Sídney, Australia: turistas chinos cortan lazos con el partido comunista

(Minghui.org) Aunque ahora vive en Sídney, Australia, la señora Chen encuentra muy importante conectarse nuevamente con sus compatriotas. “Como practicante de Falun Gong, sé que muchos chinos han sido envenenados por la propaganda permanente del partido comunista (PCCh)”, explicó. “Siento que debo contarles la historia real sobre la pacífica meditación, ellos entonces no estarán en contra de los principios de Falun Gong de Verdad-Benevolencia-Tolerancia”.

A menudo va a La Ópera de Sídney, uno de los puntos de referencia más conocidos de Australia, donde habla con los turistas de todo el mundo sobre la disciplina.

Turistas chinos ven carteles sobre Falun Gong cerca de La Ópera de Sídney en Sídney, Australia.

La importancia de renunciar al PCCh

Chen una vez encontró un grupo turístico de Shanghái y comenzó a charlar con ellos. “Escuché sobre Falun Gong a un amiga y a menudo hacía los ejercicios en el parque”, contó un visitante. Agregó que la disciplina no es en absoluto como la propaganda difamatoria sostuvo.

“Me agrada escuchar eso”, le manifestó la mujer. "Ya sabes que el partido es malo, ¿se enteró que muchas personas [chinas] se han separado del régimen?". "No estoy preocupado por eso, porque ahora soy cristiano", respondió el turista.

Chen le explicó que debido a que las personas se comprometieron a entregar sus vidas al partido cuando se unieron a esas organizaciones, ahora es importante romper esos lazos. "Esto también se aplica a la liga juvenil comunista y a los jóvenes pioneros".

El visitante estuvo de acuerdo, y otros del grupo también llevaron materiales informativos.

Una practicante (derecha) habla con los turistas chinos sobre la persecución a Falun Gong en China.

En otra ocasión, la mujer le dio la bienvenida a otro grupo turístico chino que se detuvo en La Ópera de Sídney. “Es un placer encontrarlos aquí”, dijo sonriendo.

“Él es nuestro supervisor en el trabajo. Todos lo escuchamos”, dijo uno, señalando a un hombre.

Ella les explicó que cada persona tiene que ser responsable por su propia vida, y recordó el proverbio chino que manifiesta que el bien es recompensado con el bien y el mal encuentra la retribución de yeli. “Por sus malos actos, el PCCh será erradicado por el Cielo. Nosotros no queremos hundirnos con ese, ¿verdad?”.

El hombre asintió con la cabeza y dijo que estaba dispuesto a renunciar al partido. Varios siguieron su ejemplo y también lo hicieron a sus membresías.

Un turista tomó una copia de cada pieza de información impresa y le agradeció sinceramente a la señora Chen: “Gracias por darnos tantos materiales”, dijo. “Por favor cuídese y continúe así”.

Conectando con transeúntes

A través de sus esfuerzos y de otros practicantes, mucha gente conoció sobre Falun Gong y expresó su oposición a la brutal persecución en China.

Clive, que trabaja en La Ópera de Sídney, contó que sus padres eran de Shanghái y que él había nacido en Australia. “Los practicantes de Falun Gong se ven muy pacíficos y es difícil de imaginar por qué un gobierno reprimiría sus creencias”, lo hizo mientras firmaba una petición pidiendo poner fin a la persecución.

Banny Da Roza, del negocio minorista, aceptó un volante y comenzó a leerlo. “¿Por qué el partido comunista chino hace esto?”, preguntó, señalando la información sobre la sustracción forzada de órganos en China. Luego de escuchar al practicante explicar la brutalidad y la propaganda de odio del PCCh, firmó la petición sin dudarlo.

Banny Da Roza firma una petición de apoyo a los esfuerzos de los practicantes de Falun Gong para poner fin a la persecución”.

Manuela de Argentina dijo que estaba interesada en aprender los ejercicios de Falun Gong. “Estoy buscando algo relajante y beneficioso para la salud. Esta parece ser una buena opción”, manifestó.

Manuela de Argentina (derecha) aprende los ejercicios de Falun Gong.