(Minghui.org) El Sr. Zhai Hui, un practicante de la ciudad de Shenyang, provincia de Liaoning, fue detenido en abril de 2012. Debido al prolongado maltrato que sufrió, quedó escuálido e incapacitado para comer y caminar. Los guardias tuvieron que llevarlo a la sala del tribunal para asistir a su propio juicio en diciembre de 2012.

Su hija, que está en la escuela secundaria, estaba desconcertada cuando se enteró de que su padre había sido acusado de "divulgar secretos de estado", porque lo único que él había hecho era instalar una antena parabólica.

"¿Cómo pueden unas personas comunes como nosotros 'divulgar secretos de estado’ por instalar y ver televisión satelital?”, preguntó ella. "Además, si China permite que se fabriquen antenas parabólicas, y la gente de todo el mundo puede ver televisión satelital, ¿por qué es considerado un crimen?”.

Tortura, asesinato y violación clasificados como “secretos de estado”

La chica no fue la única sorprendida. El partido comunista chino (PCCh) ha hecho un gran esfuerzo por ocultar su brutal represión a Falun Gong en los últimos 15 años, incluyendo difamar la práctica en todos sus medios de comunicación, e incluso en los libros de texto escolares.

Cualquier persona que distribuya información acerca de la verdad sobre la persecución es severamente castigada, sobre todo si son sorprendidos haciéndolo a través de los medios de comunicación en el extranjero.

Un ejemplo fue un artículo en el Wall Street Journal en relación con la señora Chen Zixiu, practicante de Falun Gong de la ciudad de Weifang, provincia de Shandong, que había sido torturada hasta la muerte. Ian Johnson, autor del artículo, fue galardonado con el Premio Pulitzer en 2001.

Pero tres días después de la publicación del artículo, la hija de la señora Chen fue arrestada por haberle contado la experiencia de su madre al señor Johnson, y fue acusada de “divulgar secretos de estado”. Fue detenida durante un año en un centro de detención, seguido por tres años en un campo de trabajos forzados.

La Sra. Wei Xingyan, una estudiante graduada en la Universidad de Chongqing, fue violada por un guardia de la policía frente a dos reclusas en el centro de detención baihelin en mayo de 2003. Después de que esto se hizo público en el extranjero, la oficina 610 de Chongqing hizo todo lo posible para hacer desaparecer esa historia.

A raíz de eso más de 40 personas fueron detenidas, y al menos diez fueron condenadas a prisión, con penas de entre 5 y 14 años. Todos fueron acusados del delito de "divulgación de secretos de estado".

Incluso aquellos que escribieron artículos fueron perseguidos por el PCCh. Varios practicantes (Zhao Hu, Cui Hai, Shen Xuewu, y Chen Gang), quienes eran profesores universitarios o gerentes corporativos de alto nivel, fueron detenidos en la ciudad de Wuhan, provincia de Hubei a finales del 2012.

Debido a que habían escrito la desagradable verdad sobre el gobierno, se les acusó de "divulgar secretos de estado" y de "intentar derrocar al gobierno", y fueron condenados a entre tres y cinco años de prisión.

Matar a gente inocente, torturar y violar son flagrantes delitos. Pero el régimen chino los considera "secretos de estado", y los oculta de la opinión pública.

Abuso del sistema legal

La brutalidad del PCCh no termina ahí. Como la "divulgación de secretos de estado" a menudo es considerada confidencial, el PCCh se aprovecha de esto y se abusa aún más del sistema legal para maltratar a los practicantes.

Después de que el Sr. Cui Hai fue arrestado, los oficiales le informaron a su familia recién dos meses después. Incluso entonces no se les dijo dónde estaba detenido, y prohibieron las visitas familiares.

Durante ese tiempo, el Sr. Cui fue trasladado desde el centro de detención, al centro de lavado de cerebro, y de ahí al hospital mental. A menudo se encontraba en estado crítico, pero su familia nunca fue informada.

Cuando varios practicantes de la ciudad de Qingdao, provincia de Shandong, fueron detenidos en 2013, por tomar fotografías que mostraban los métodos de tortura utilizados sobre los practicantes de Falun Gong, los funcionarios se negaron a permitirles recibir visitas de familiares o tener consultas con un abogado.

Cuando los familiares afirmaron que dichas solicitudes tenían que ser aprobadas, ya que los únicos cargos que tenían eran por "sabotear la aplicación de ley”, los funcionarios cambiaron los cargos a “divulgación de secretos de estado” y “subversión”.

El evitar que los abogados vean a sus clientes practicantes a raíz de acusarlos de "divulgar secretos de estado" es una táctica utilizada a menudo por los funcionarios de toda China. Esto les permite torturar, hostigar y sentenciar a los practicantes, manteniendo al público en la oscuridad.

Varios ejemplos

El Sr. Zhang Hua, un ganador de la medalla de oro en el Segundo Concurso de Cocina Internacional de NTD en 2009, dijo que trató de asistir a la competición un año antes, pero fue detenido por "contravenir los intereses nacionales" y "divulgar secretos de estado".

"Yo no sabía que mi buena cocina divulgaba secretos de estado", dijo el Sr. Zhang, "pero mi lema siempre ha sido el de ‘cocinar platos genuinos y ser una persona auténtica’”.

Un practicante de Falun Gong fue detenido por gritar "Falun Dafa es bueno" en la Plaza de Tiananmen, y fue condenado a una pena de 7 años de prisión. Cuando su abogado cuestionó la sentencia, el juez dijo que había cometido el delito de "divulgar secretos de estado", porque "Falun Dafa es bueno" era un secreto de estado.

Algunos policías dijeron en privado que habían recibido instrucciones para acusar de "divulgar secretos de estado"a los practicantes que distribuyen materiales de Falun Gong .

Se han descrito varios de tales casos. Por ejemplo, un par de miembros de la Asociación de Falun Dafa fueron condenados a más de diez años de reclusión en un centro de detención, pero sus sentencias nunca se hicieron públicas. Muchos casos de torturas graves también fueron etiquetados de "secretos de estado" y nunca fueron revelados.

Estos casos nos ayudan a entender la verdadera naturaleza del partido comunista chino, y cuadran perfecto con las descripciones de los Nueve Comentarios sobre el partido comunista, "El proceso de decisión dentro del partido opera como una caja negra, ya que las luchas intrapartidarias deben mantenerse en absoluto secreto. Los documentos del partido son confidenciales. Temiendo que se expongan sus actos criminales, el PCCh frecuentemente silencia a los disidentes acusándolos de 'divulgar secretos de estado'".

http://en.minghui.org/html/articles/2015/1/6/147864.html