Ser responsable de la propia cultivación

(Minghui.org) Siempre que arreglo encontrarme con alguien, intento estar a tiempo. Cuando manejo mi tiempo bien, esto me hace sentir mejor. Pero cuando estoy un poco retrasado, a los demás no parece importarle mucho. Después de un rato, dejo de estar preocupado si estaba tardando y pienso que tan pronto como llegue a cinco minutos del tiempo acordado estará bien.

Una practicante mayor una vez se preocupó conmigo pues estaba cinco minutos retrasado. No pensé que era una gran cosa, hasta que me dijo: “¿Piensas que estás siendo verdadero cuando estás cinco minutos retrasado?”.

No sabía qué decir. Me di cuenta que era mi pereza y mi egoísmo lo que causaba esa brecha en la cultivación. Cuando hago una promesa, tengo que cumplirla, de otra manera no estoy siendo verdadero. No debo pensar que es menos importante sólo porque parecería ser una cuestión menor.

Muchos practicantes pensaron que estar 10 o 20 minutos tarde estaba bien y dirían todo tipo de excusas como para justificarse. Uno dijo que no se daba cuenta qué hora era, otro se detuvo a comprar algo y otro dijo que se había demorado por hablar con un amigo.

Una practicante me dijo una vez, que planeaban venir a mi casa al mediodía, pero no aparieron hasta las 4 de la tarde. Cuando le pregunté por qué estaba tan retrasada, su respuesta fue: “De todas maneras estabas en casa y puedes hacer otra cosa, así que no es una gran cosa que esté un par de horas retrasada”.

No pensó que también podría tener planes.

Algunas veces, una practicante, incluso ni aparecía y no parecía molestarle cuando otros practicantes no confiaban más en ella.

Estoy seguro que cada uno sabe acerca del estrés de esperar a los demás. Si realmente ponemos a los otros primero entonces no los dejaríamos esperándonos.

Si no nos importa ser puntual, ¿no muestra que somos egoístas y que estamos sólo pensando en nosotros mismos?

Debemos prestar atención a cumplir con nuestras promesas. No importa si es un asunto grande o pequeño, si decimos que vamos a hacer algo, debemos hacerlo. Esto no sólo es ser responsable hacia los otros sino que también es ser responsable hacia nuestra cultivación.