[Minghui Net] El 11 de noviembre de 2013, la filial de Amnistía Internacional en Pensilvania realizó la proyección de "Free China: El Coraje de Creer" en la librería Tredyffrin en el condado de Chester.

Más de 40 residentes vieron la película, luego participaron en un debate en grupo. Muchas personas dijeron que estaban sorprendidas por la información revelada en la película. 

Dirigida por Michael Perlman de “Tíbet: Más Allá del Miedo” y co-producida por New Tang Dynasty Television, la premiada película china, cuenta la sorprendente historia de Jennifer Zheng y el Dr. Charles Lee, un empresario chino-norteamericano. 

Tanto Jennifer como Charles, junto a cientos de miles de ciudadanos pacíficos en China, fueron torturados y sometidos a trabajos forzados por no renunciar a sus creencias espirituales. 

El documental pone rostro humano a las violaciones de los derechos humanos por el régimen chino: detención arbitraria de los disidentes, sustracción forzada de órganos de presos de conciencia vivos y la exportación de los productos de trabajo forzado al Occidente. 

La película también pone de manifiesto cómo los ciudadanos chinos están empezando a resistir la censura de Internet del partido comunista chino (PCCh), ya que lentamente despiertan a sus derechos de tener conciencia. 

Hablan víctimas de torturas

Después de la película, Bárbara Quintiliano de Amnistía Internacional coordinó a un grupo de discusión sobre el trabajo esclavo en las cárceles chinas, cómo el régimen chino persigue a Falun Gong y la sustracción forzada de órganos a practicantes vivos de Falun Gong con fines lucrativos. 

Originarias de China, las Sras. Tao y Zhang relataron cómo fueron torturadas en su propio país, por aferrarse a su creencia en Falun Gong. Entre otras cosas, se vieron obligadas a hacer productos para exportación. 

Zhang, de 80 años, dijo: "se me ordenó permanecer quieta durante largos periodos de tiempo bajo el sol ardiente, entonces tenía que ir y venir corriendo hasta casi estar sin conocimiento. 

"También me han obligado a hacer productos de exportación desde las 5 de la mañana hasta la medianoche todos los días. Muchas veces al borde del colapso". 

Durante los tres años y medio que la Sra. Tao fue encarcelada ilegalmente, recordó haber visto médicos haciendo exámenes de sangre. Fue sólo después de que fue liberada, que se dio cuenta de que tal vez escapó por poco de la sustracción de órganos, porque tales pruebas de sangre son normalmente hechas a un perfil potencial de donante de órganos. 

La gente descubre la barbarie de la sustracción de órganos a personas vivas 

La doctora Ann residente en Filadelfia, dijo que era la primera vez que escuchaba sobre la sustracción de órganos a personas vivas desde el 2008. Recordó que se conmovió, especialmente cuando se enteró de que los médicos chinos a sabiendas y voluntariamente participaron en el crimen. 

Dijo que un paciente suyo había confirmado una cita para un trasplante de corazón en China, en tres semanas, es decir, que el donante de corazón fue programado para morir ese día. Ella dijo que estaba muy interesada en saber quién fue el donante. 

Poco después, se unió a Médicos Contra los Sustracción Forzada de Órganos (DAFOH) para ayudar a elevar el nivel de conocimiento de esta práctica despreciable y para poner fin a estos crímenes contra la humanidad. 

"Siento lo que está ocurriendo en China", dijo Ruth, uno de los asistentes. "¡Los practicantes de Falun Gong están experimentando sufrimientos inimaginables. Sustracción de órganos a personas vivas, ¡es algo extremadamente cruel y debe detenerse!”.

"La Sra. Zhang, de 70 años, no debería haber sufrido así solo por mantener sus creencias. Ella es una persona sana y muy amable. Voy a conocer más sobre Falun Gong y la sustracción de órganos".

El velo que cubre la censura del PCCh está desapareciendo lentamente

Christopher Fritz quiso saber por qué a los medios no se le informa de esta tragedia humana. Alex, cuyo abuelo fue un sobreviviente del genocidio Nazi, dijo a Christopher que los crímenes nazis habían sido bien encubiertos mientras estaban en el poder. 

"Antes que las atrocidades de los Nazis fueran expuestas", explicó Alex, "la gente a menudo se encontraba con ensangrentados fragmentos de cabellos humanos y dientes, pero se negaban a creer que los Nazis estaban llevando a cabo un genocidio de pleno derecho. Ya que cada vez había más pruebas que salían a la luz, la gente comenzó a despertar del sufrimiento de los judíos. Esto es similar a la tapadera sobre la sustracción de órganos a personas vivas por el PCCh". 

Debido a la restricción del régimen chino a la información y la censura política, muchos medios de comunicación extranjeros intencionalmente se alejaron de este tema a fin de proteger sus propios intereses en China. Pero como más detalles de esta atrocidad salieron a la superficie, atraen más la atención de los medios de comunicación. 

Sarah Cook columnista de CNN escribió recientemente un artículo titulado "La censura china está llegando a ultramar”, exponiendo la tendencia de los medios hacia la autocensura.

Tras el debate, el Sr. Fritz, dijo que "el evento estaba muy bien organizado y era muy educativo".