(Minghui.org) Tengo 55 años y vivo en Brasilia, la capital de Brasil. El 10 de julio de 2017, regresé a casa alrededor de las 9 p. m., cené, me duché y hablé un poco con mi tía, con quien vivo. Me fui a la cama.

A la mañana siguiente, me desperté alrededor de las 3:30 como de costumbre para preparar el desayuno. Me caí al suelo y no pude moverme, no pude hablar. No tenía idea de lo que estaba pasando. No sé cuánto tiempo estuve en el suelo. Todo lo que supe fue que ya eran las 6:30 de la mañana.

A mi tía le pareció extraño que mi puerta siguiera cerrada. Entró a mi habitación y me encontró tirado en el suelo. Me dijo que había tenido algún tipo de convulsión y que llamaría a la ambulancia.

Me llevaron rápidamente a un hospital público, donde esperé ocho horas antes de que un médico pudiera verme. El lado izquierdo de mi cuerpo estaba paralizado.

Después de diez días en el hospital, todavía no pude hablar ni caminar, ni siquiera para ir al baño. Mi tía me ayudó, y le fue difícil porque ella es mucho más pequeña que yo. Tuve que dormir con pañales.

Dos días después de regresar del hospital, mi tía recordó que tenía una amiga china que realizaba acupuntura. La invitó a verme al día siguiente. Cuando entró a mi cuarto, vi que tenía una cara muy agradable, amable, tranquilizadora y gentil. Sentí que tenía un aura agradable -un halo, energía o luz a su alrededor.

Me preguntó qué había pasado. Luego me pidió que me recostara y comenzó a aplicar las agujas de acupuntura. Cuando nos dejaron solos, comenzó a contarme sobre algo llamado Falun Dafa.

Nunca antes había oído hablar de Falun Dafa, pero mientras ella hablaba, yo sentía que podía verlo frente a mis ojos como si fuera una película. Todo lo que me decía era exactamente lo que siempre había pensado que era posible durante toda mi vida: cómo funciona el universo, cómo funciona la energía.

"Sabes que me estás contando cosas en las que siempre he pensado pero que nunca había sido capaz de formular", le dije. "Me estás diciendo exactamente lo que siempre he pensado".

Ella dijo que lo que me estaba contando provenía de las enseñanzas del Sr. Li Hongzhi, quien había escrito un libro llamado Zhuan Falun. Me habló de una antigua técnica china de meditación que era buena para el cuerpo, la mente y el espíritu. Le dije que me interesaba mucho porque ya sabía lo que me decía. Me prestó el libro y empecé a leerlo enseguida. Una hora después de su partida, yo ya había leído una gran cantidad de páginas y realmente entendía las enseñanzas del Maestro Li.

Empecé a hablar de nuevo. Esa misma noche, pude ir al baño yo solo. Me despedí de esos pañales para siempre.

Desde entonces, he redescubierto el camino hacia una vida más sana y feliz que está más alineada con los valores universales de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. He cambiado mi vida completamente y estoy más relajado.

Antes de leer Zhuan Falun, cuando la gente era grosera conmigo, yo también les respondía groseramente. Ahora, me restrinjo más. Soy mucho más positivo, tal vez no al cien por cien todavía, pero mucho más de lo que nunca fui.

Ahora soy más tolerante y trato de actuar con un corazón amoroso. Desde entonces he estado estudiando los libros de Falun Dafa y practicando los ejercicios. Cuando hice los ejercicios por primera vez, me dolía el cuerpo, pero perseveraba porque sabía que estaba eliminando yeli (karma). Ahora ya no siento tanto dolor, casi ninguno.

El autor y otros practicantes estudiando los libros de Falun Dafa y haciendo los ejercicios.

Mi vida es mejor ahora. A veces veo una luz dorada que emana del libro mientras leo, y es muy vívida. El otro día vi un Falun sobre mi cabeza mientras practicaba los ejercicios en casa. Todas mis preguntas son contestadas una vez que las dirijo al Maestro o al universo.

Mi salud ha sido completamente restaurada. He decidido no tomar la mayoría de las píldoras que me recetó el médico porque confío en que el Maestro está cuidando de mí. Él ha reorganizado mi vida, así que ya no necesito médicos ni recetas.

Ahora llevo una vida más sana y feliz, gracias al Maestro y a Falun Dafa. Solo espero merecer la ayuda y el cuidado que recibo del Maestro y de Dafa.

(Artículo presentado para la “Celebración del Día Mundial de Falun Dafa” 2018 en el sitio web de Minghui)