(Minghui.org) Fui muy afortunada de asistir a dos de las lecciones del Fa del Maestro en China. Esas experiencias fueron tan maravillosas que nunca podré olvidarlas.
Antes tenía muchas dolencias, incluyendo dolores de cabeza, anemia, asma, un problema del cuello, neurastenia, insomnio intratable y otras enfermedades. Aprendí varios tipos de qigong con la esperanza de ser curada, pero ninguno de ellos funcionó.
Un día leí un artículo de la revista sobre Falun Dafa. Tenía curiosidad acerca de cómo el Maestro podía dar un Falun a cada estudiante. Unos días más tarde, una mujer que practicaba otro qigong conmigo me invitó a ir a Changchun, provincia de Jilin, para asistir a la conferencia de Fa del Maestro. Pero mi trabajo me retuvo en casa.
Cuando regresó, me trajo una copia de Zhuan Falun, el libro principal de Falun Dafa. El libro abrió mis ojos y sentí que Falun Dafa era lo que yo había estado buscando.
Conferencias del Fa en Jinan
También me dijo que las conferencias del Fa del Maestro en Jinan empezarían el 20 de junio de 1994.
Fuimos a Jinan, provincia de Shandong. El personal de registro se sorprendió al escuchar que veníamos del noreste y nunca antes habíamos asistido a ninguna de las conferencias del Maestro, ya que el Maestro comenzó sus clases del Fa en el Noreste primero.
Algunas personas que asistieron a esta conferencia habían asistido nueve veces a las lecciones. También vimos gente de Taiwán y Japón.
El primer día, cuando llegó el Maestro, yo estaba muy emocionada. Era alto, elegante y amable. Cuando comenzó a dar la conferencia, yo estaba aún más emocionada: "¡Su voz suena tan familiar!".
Me esforcé por recordar dónde había oído esta voz antes. Más tarde, otros practicantes me dijeron: "No tienes que tratar de averiguarlo. Muchos practicantes tienen la misma sensación la primera vez. El Maestro ha establecido relaciones predestinadas con nosotros varias vidas antes".
Muchas personas llegaron con toda su familia o con amigos o colegas, como dijo el Maestro:
"Aquellos que realmente tienen la suerte predestinada y pueden comprenderlo, vendrán uno tras otro, siguiendo el Dao y obteniendo el Fa". (Iluminación, Escrituras esenciales para mayor avance)
Cada día había estruendosos aplausos cuando el Maestro entraba en el auditorio. Luego se volvía tan silencioso que se podía oír a todos respirar. Sin embargo, me quedé dormida unas cuantas veces y me sentí muy apenada. Después de que el Maestro explicó que algunas personas se duermen cuando las enfermedades en sus cabezas están siendo curadas, me relajé.
Nunca más he tenido dolor de cabeza desde entonces.
También tuve diarrea después de la conferencia, tal como el Maestro mencionó al hablar de lo que sucedía cuando los cuerpos de los estudiantes eran purificados.
Después de la conferencia de cada día, los estudiantes se reunieron para compartir sus experiencias e historias de cosas milagrosas que sucedieron en otras conferencias del Maestro.
¡Fue un momento memorable!
Cuando terminaron las clases, tomamos fotos de grupo por región con el Maestro. El Maestro decía: "¡La gente de esta provincia prepárense!". Los estudiantes de esa provincia rápidamente se reunían. El Maestro se unía a ellos para la foto y luego iba al grupo de la próxima provincia. Fue muy impresionante ver a varios miles de personas rápidamente organizarse en unas pocas docenas de grupos en muy poco tiempo.
Muchos estudiantes querían seguir al Maestro a Dalian, provincia de Liaoning, donde el Maestro llevaría a cabo su próxima serie de conferencias. El Maestro les dijo que no continuaran siguiéndolo, que regresaran a su casa para iniciar la cultivación real. Muchos de nosotros fuimos a casa.
Conferencias en Yanji
El Maestro pronunció una conferencia sobre el Fa en Yanji, provincia de Jilin, el 20 de agosto de 1994. Fui con algunos practicantes de nuestra área.
El Maestro explicó que a veces, justo al enseñar el Fa, habría interferencia demoníaca. Sucedió esta vez. Había un altavoz cerca del auditorio y una fuerte lluvia.
Una practicante que no tenía mucho dinero llevó pan casero para comer durante todo el tiempo. El pan se enmoheció debido a la humedad, pero aún así lo comió. Queríamos ofrecerle una buena comida. Rechazó nuestra oferta porque no quería tomar nada que no fuera suyo.
El agua llenaba las calles debido a la lluvia, incluyendo la calle en frente de nuestro hotel, pero eso no nos molestó. En una ocasión corrimos cuarenta minutos para ir a la conferencia.
Mi cuñada iba conmigo. Sufría de posesión de animales y no podía caminar lejos. Tuvo que dejar su trabajo para quedarse en casa a pesar de que solo estaba alrededor de los treinta años.
"Cuñada", me dijo emocionada: "¡Estoy totalmente bien ahora! ¡Puedo correr por cuarenta minutos! ¿Qué debo hacer con los dioses falsos que adoré en casa?".
"Tíralos a la basura. El Maestro ha limpiado tu cuerpo y tu ambiente".
Lo hizo, y recuperó su salud.
Al final de las conferencias, personas de diferentes grupos étnicos regalaron flores al Maestro. Los practicantes coreanos llevaban sus trajes tradicionales. Fue todo un evento.
Unos cuantos miles de estudiantes fueron a la estación de tren para regresar a casa. Nosotros compramos boletos caros que garantizaban nuestros asientos con anticipación.
La practicante con el pan casero compró un boleto regular (sin garantía de un asiento). Dijo: “Soy la persona más afortunada, ya que pude escuchar las conferencias del Fa del Maestro, no necesito un asiento”.
En la estación del tren, un desconocido se acercó a ella y le dio un boleto con un asiento asignado. Todos estábamos asombrados. Después de todo, había varios miles de personas en la estación de tren, ¡pero el extraño la eligió a ella! Nos dimos cuenta de que había sido recompensada por no preocuparse por su comodidad personal.
Dado que había mucha gente en la estación, sólo fluimos con la gente, y muchas veces nos iban empujando hacia adelante. De repente, mi reloj se cayó. Pero estaba tan lleno que no pude agacharme para recogerlo.
Me dije: "Está bien. He escuchado la conferencia del Maestro otra vez, esa es la mayor ganancia para mí. Perder un reloj es algo pequeño".
Pero más tarde, para mi sorpresa, encontré mi reloj en mi bolso, ¡Fue simplemente increíble!
Una señora de Beijing nos dijo que solía tener un problema con su cuello. En la conferencia del Fa en Yanji, su cuello se giró por sí solo e hizo un ruido. ¡Entonces ya estaba bien! Compartió su asiento con nosotros.
Debido a que el Maestro estaba limpiando mi cuerpo, me preocupaba ir al baño en el tren completamente cargado.
Un ingeniero mayor me dijo: "Tú debes ser una estudiante nueva. El Maestro nos está vigilando todo el tiempo. No tienes que preocuparte".
Me dijo que había asistido a las conferencias del Maestro seis veces. Una vez tuvo fiebre de 40.°C, pero aún así fue a trabajar, y su temperatura rápidamente volvió a la normalidad. Él nos dijo que, siempre y cuando permanezcamos tranquilos y no nos preocupemos, podemos pasar cualquier tribulación fácilmente.
Sorprendentemente, no sentí la necesidad de usar el baño durante las primeras seis horas. Después de que casi todo el mundo se había bajado del tren, fui al baño.
Practicando Dafa
Después de regresar a casa, comenzamos un grupo de estudio del Fa y fuimos a las ciudades cercanas para contarle a la gente acerca de Falun Dafa. Muchas personas se unieron a nosotros, incluyendo funcionarios del gobierno, oficiales de policía, maestros, estudiantes, médicos, trabajadores y campesinos.
Ahora soy septuagenaria, pero me siento tan llena de energía como una persona joven.
Siempre que recuerdo los días que asistí a las conferencias del Fa del Maestro, mi gratitud abrumadora hacia el Maestro trae lágrimas a mis ojos.
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