(Minghui.org) Zeng Heping, practicante de Falun Gong, ha sido condenada en China, recientemente, a cuatro años de cárcel por su creencia. Los amigos de Zeng, de San Francisco, organizaron una conferencia de prensa frente al consulado chino, el pasado jueves, para exigir al régimen chino su inmediata liberación.

Conferencia de prensa para exigir la liberación de la Sra. Zeng Heping, tras ser condenada ilegalmente por su fe, en China.

Zeng Heping es una de las seis fundadores del Grupo Ping An Insurance, de Shenzen, China. En 30 años, desde 1988, la empresa ha crecido desde ser un pequeño negocio privado a engrosar la lista de la “Fortune Global 500”. La Sra. Zeng ha realizado enormes contribuciones tanto a la compañía como al desarrollo de la ciudad de Shenzhen.

En agosto de 2017, Zeng Heping y otros tres practicantes de Falun Gong recibieron condenas de entre 4 y 7 años de cárcel.

Xu Jiamei, amiga de la Sra. Zeng, de 81 años de edad, ofreció un discurso durante la conferencia de prensa.

Xu declaró: “Zeng Heping empezó a practicar Falun Gong en 1996, cuando padecía trastornos estomacales, hipertensión y depresión. Antes de practicar, también sufría a menudo fuertes dolores de cabeza. Eran tan dolorosos que la incapacitaban. Se curó de todos sus problemas físicos cuando empezó a practicar Falun Gong.

“Tanto en su vida diaria como en el trabajo, sigue los principios guía de Falun Gong, de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Trata a todos amable y altruistamente”.

“¿Cómo pueden meter entre rejas a una persona tan buena?”, preguntó Xu Jiamei.

Otra amiga de Zeng Heping, Tang Lijuan, recordó en la conferencia de prensa: “Es un persona de trato fácil. Es muy cordial y siempre ayuda a los demás. Pero ahora está en la cárcel. Siento la necesidad de ayudarla”.

Tang Lijuan, una amiga de la Sra. Zeng Heping, da un discurso durante la conferencia de prensa.

No era la primera vez que la arrestaban durante la persecución. La Ping An Company pagó su fianza, cuando la arrestaron ilegalmente por primera vez, para que la pusieran en libertad y siguiera atendiendo su puesto de directora financiera del negocio. Es una persona muy respetada en su centro de trabajo. La policía encontró una fuerte oposición por parte de sus colegas, cuando en una ocasión se personó en las oficinas para acosarla.