[Minghui Net] He soportado tiempos duros y numerosas tribulaciones durante mis 15 años de cultivación, pero nunca he sido derrotada por ninguna tribulación. Mi firme creencia en Dafa nunca ha cambiado. Shifu purificó mi cuerpo y curó todas mis enfermedades crónicas y soy diligente en mi estudio del Fa. Protegida por Shifu, he pasado muchas pruebas y superado muchas tribulaciones. Parezco una persona nueva gracias a mi práctica de Falun Gong. Cuando la gente me dice que no pueden creer que tenga 70 años, aprovecho la oportunidad para clarificarles la verdad. Cuando la gente me elogia por mi bondad, les digo que soy una practicante de Falun Dafa. Más de diez personas comenzaron a practicar después de escuchar mi aclaración de la verdad.  

No puedo contar a cuánta he ayudado a renunciar al partido comunista. No recuerdo los detalles de muchos pero hay uno que recuerdo bien. Tenía que ver con el esposo de la practicante A. Él estaba profundamente envenenado por el PCCh. No he olvidado cómo finalmente logró renunciar al PCCh.

Encontrando a un ex practicante

La practicante A estaba en sus 60 y en el mismo grupo de estudio del Fa que yo. Fue forzada a firmar una declaración para dejar de practicar Falun Dafa cuando la persecución comenzó en 1999. Su esposo tenía mi edad. En 1960 se unió al PCCh y era bien conocido en nuestra área.  

Visité a la practicante A un día lluvioso del verano de 2003 para alentarla a comenzar la práctica nuevamente. Le di una copia de “Enseñando el Fa en el Festival de Linterna 2003” junto con otros nuevos jingwen. Estudiamos juntas y nos alentamos mutuamente. Su esposo dijo impacientemente: “No están usando bien vuestra inteligencia. No las tengo en muy alta estima. ¿Por qué no hacen algo más productivo? Debe haber una razón por la cual el PCCh no permite que la gente practique Falun Gong. ¿Falun Gong, les da de comer?”.

Llegando a un miembro del partido

Envié pensamientos rectos calmadamente y le clarifiqué la verdad. Le dije: “Los practicantes de Falun Dafa que siguen los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia están siendo perseguidos. La auto inmolación de Tiananmen fue preparada por el régimen de Jiang Zemin”.

Cuando la practicante A leía Zhuan Falun, él le daba la espalda.

Continuamos estudiando el Fa después de la cena al día siguiente. Nuevamente leímos Zhuan Falun frente a él, pero nuevamente nos dio la espalda. Le dijo después del estudio del Fa: “Estoy haciendo esto por ti”.  

Le leí las palabras de Shifu:

“La sociedad humana se ha desarrollado hasta esta fase de hoy; piensen todos: ¿qué será si continúa desarrollándose? ¿Se puede permitir que esto exista así para siempre? Si el hombre no remedia esto, el Cielo sí lo hará. Cuando la humanidad experimentó catástrofes, se encontraba siempre bajo este tipo de estado".

No dijo nada. Le dije nuevamente mientras me iba: “Realmente estoy pensando en tu futuro. De otro modo, no te molestaría tan tarde por la noche”. La practicante A se avergonzó y dijo: “Lo siento. Mi esposo es desconsiderado a veces. No quiere que practique Falun Dafa porque tiene miedo de que me arresten”.  

La alenté: “Como Dafa dizi, somos diferentes de la gente común. Tenemos que escuchar a nuestro Shifu. Tu esposo es un hombre de buen corazón y le gusta ayudar a la gente. El PCCh ha envenenado sus pensamientos por tanto tiempo. Todavía tenemos la oportunidad de salvarlo antes que la rectificación del Fa termine”.

Cada vez que lo veía, enviaba pensamientos rectos para limpiar su campo. Nuestro coordinador también le envió cartas. Algunos practicantes lo llamaron y le clarificaron la verdad.

Practicantes ayudan a la familia

La familia de la practicante A estuvo plagada de una serie de tribulaciones en el verano del 2006. Su esposo tuvo un accidente de tránsito y se lastimó los ojos. La familia sufrió un revés por la repentina muerte de su cerda y sus 14 crías. Y el pariente que cuidaba su casa cuando ellos estaban en el hospital murió en su patio.

Los practicantes la ayudaron financieramente y la consolaron. Visitaron a su esposo en el hospital varias veces. También se turnaron para cuidar de la granja sin importar cuán ocupados estuvieran. Los practicantes le dijeron al esposo que la gente sería bendecida solo si entendían que “Falun Dafa es bueno, y Zhen-Shan-Ren es bueno”.

Encontrando cosas en común

Finalmente el esposo dijo algunas cosas buenas sobre Dafa, a pesar de que se mantenía con ceño fruncido y por momento en silencio. Me dijo: “He tenido una juventud complicada. Mi familia no podía comprarme un abrigo durante el duro invierno. Si yo decía algo al respecto, la gente se reía de mí”. A medida que recordaba el pasado, comenzó a llorar. Luego recitó algunos pasajes de un libro de Mao Zedong. Hablamos de los anti derechistas, y de la revolución cultural.

Yo dije: “Los tiempos duros de nuestra niñez fueron el resultado de tres años de guerra civil. La amargura que vivimos en los 60 fue el resultado de pagar una deuda después de que emergiera el odio entre China y los soviéticos. Irónicamente, el PCCh le atribuyó esos tres años a catástrofes creada por el hombre o desastres naturales”. Le conté sobre los 9 Comentarios sobre el Partido Comunista. Durante esa visita, nos llevamos bien.

La perseverancia es recompensada

Lo visitamos en el invierno del 2007, luego de que le quitaran una placa de acero en el hospital. Le dimos un DVD titulado “Viajando cielo y tierra a través del viento y la lluvia”. Sonrió y dijo sinceramente: “Gracias. Parece que cada vez que te veo tengo muchas cosas para decir. Hermana (forma respetuosa para dirigirse a una mujer casada), me gustaría hablar contigo si estás libre”. Finalmente despertó y renunció al PCCh.

A mediados del año pasado, trasladamos el grupo de estudio del Fa a la casa de la practicante A por cuestiones de seguridad. Su esposo siempre nos prepara té y nos acomoda los asientos. ¡Qué cambio más placentero!

Me llevó mucho tiempo convencer a esta persona a que renuncie al PCCh. Pero nuestro misericordioso Shifu atesora a todas las vidas en el universo. Él ya ha pavimentado el camino para que lo transitemos. Depende de nosotros decidir cuán considerados y persistentes queremos ser. Podemos derretir una piedra mientras tengamos compasión en el corazón.

Este es mi limitado entendimiento.