La importancia de vigilar todos nuestros pensamientos

(Minghui.org) No podía dormir después de enviar pensamientos rectos a la medianoche del 19 de agosto de 2017. Cuando me di vuelta, de repente me sentí con ganas de vomitar. Escupí un poco de saliva en el baño, y luego me recosté de nuevo. Varios minutos después, mi estómago comenzó a sentirse revuelto, así que fui al baño otra vez.

Reacción violenta

Me agaché en el suelo, sintiendo mucha náusea. Luego escupí un poco de la comida que había tomado antes para almorzar, dejando un sabor amargo y acre en mi garganta. Entonces mi corazón comenzó a golpear. Me mantuve enviando pensamientos rectos, suplicando al Maestro que me salvara.

Poco después, sentí que iba a vomitar y tener diarrea. Pensé: "¿Qué voy a hacer? ¡En todo el día no ha habido agua en la casa! No podré limpiarme ni jalar el inodoro".

Desde que empecé a practicar Falun Gong hace casi 20 años, rara vez he experimentado yeli de enfermedad. Sentí que la palabra "enfermedad" no tenía nada que ver conmigo o con mi vida.

El Maestro dijo:

“El cuerpo humano no debe tener enfermedades” (Tercera Lección, Zhuan Falun).

Así que siempre que mi cuerpo se sentía incómodo o adolorido en alguna parte, nunca le presté ninguna atención. Como resultado, mis síntomas desaparecían rápido.

Sin embargo, ¡esta vez sentí a mi estómago revolverse! El moco comenzó a gotear de mi nariz y las lágrimas brotaron, pero yo no tenía la fuerza para limpiarme.

De repente, el rostro de una joven practicante pasó por mi mente. Había muerto hacía dos semanas y su cuerpo estuvo duro e hinchado por largo tiempo antes de fallecer.

Entonces recordé la lectura de un artículo de Minghui.org que detallaba cómo una practicante que vivía sola había muerto. Ni siquiera la gente que la rodeaba supo que había muerto. Pensé: "¡Yo vivo solo, también!".

Entonces, me puse alerta y pensé: "¿Qué estoy haciendo? Soy un discípulo de Dafa. El Maestro está a mi lado y me ha dado un Falun. Todos los dioses del universo me están mirando. ¡No puedo traer vergüenza al Maestro!". Con estos pensamientos, me puse de pie y me limpié la cara.

Identificando mis apegos

Después tuve una sensación de frío en mi estómago, seguido por el cese de todos mis síntomas. Cuando regresé a mi habitación, descubrí que habían pasado unos 30 minutos.

Me acosté en la cama pensando: "¿Por qué no me sentí mejor después de murmurar: 'Maestro, por favor, sálvame'? ¿Por qué estuve bien solo después de recordar que el Maestro estaba realmente a mi lado?".

De pronto comprendí. Mi primer pensamiento fue el pensamiento de una persona común: quería que mi dolor se quitara. Mi segundo pensamiento tenía que ver con considerarme como un discípulo de Dafa.

Investigué más profundo por qué había ocurrido este evento. Entonces, me di cuenta de que a menudo tenía la televisión encendida en las noches ya tarde, para no quedarme dormido antes de enviar pensamientos rectos a medianoche. Aunque estaba viendo programas de NTDTV, con frecuencia veía también las series de TV regulares.

Las películas y los dramas de televisión están destinados a capturar los corazones y los sentimientos de la gente común. Como practicantes, tenemos un tiempo suficientemente difícil para dejar ir el qing, sin embargo, ¡lo estaba metiendo en mi mente! ¿Cómo podrían las viejas fuerzas perder una brecha tan evidente? La cultivación es un asunto serio.