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La emoción surge del egoísmo, y se torna más pronunciada tan pronto como una persona sufre por algo. Una fuerte sensación de sentimentalismo es un gran desafío para los seres conscientes en los Tres Reinos y también puede ser muy perjudicial para los cultivadores.

Eliminando verdaderamente la emoción

Dar rienda suelta al sentimiento y a la lujuria puede generar yeli y fortalecer el deseo de uno, mientras que soportar sufrimiento puede eliminar el ye.

Para una persona que se cultiva sus deseos deben ser eliminados. Negarse a mirar a chicas hermosas o a hombres lindos puede sonar como la eliminación de este apego, pero esta comprensión es muy superficial. Un cultivador debe extirpar por completo el apego a la emoción y ver completamente el daño que la lujuria y el deseo tienen sobre la cultivación. ¿De qué manera la lujuria causa daño? Se libera la energía vital y se acorta la vida de uno.

Una vez que se entiende el daño que causa, uno puede perder el interés en el deseo y abandonarlo. Sin embargo, para eliminar completamente este apego, uno debe ver claramente su naturaleza perversa. La seducción y la perversidad de los sentimientos son el origen del sufrimiento y del ciclo de la reencarnación.

Desintegrando el deseo, saliendo de Tres Reinos

Los seres conscientes en los Tres Reinos están inmersos en la emoción. Por lo tanto el deseo y la lujuria se han mezclado en los cuerpos humanos. La cultivación es la única manera de identificarlos con claridad, eliminarlos, y salir del reino que ocupan. La lujuria es el apego  más perjudicial. Apela al deseo del gozo, mientras que en realidad destruye las vidas de los seres conscientes para  siempre, sumergiéndolos en vida tras vida de sufrimiento. Los que se cultivan deben mantener una mente clara y dejar de lado este apego.

Por la misma razón, los verdaderos cultivadores tienen que desarraigar muchos otros apegos, ver su naturaleza ilusoria, y eliminar todos y cada uno de ellos.

Pasando una prueba tras otra, atravesando una tribulación tras otra se pueden entender los principios más elevados. Un aspecto de la cultivación verdadera es la eliminación de todos los deseos, y la obtención del Tao requiere el sólido cultivo de un corazón en constante cambio que se comporta de acuerdo a los más altos principios del cosmos. De este modo, la genuina cultivación requiere experimentar un verdadero cambio, mientras obtienes entendimientos más amplios.

Liberarse de los apegos, salvando incontables seres conscientes

La sociedad de hoy está llena de muchas tentaciones que agrandan los apegos de la gente. Sin embargo, los cultivadores que se han iluminado a su verdadera naturaleza y a los daños de las tentaciones que los rodean, pueden desintegrar todas las falsas apariencias y exponer las sustancias nocivas que están detrás de ésas.

Todo en este mundo tiene vida, algunas son buenas, otras perversas. Cada apego que tenemos como cultivadores afecta al cuerpo celestial correspondiente, cuando eliminamos todos los apegos, los seres conscientes que residen en el cuerpo celestial pueden ser salvados. Por lo tanto, nuestra eliminación de apegos puede salvar incontables vidas.