La experiencia de una practicante de Dafa de 14 años

(Minghui.org) Comencé a practicar Falun Dafa cuando tenía 12 años. Recuerdo ese dia de primavera como si fuera ayer. Mi mamá me llevó a visitar a mi abuela. En su casa, encontré otro visitante, a quien llame “tío”. Tío es un practicante de Dafa y había ayudado a mi mamá durante su cultivación. También me animó a practicar Dafa.

Tuve un sueño poco después: estaba caminando por una calle muy concurrida. Al final de la calle había un edificio que era tan alto que no podía dejar de ver. Estaba escalando el edificio. Cuando alcancé la punta, un amable joven que estaba en el techo me dio una mano.

Me levantó y me dijo que mirara abajo. Miré hacia abajo y vi que la calle concurrida de abajo ya no estaba allí. Se había convertido en un océano de agua negra. Vi que muchas personas estaban luchando en el agua y al final desaparecieron.

Le conté a mi mamá sobre el sueño. Ella dijo que Shifu estaba insinuado que debería cultivarme en Falun Dafa. Entendí que si no me cultivaba, podría ser como esas personas, luchando por debajo en el agua negra.

Shifu supervisa nuestra cultivación

Mi estado de cultivación no era muy estable. Perdí mucho tiempo “divirtiéndome”. Una amiga se quedó a menudo en mi casas y jugábamos mucho. Para peor, aprendí a usar Internet en el verano de 2015; entonces no pude sentarme para estudiar el Fa en absoluto.

La situación terminó solo después de que mi padre vio que estaba fuera del camino. Envió a mi compañera de juego de vuelta a su casa y me abofeteó.

Esa noche tuve otro sueño: Estaba trepando una escalera alta. Cuando logré llegar al medio, escuché a mi compañera de juegos llamándome desde el final. Entonces bajé para juntarme con ella.

Cuando desperté, sabía que era Shifu dándome otra pista. Tomé la decisión de empezar de nuevo.

No había muchos practicantes en mi área. Básicamente, solo mi mamá y yo nos cultivamos juntas. Afortunadamente, Shifu arregló que mi tío viniera de vez en cuando. Podíamos discutir nuestros problemas de cultivación con él.

Mejorando el xinxing

Cuando estudio bien el Fa, mi corazón está lleno de felicidad y compasión. No me molesta cuando alguien me trata mal. En la escuela, no contesto cuando me pegan o insultan. Una vez un compañero de clases me dijo muchos insultos. Otro compañero de clases me animó a contestarle algo. Solo sonreí y me encogí de hombros.

Pero a veces cuando no estudio bien el Fa, mi xinxing cae y me pongo molesta fácilmente.

Estuve muy molesta con mi abuela paterna por un largo tiempo. Cuando tenía unos siete años, había vivido con ella porque mis padres querían trabajar en otro pueblo. Ella no me cocinaba; en su lugar, me exigió cocinar para ella. Y me gritaba cuando no cocinaba bien. Realmente la odiaba en ese tiempo.

Después que empecé a cultivarme, aún no me caía bien. Entonces un día pensé: Esto no está bien porque soy una cultivadora ahora. A través del estudio del Fa, entendí que era posible que tengamos una relación predestinada (kármica). Podría estar pagando una deuda cuando me trataba mal. No debía estar enojada con ella. En su lugar, debía tratarla con compasión. Después de darme cuenta de eso, ya no me desagradaba.

Salvando a los chinos

Muchos chinos han sido engañados por las mentiras del partido comunista chino (PCCh) sobre Falun Dafa. No saben que Dafa es bueno. Después de darme cuenta de que muchas personas están en peligro, sentí una fuerte responsabilidad de ayudar a salvarlos.

A menudo iba con mi mamá a la noche para distribuir volantes de aclaración de la verdad. Realmente me gusta hacer eso y me siento muy honrada.

El proceso de distribuir los volantes es también un proceso para que mi mamá y yo mejoremos. Cuando veo un apego, envío pensamientos rectos para eliminarlos.

Al principio, sólo podíamos distribuir docenas de volantes en una noche. Luego podíamos hacer varios cientos. Estábamos nerviosas y asustadas al principio. Nuestro único miedo ahora es que no tengamos los suficientes volantes.

Nuestro objetivo inicial era distribuir todos los volantes que traíamos. Poníamos uno en la verja de cada casa y tratábamos de terminar lo más rápido posible. Luego nos dimos cuenta de que hacer eso no estaba bien. Si en la casa no habia nadie viviendo, el material que dejábamos podría ser desaprovechado. Entonces empezamos a prestar atención a las casas y controlamos si había malezas en frente de sus verjas, o si había alguna luz dentro de la casa.

A veces mejoramos durante el proceso. Mi mamá maneja una bici eléctrica y me lleva atrás. Yo llevo la bolsa de volantes. Le paso cada volantes a mi mamá, que maneja la bici con una mano. Un día mi mamá parecía distraída y no siempre tomó los volantes que le entregué, así que nos perdimos varias casas. Estaba infeliz: ¿Qué estaba pensando? ¿Por qué no se concentraba? Solo entonces, recordé que éramos un cuerpo y no debía quejarme de ella. Inmediatamente envié pensamientos rectos y limpié mis malos pensamientos.

Durante los últimos dos años, mi mamá y yo cubrimos todos los pueblos de la región. Hicimos todo lo posible para que más personas supieran los hechos sobre Dafa. Sentimos que Shifu está siempre con nosotras. Muchas veces nos perdemos mientras viajamos, pero le pedimos ayuda al Shifu. Siempre nos las arreglamos para encontrar el camino correcto sin saber exactamente cómo.

Hacía frío en invierno. Pero tan pronto como empezaba a distribuir el material de aclaración de la verdad, no sentía frío. ¡Sabía que Shifu estaba protegiéndome! Las noches en los campos son muy oscuras y silenciosa. No sentíamos miedo porque sabemos que Shifu está siempre con nosotras.

Cultivando bien hasta el final

Shifu dijo:

“Hay tantas vidas que no es posible evaluarlo, es imposible de imaginar, a veces incluso yo me asombré y conmocioné. Tantas vidas se están preocupando por ustedes. ¡Cada pensamiento, cada idea, cada acción tuyos están siendo observados por un sinnúmero de multitudes de seres! ¡Estoy diciendo que cada pensamiento, cada idea de la gente están siendo observados por un sinnúmero de dioses! Nadie va a inmiscuirse, pero todos están observando, al final ellos evaluarán esta vida tuya”. (Enseñanza del Fa en el Fahui de San Francisco 2014).

¡Nuestra cultivación es muy importante!

Por un periodo de tiempo, no me podía controlar y miraba mucha televisión. Me gustaba más y más la televisión y no quería estudiar el Fa o hacer los ejercicios.

Afortunadamente, mi tío vino. Me dijo que veía en su tercer ojo que estaba arrodillada y mi cara estaba del color de la ceniza. Sabía que debía estar experimentando interferencias y que no me estaba cultivando bien. Me dijo que para salvarme, Shifu tuvo que soportar muchas dificultades.

Estaba impactada y me sentí avergonzada. Cuando no lo estaba haciendo bien, a menudo pensé: Lo estoy haciendo muy mal. ¿Shifu todavía me quiere? Tal vez Shifu no está de acuerdo en que sea su discípula… Ahora sé que fui tan ingenua. Shifu jamás me abandonaría. ¿Cómo podría causar que Shifu se preocupara tanto por mí? La televisión de hoy está llena de cosas malas. El apego a mirar televisión podía destruir mi cultivación.

Mire hacia dentro para ver cual de mis pensamiento le dio a las viejas fuerzas la oportunidad de tirarme abajo. Recuerdo que solía pensar: No sería un problema ver un poquito de televisión, ¿verdad? Este fue el pensamiento que le proporcionó la oportunidad al mal.

Shifu dijo:

“En efecto, incluso la gente común que vive en este mundo es incapaz de encontrarse a sí misma. Estos conceptos no sólo gobiernan la vida entera de una persona, sino que la siguen manipulando para siempre. Sólo cuando ocurren cambios, son eliminados. De otro modo, éstos controlarán a la persona para siempre. Cuando estos conceptos se hacen más y más fuertes, realmente él mismo ya no está más”. (La naturaleza fo, Zhuan Falun II)

Mirando hacia atrás en los últimos dos años: al principio era diligente en mi cultivación, pero luego aflojé. A veces no estaba enfocada en estudiar el Fa o enviar pensamientos rectos. Realmente no me cultivaba todo el tiempo. Por ejemplo, perdía mi temperamento de vez en cuando. Aún tenía muchos apegos humanos, como la búsqueda de confort, búsqueda de fama y ganancia, envidia, de mostrarme y ser egocéntrica.

Miré adentro y me pregunté: ¿Cuánto creo realmente en Shifu y el Fa? ¿Por qué no puedo cultivarme todo el tiempo como lo hice al principio de mi cultivación? El tiempo está pasando muy rápido y la rectificación del Fa está cerca del final. ¿Por qué estoy todavia apegada a las cosas en el mundo humano?

¡La cultivación es seria! Debo corregir todas mis malas acciones. ¡Debo nivelarme con el Fa! Entonces comencé a tratarme siempre como una cultivadora y aprendí a tener compasión hacia otros. Mi mamá recientemente me elogió, diciendo que mi temperamento había mejorado. Sé que todavia tengo que mejorar mucho. Haré todo lo posible para no defraudar a Shifu.

Intentaré hacer más tareas de la casa para que mi mamá pueda tener más tiempo para estudiar el Fa. Somos un cuerpo. ¡Mejoraremos juntas, siguiendo a Shifu y regresando a nuestro verdadero hogar!