, nunca miento. Una vez, un cliente me preguntó de dónde venía la madera, le dije que venía de África. Solo hay dos orígenes de este tipo de madera, África y Asia meridional, y la madera africana es más barata.
Él asintió y dijo que necesitaba mirar otras opciones.
El segundo día, regresó y dijo: "Firmemos el contrato. Elegí hacer negocios con usted, porque usted no miente". Resultó que fue a otro centro comercial y vio los mismos muebles hechos con los mismos materiales, pero el vendedor le dijo que los materiales provenían del sur de Asia.
"Ellos son mentirosos, me mintieron sobre los materiales. Quién sabe si mintieron sobre otras cosas", dijo. Luego compró los muebles, que costaron más de 100.000 yuanes (aproximadamente de 20.000 a 30.000 dólares americanos).
Esto me hizo pensar. Si yo no cultivara Falun Dafa, habría sido una de esas mentirosas a las que se refirió. Hoy en día, la gente usa todo tipo de trucos para ganar dinero. Esto hace que sus vidas sean tan estresantes. Tengo suerte de ser practicante de Falun Dafa. El Maestro me enseñó a seguir Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Mi vida es feliz y fácil.
Compañera de trabajo: "Admiro a los practicantes de Falun Dafa desde el fondo de mi corazón"
A menudo conversaba con una de mis compañeras de trabajo, la Sra. Chen, y le hablaba sobre Falun Dafa. Ella apoyó y aceptó renunciar al partido comunista.
Sin embargo, un día se enojó conmigo por algo menor que no fue mi culpa. Desde entonces, me isultaba cada vez que se encontraba conmigo. Incluso nuestro supervisor le dijo: "Ya es suficiente. Ella nunca se ha defendido ¿Por qué no lo olvidas?".
Un día, mi hermano vino a mi lugar de trabajo y la Sra. Chen comenzó a maldecirme. Mis compañeros de trabajo dijeron: "Es demasiado. ¿Por qué no te defiendes? Si comienzas, te ayudaremos". Sonreí y les dije que soy una practicante de Falun Dafa, y que no haremos eso.
"Ella es una persona mayor. Si pelamos y se enoja, eso dañará su salud", le dije. Mis compañeros de trabajo dijeron: "Solo los practicantes de Falun Dafa pensarían en otros en tal situación". Uno dijo: "Admiro a los practicantes de Falun Dafa. La propaganda del gobierno sobre Falun Gong ha sido todo mentira".
Un día, vi que a la Sra. Chen le costaba hacer algo. Le dije: "Hermana, déjeme ayudarla". Me respondió con dureza: "¡No!". Le dije con sinceridad: "Por favor, no se enoje conmigo. Si hice algo mal, por favor dígame, yo lo arreglaré. Estar enojada no es bueno para su salud". Ella no dijo nada.
Para mi sorpresa, al día siguiente vino hacia mí con una bolsa de caramelos. "Esto es de la boda de mi hijo. Es solo para ti", dijo con una gran sonrisa.
Después de eso, les dijo a todos: "Los practicantes de Falun Dafa son buenas personas".
"En ti, veo lo que es la verdadera rectitud"
En el trabajo, soy muy responsable. Lleno los pedidos de productos y los reviso cuidadosamente. Una vez, estaba interesada en un tipo de muebles de lujo. Lo recomendé a mi supervisor. Él y otro personal de ventas pensaron que era demasiado caro y que poca gente lo compraría. Yo dije: "Déjame intentarlo".
Los muebles resultaron ser populares. Hemos superado a otras tiendas en el centro comercial.
Unos meses más tarde, una compañera de trabajo le preguntó a nuestro supervisor si podría estar a cargo de este producto, preguntó muchas veces. La antigua yo no cedería. Este producto me había traído mucha comisión. Además, el supervisor y esta vendedora estaban en contra de este producto en aquel entonces. Yo tenía muchas razones para no darle mi lugar.
Sin embargo, soy una practicante que debe tomar el interés propio a la ligera y poner a los demás primero. Iba a decir que sí. Pero se me ocurrió una segunda idea: si tan solo estuviera de acuerdo tan fácilmente, ella y otras personas pensarían que simplemente estaba cediendo a la presión del supervisor. Debería honrar a Falun Dafa y hacerles saber que lo hago porque practico Falun Dafa.
Entonces, le dije al supervisor, ¿por qué no lo sorteamos? El acepto. Mi producto es A, y el de ella es B. Dejaré que ella lo sortee. Ella obtuvo B. La segunda vez, obtuvo B nuevamente. Esto ya debería haberle puesto fin. Pero le dije: "Démosle una oportunidad más, y si ella consigue A, le dejaré que se haga cargo de mi producto". Pero obtuvo la B de nuevo.
Se fue enojada y amenazó con renunciar porque el producto B no daba dinero.
El segundo día, le dije al supervisor: "Tráela de regreso, no es fácil encontrar un vendedor experimentado. Deje que se haga cargo de mi producto, creo que hará un buen trabajo".
El supervisor estaba muy feliz, "los practicantes de Falun Dafa son realmente amables, en ti veo lo que es la verdadera justicia". Sonreí: "Falun Dafa es recto". Me dio las gracias y le dije: "Deberías agradecer a mi Maestro, que me enseñó a hacerlo".
Me hice cargo del producto B e hice todo tipo de cambios en la exhibición. Pronto, hice una gran venta, y los negocios mejoraron cada mes. A esa vendedora, sin embargo, no le fue bien con el producto A. Eventualmente renunció.
Pensé en las palabras del Maestro:
"Por supuesto, no es que realmente seamos tontos, es solo que tratamos muy ligeramente el asunto de nuestros beneficios personales, mientras que en todos los otros aspectos somos muy sabios. Cuando realizamos un proyecto de investigación científica, en cuanto a las tareas asignadas por los superiores o con respecto a cumplir algún trabajo, hacemos todo muy bien, con mucha racionalidad y lucidez. Solo tomamos con ligereza lo concerniente a nuestros beneficios personales y conflictos interpersonales. ¿Quién va a decir que eres tonto? Nadie va a decir que eres tonto; está garantizado que es así" (Zhuan Falun).
Mi supervisor estaba realmente agradecido. Desde entonces, me ha dado más negocios. Él también apoyó a Falun Dafa. Un día, un cliente le preguntó si había practicantes de Falun Dafa en el centro comercial, tal vez para encontrar un vendedor honesto. Él dijo: "Sí, lo hay. Deseo que todos mis empleados practiquen Falun Dafa. Estos practicantes son sobresalientes".
Haciendo 480.000 yuanes en un día
Nunca trato de competir con mis compañeros de trabajo, pero siempre hago lo mejor en ventas y hago la comisión más alta cada mes. Sé que no es porque soy la mejor en ventas; es porque soy bendecida por Falun Dafa.
Muchos milagros han sucedido en mi trabajo diario.
Un día de 2008, dos vendedores se burlaron de mí: "Hoy hemos hecho dos ventas. Tú, ninguna". Sonreí: "No te preocupes, los negocios mejorarán".
Inmediatamente después, un cliente que me había comprado muebles antes entró y dijo: "Compré otro apartamento y necesito un conjunto completo de muebles para la sala de estar, el dormitorio y la cocina. ¿Me puede dar una cotización?".
Costó 200.000 yuanes (aproximadamente 30.000 dólares americanos). Él firmó el contrato y se fue a otro estand. El vendedor de ese puesto preguntó: "¿No acabas de firmar el contrato? ¿Por qué sigues buscando?". Él dijo: "Tengo otro apartamento que necesita muebles". Ese vendedor se emocionó y trató de venderle el mismo juego a un precio más barato, pero tendría que esperar unas semanas.
Regresó conmigo y me dijo: "Voy a comprar el mismo juego aquí contigo. Simplemente haz otro contrato al mismo precio. Pagaré en efectivo hoy. Me gusta hacer negocios contigo. Contigo no tengo preocupaciones".
Así que gastó 480.000 yuanes y pagó en efectivo (aproximadamente 70.000 dólares americanos).
La noticia se expandió y todo el personal de ventas del centro comercial se asombró y sorprendió. ¡Casi 500.000 yuanes se gastaron en una tienda en un día! Un compañero de trabajo preguntó en voz baja: "¿Te ayudó tu Maestro?". Sonreí, "Sí, aquellos que siguen las enseñanzas de Falun Dafa son bendecidos por nuestro Maestro".
Gracias, Maestro
En realidad, hay muchos milagros en las últimas décadas. No lucho por intereses personales ni pido ascensos, pero siempre recibo la comisión más alta cada mes y la bonificación más alta. Todas estas son las bendiciones traídas por Dafa.
Shifu me ha dado tanto. A menudo pienso: "Soy la persona más feliz. Es muy bueno tener al Maestro Li".
No soy buena en la escritura. No sé cómo expresar mi agradecimiento al Maestro Li. Le agradezco a Shifu por enseñarme Falun Dafa y por transformarme de ser una persona extremadamente egoísta y de mal genio a una persona compasiva y pacífica que siempre pone a los demás en primer lugar.
¡Gracias Maestro!
(Presentación de "Celebrando el Día Mundial de Falun Dafa" en 2018 en el sitio web de Minghui).
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Categoría: Caminos de cultivación