(Minghui.org) Los practicantes de Falun Gong en Suecia organizaron actividades durante la celebración de una jornada informativa, en la zona centro, en la biblioteca pública y en algunas comunidades y escuelas locales de Estocolmo con motivo del Año Nuevo Chino. Las actividades daban a conocer los beneficios que produce practicar Falun Gong y denunciaban la persecución a la que está siendo sometida dicha disciplina por parte del partido comunista chino (PCCh). Se hizo especial hincapié en informar sobre la brutal sustracción forzada de órganos en vivo, que están sufriendo los practicantes.
Practicantes de Falun Gong hacen una demostración de los ejercicios en Mynttorget, el 4 de febrero de 2017.
Los transeúntes conocen la verdad sobre Falun Gong al leer los hechos en los paneles informativos en Mynttorget.
Los practicantes cuentan a la gente que la práctica de Falun Gong sigue siendo perseguida por el PCCh.
Mucha gente firmó la petición para detener la sustracción forzada de órganos a prisioneros de conciencia llevada a cabo el PCCh.
La demostración de los ejercicios, llenos de paz, unida a la música relajante, atrajo a la muchedumbre en Mynttorget. Una pareja joven, del norte de Suecia, quiso aprender los ejercicios en cuanto escuchó un poco de información sobre la práctica. El marido estaba tan emocionado por haber encontrado Falun Dafa, que presionó el folleto informativo de la práctica contra su pecho. Preguntó ansiosamente si existía un sitio de práctica en grupo cerca de su casa y se alegró cuando supo que lo había. Le dijo a un practicante: “Iré a ver dónde se encuentra exactamente en cuanto regrese a casa”.
Otra pareja dijo que era ridículo perseguir una práctica tan buena. El hombre dijo que ya había visto a otros practicantes hacer los ejercicios en grupo cuando visitó Seúl. La pareja había visitado China y amaba su cultura, especialmente todo lo relacionado con la medicina tradicional. Agradecieron en repetidas ocasiones que los practicantes les hubieran contado la verdad sobre Falun Gong.
Mucha gente tomó la iniciativa y firmó la petición que llamaba a poner fin a la persecución en China.
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