El dolor de una madre: Por practicar Falun Gong – una hija en prisión, tres hijas arrestadas

(Minghui.org) Una madre de 78 años de edad del condado de Junan, provincia de Shandong recibió otro golpe duro mientras buscaba liberar a su tercer hija, que está sirviendo tres años y medio de prisión por practicar Falun Gong, una disciplina espiritual de la Escuela Buda perseguida por el régimen comunista.

Las otras tres hijas de la Sra. Song Yuzhen fueron arrestadas recientemente en el transcurso de dos días. Aunque dos de ellas fueron liberadas, la hija mayor permanece detenida.

La Sra. Song y sus cuatro hijas practican Falun Gong, por lo cual han sido repetidamente arrestadas en los últimos 16 años. Sin poder soportar la presión de las autoridades, su único hijo, quien una vez amó a las mujeres de su familia, ahora las trata como enemigas. Sus vecinos también han cortado relaciones con la familia, para no tener problema con las autoridades.

Arresto de las tres hijas

La policía arrestó a las dos hijas mayores, las Sras. Liu Xia y Liu Huaifeng, el 17 de noviembre, por decirle a la gente que la persecución a Falun Gong no tiene fundamentos legales. Esta es la octava vez que arrestan a la Sra. Liu Xia desde que comenzó la persecución en 1999. Aún está detenida en el centro de detención de Chonggou, ciudad de Linyi.

La Sra. Liu Huaifeng fue torturada y estando bajo custodia policial, enfermó. Fue liberada el mismo día. Mientras regresaba a su casa, comenzó a perder sangre y entró en shock dos veces ese día.

Al día siguiente, la policía arrestó a la hermana menor, la Sra. Liu Huihua mientras daba clases en la escuela de enfermería. Fue liberada 10 días más tarde luego que la policía extorsionara dinero de su esposo.

Madre cuenta sobre los arrestos, detenciones y lavado de cerebro

La Sra. Song comenzó a practicar Falun Gong en 1997 y se recuperó de todas sus enfermedades, incluyendo artritis, una enfermedad al corazón e inflamación de la vesícula biliar. Después que sus cuatro hijas atestiguaran la recuperación de su madre, comenzaron a practicar también. Todas fueron sometidas a una persecución interminable. Abajo está el relato personal de la Sra. Song sobre lo que les pasó a ella y sus hijas.

Desnudadas y registradas

Desde que Jiang Zemin, ex dictador, lanzó la persecución en 1999, he sido ilegalmente arrestada, detenida y llevada a centros de lavado de cerebro en muchas ocasiones. Una vez, también me forzaron a vivir fuera de mi casa para evitar seguir siendo arrestada.

Fui a Beijing con mis dos hijas mayores, las Sras. Liu Xia y Liu Huaifeng, y varios practicantes más en noviembre de 1999 para pedir por nuestro derecho a practicar Falun Gong. Nos arrestaron y detuvieron por 27 días. No solo me desnudaron y registraron el cuerpo durante esa detención, sino que también nos torturaron y nos hicieron trabajar como esclavos.

La policía me arrestó y nos llevó a mis tres hijas y a mi al centro de lavado de cerebros en enero de 2001. Me amenazaron con enterrarme viva y agarraron mi cabeza para golpearla contra la pared. La policía golpeó con malicia la cabeza de mis hijas, las palmas y las plantas de los pies. Decían que si nos torturaban así, moriríamos y los médicos nunca sabrían cómo. Continuaron golpeando a la Sra. Liu Xia hasta que le sangraba de la cabeza, boca, nariz y ojos; cuando estuvo al borde de la muerte.

Mi tercera hija, la Sra. Liu Li, fue arrestada en enero de 2014 y detenida por seis meses antes de ser enjuiciada en un corte. Después de dos audiencias, fue sentenciada a tres años y medio de prisión en Nanjing.

Hija mayor arrestada ocho veces

Entre todas nosotras, mi hija mayor, Liu Xia, es la que más sufrió. Fue arrestada un total de ocho veces, incluyendo el último arresto.

La policía se la llevó de la escuela elemental donde trabajaba y la encerró en el centro de detención del condado de Junan en diciembre de 2001. Realizó una huelga de hambre para protestar por su detención, y la alimentaron a la fuerza por varios días.

En enero de 2002, la arrestaron y le dieron tres años de trabajo forzado. Durante su detención, le negaron la posibilidad de tomar el examen para certificarse como maestra formal. Después de ser liberada, las autoridades no la dejaron trabajar como maestra.

Después que mi tercera hija y otras practicantes fueran arrestadas en 2014, mis dos hijas mayores apelaron al público general para pedir su liberación. La policía irrumpió en nuestras casas cinco veces por la noche en solo 20 días para aterrorizarme. La Sra. Liu Xia y Liu Huaifeg fueron detenidas por dos semanas.