Desenterrando las raíces del viejo cosmos (Parte 2 de 3)

(Minghui.org) (Continúa de Parte 1 )

El viejo cosmos está moviéndose hacia la destrucción. La esencia de todos los seres en él se han degenerado, un nivel tras otro. Esta clase de degeneración se vuelve muy complicada y defectuosa en los bajos niveles. Por lo que veo, existe en la forma de apegos humanos y los deseos. Para limpiarlos completamente, tenemos que arrancarlos de raíz, hay que empezar desde abajo. Éste es el único camino para separarnos del viejo cosmos y de los arreglos de las viejas fuerzas.

De otro modo, nuestras raíces están todavía conectadas con el viejo cosmos. Las viejas fuerzas son capaces de controlarnos, como si fuéramos marionetas.

Todo era recto y desinteresado

Solía escribir artículos sobre Falun Gong. Con la ayuda del Maestro y la sabiduría que me concedió, mis artículos se volvieron muy populares. Fueron pruebas de fama, interés personal, y sentimentalismo. Algunas editoriales se me acercaron, ofreciéndome un pago importante de regalías por derecho de autor. Algunas instituciones y renombradas universidades me invitaron a dar charlas. Periodistas también me contactaron para entrevistarme.

Considerándome un practicante, rechacé todas estas tentaciones, no acepté ni un centavo, y mantuve un bajo perfil.

De hecho, en ese tiempo tuve que dejar el trabajo, renunciando a mi negocio, y arriesgué mi vida ante la persecución sin precedentes de Falun Gong en China. Sin ninguna búsqueda de fama o interés, pensé que esto era muy recto y desinteresado.

Despertando de las malas acciones

Mi entendimiento podía ser correcto a cierto nivel de cultivación. Pero sin ir más lejos mejorar basándose en el Fa e identificar los apegos ocultos en un nivel más profundo, fui incapaz de encontrar mis fisuras. Como resultado, las viejas fuerzas tomaron ventajas de ello y continuaron controlándome, hasta que gradualmente comencé a plagiar y debilitar el Fa. Desperté y me di cuenta qué había hecho, pero fue casi demasiado tarde.

Plagiar desde y socavar el Fa es un serio e imperdonable pecado para practicantes. Alguien que comete tal pecado debería haber sido destruido completamente en la puerta sin-vida. Las viejas fuerzas fueron claras en esto.

Razón para cultivarse

Las viejas fuerzas me llevaron al lugar más horrible y llenaron de la muerte más nefasta y sustancias degeneradas mi campo dimensional. La presión era inmensa e ilimitada, la que gradualmente drenaba mi esperanza. Sabía que no podía pasar a través suyo debido a que la dificultad fue mucho más allá de lo que podía soportar. Estaba desesperado.

En el momento final de mi vida, de repente me calmé y me pregunté, “¿Por qué me cultivo?”.

Entonces, encontré por qué me cultivaba en el fondo de mi corazón. Desde que era joven, lamenté que las cosas buenas no duraran mucho. No pude ver las vidas que luchan en la desesperación que rasgarían mi corazón. Tenía la esperanza que la vida en el universo se bañaba en la felicidad eterna. Supe que solo el Maestro puede hacer esto, y que solo Dafa puede salvar al mundo. Ese era el por qué me cultivaba.

Deteniéndome y purificando mi mente

Era seguro que había cometido serios pecados. No importaba lo que hubiera hecho en el pasado, y si mi cuerpo y alma serían exterminados, al menos estaba claro en aquel momento. Aún si todavía tengo unos pocos segundos, agotaría ese límite de tiempo para alabar a Dafa. Entonces no tendría ningún arrepentimiento, aún si el cosmos no existiera. Después de todo esto es por lo que he venido aquí.

Una vez que tuve ese pensamiento y lo mantuve en el fondo de mi corazón, todas las sustancias muertas desaparecieron instantáneamente, y mi campo dimensional se volvió claro. Vi brillar el sol afuera y recuperé la esperanza.

Estaba tan agradecido, porque supe que el Maestro se llevó todas esas sustancias y padeció todo por mí.

En adelante, en todo momento antes de hacer algo, me pregunto: ¿Qué motivación está detrás de esto? ¿Estás haciendo esto para validar el Fa o validarte?

Si resultaba que estaba validándome, me detenía y purificaba mi mente. Solo después que mi mente estuviera pura y recta continuaría.

De otro modo, si aún un pequeño interés existe, puede influenciarnos y llevarnos de regreso al viejo cosmos.

Gobernado por nociones humanas

Ocasionalmente, algunos practicantes son incapaces de mirar hacia adentro. Por el contrario, se enfocan en temas superficiales y miran hacia afuera: “¿Por qué es tan malo y por qué me hizo esto?” o “No hice nada malo. Es su falta”. Mirando en la superficie y basándose en el entendimiento de uno sobre las nociones humanas, estos practicantes perdieron muchas oportunidades de mirar hacia adentro y cultivarse.

Por ejemplo, uno puede hacer lo mejor para ayudar a otro practicante. Pero aquel practicante, sucesivamente, dañó a otra persona o hizo malos comentarios sobre ella. Si uno ve ese asunto en la superficie, puede preguntarse, “¿Por qué hizo esto? ¿Es todavía un practicante?”. Como resultado, uno puede llegar a ser más cauteloso y no ayudar más a los demás a la ligera.

Esta es una manera negativa de aprender las lecciones, lo que lo hace a uno más astuto e incapaz de elevarse en la cultivación. Debido a que los apegos humanos y el egoísmo no han sido eliminados, es difícil para este practicante hacer progresos.

El Maestro nos dijo esto muchas veces en las conferencias del Fa. Si somos capaces de aprender las lecciones de una manera positiva, buscaríamos mirar hacia adentro para encontrar los apegos y por qué pasó esto, por qué el practicante hizo malos comentarios. ¿Es porque mi corazón no era puro, ayudé a otros por interés personal y esperando que me lo agradezca? En ningún caso a uno le debe faltar compasión o no hacerlo bien, esto dio lugar a una negativa impresión por ese practicante.

El Maestro dijo:

“Los cultivadores miran las cosas de manera justamente opuesta, ven las tribulaciones y el sufrimiento como buenas oportunidades para mejorar. Estas son todas cosas buenas, y cuantas más haya y más rápido vengan, más rápido se elevarán de nivel”. (“Exponiendo el Fa en San Francisco, 2005”)

Por supuesto, tenemos que ser responsables de nosotros y de otros practicantes. Si hay palabras o acciones que debilitan nuestros esfuerzos como un cuerpo, necesitamos señalarlo.

El Maestro dijo:

“...mientras que los verdaderos fo son guardianes del cosmos y son responsables de todos los elementos rectos en el cosmos”.(“Exponiendo el Fa en el Fahui del Oeste de los Estados Unidos” – Guiando el Viaje)

No podemos hacer avances mirando la superficie. Puede aparecer para ayudar por un corto tiempo, pero eso es una ilusión. Porque uno no ha hecho la verdadera cultivación, se entrará en un callejón sin salida y se arruinará.

El Maestro nos contó:

“ustedes han atravesado pruebas y tribulaciones para llegar a donde están, que vuestro corazón no se balancee como millones de plantitas acuáticas, moviéndose con cada brisa”. (Sobre la novela "La calamidad del cosmos”)

No podemos permitir que nuestras nociones humanas nos muevan junto con las olas en la sociedad común.

El Maestro también nos dijo:

"Para los dioses, si un cultivador en el mundo humano tiene razón o está equivocado no tiene en absoluto importancia, sino que eliminar el apego de los corazones humanos es importante. En el xiulian, cómo quitar los corazones de apego es lo importante". (“Enseñando el Fa en Manhattan”)

Solo siguiendo el Fa y cultivándonos seriamente podemos lograr lo que el Maestro quiere y salvar gente.

(Continuará)