(Minghui.org) Una mujer de 56 años de edad del distrito de Hebei, en Tianjin, fue condenada a cuatro años y medio a fines del año pasado por su creencia en Falun Gong, un sistema de auto-cultivación que es perseguido por el partido comunista chino.

Según su familia, la Sra. Miao Fengling fue torturada y posteriormente desarrolló hiperglucemia (nivel alto de azúcar en sangre), poco después de que fue enviada a la prisión de mujeres de Tianjin el 12 de diciembre de 2014. Todas sus enfermedades habían desaparecido después de que ella comenzó a practicar Falun Gong en 1996, pero ahora la persecución la llevó de nuevo a ser una persona que sufre de mala salud en tan sólo unas semanas.

Mientras la Sra. Miao está en prisión sin haber cometido ningún delito, su hijo echa de menos su cuidado, y su esposo se quedó sin trabajo después de que las autoridades locales presionaron a su lugar de trabajo para que lo despidieran.

Desde la acusación al veredicto de culpable - Un proceso viciado por el fraude

La Sra. Miao fue detenida en su casa el 17 de diciembre de 2012 y posteriormente puesta en libertad bajo fianza 38 días después.

Más de un año después fue llamada a la estación de policía local para firmar un documento que la policía afirmó que se necesitaba para cerrar su caso sin necesidad de ir a juicio. Sin embargo, no se le dio la oportunidad de leer el documento allí.

Cuando finalmente se le permitió mirar su copia del documento al regresar a su casa, se dio cuenta de que había sido engañada para firmar su propia acusación para el juicio.

En su primer juicio el 12 de mayo de 2014, la Sra. Miao dio testimonio de cómo Falun Gong transformó su vida. Ella había tenido un extraño accidente a los 16 años que dejó su pelvis fracturada. Tuvo que usar muletas para apoyarse y tenía que usar capas de ropa, incluso en los días calurosos de verano. Todas sus complicaciones desaparecieron después de que comenzó a practicar Falun Gong. También se convirtió en una mejor persona cuando empezó a seguir los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia, y comenzó a disfrutar de una vida familiar armoniosa.

Pidió ser absuelta ya que su práctica de Falun Gong no quebrantaba ninguna ley y la libertad de creencia está protegida por la constitución china.

En respuesta el juez anunció que la Sra. Miao debía regresar a su casa a esperar otro juicio.

Hacia el final del segundo juicio, el 22 de agosto de 2014, el juez le pidió que volviese a la corte en siete días para firmar un documento legal. Sin embargo, cuando su marido la acompañó a la corte el 29 de agosto, fue arrestada y enviada directamente al centro de detención del distrito de Hebei.

La Sra. Miao pronto fue condenada a cuatro años y medio. Su esposo contrató a un abogado para apelar su sentencia pero el tribunal intermedio municipal de Tianjin simplemente le informó al abogado sobre su decisión de confirmar la condena sin una audiencia ni escuchar una opinión de defensa. Su familia ahora tiene que verla sufrir en manos del PCCh sin ningún recurso legal.