(Minghui.org) Una madre y su hija, juntas, fueron juzgadas por practicar y contarle al público sobre Falun Gong, disciplina espiritual que está siendo perseguida por el régimen comunista chino.

El 7 y 8 de abril de este año la señora Song Fangxia varias veces se quejó de mareos durante la audiencia de dos días. La madre de 67 años, de la ciudad de Linyi, presentó síntomas graves de presión arterial alta desde que fue detenida, hace ocho meses.

Por ley, los acusados con condiciones de salud anormales no son aptos para ser juzgados. El juez, sin embargo, siguió adelante con la audiencia a pesar de la protesta del abogado por las violaciones en procedimiento legal.

Juez viola repetidamente el procedimiento

La presión arterial registrada fue 220/110 antes del juicio, pero la petición del abogado para que la audiencia sea pospuesta, fue denegada.

El profesional pidió que el juez fuera recusado en el proceso de enjuiciamiento, argumentando que había violado el procedimiento legal. De acuerdo con la ley china, sólo el presidente del tribunal tiene la autoridad para emitir una decisión sobre las solicitudes que implican a los jueces que presiden los casos. El juez rechazó la petición sin consultar al presidente.

Aunque la sala tiene capacidad de hasta 40 personas, sólo a cuatro familiares de las acusadas se les permitió asistir a la audiencia. El juez ignoró la protesta  en cuanto a la limitación ilegal de acceso de la familia al juicio.

Libertad de creencia

El abogado refutó los cargos que decían que sus clientes "usaron un culto para socavar la aplicación de la ley" y exigió la absolución. Sostuvo que no había una ley que penaliza a Falun Gong, y que la persecución fue ilegal desde el principio. Acusó a la procuraduría y el tribunal de ceder ante la oficina 610 para procesar a las mujeres por ejercer su derecho constitucional a la libertad de creencia.

El juez concluyó la audiencia sin emitir un veredicto. Tanto la señora Song y como su hija, la señora Li Hui, permanecen detenidas tras su arresto el 3 de agosto de 2015.