Pensar en los demás y devolver lo que no nos pertenece

[Minghui Net] La practicante A se estaba encargando de la cuenta sueldo de su padre, ya que este vive en una granja y no es conveniente para él ir a la ciudad para extraer el salario todos los meses. Cerca del día de año nuevo chino en 2011, la practicante A quería sacar el dinero para su padre mientras estaba fuera de la ciudad en un viaje de negocios. Así que pidió a su hijo si podía hacerlo por ella.

Fue el 18 de enero de 2011, cuando llamó a su hijo para retirar dinero de la cuenta. Después de un tiempo, su hijo la llamó y le dijo: "El saldo de la cuenta es de más de 50.000 yuanes". Le pareció que era extraño porque según su cálculo debería tener un poco más de 10.000 yuanes. Le dijo a su hijo: "Tienes razón, es demasiado. ¿Estás seguro de que no lo has leído mal? De todos modos, se puede ver la cantidad exacta después de realizar la extracción".

Después de otro descanso, el hijo llamó de nuevo y dijo: "No hay ningún error. Tengo más de 50 mil conmigo". Ella se sorprendió. Dado que nunca había manejado tanto dinero en el pasado y no estaba segura de que fuera un error, dijo a su hijo: "Por ahora pon el dinero en mi cuenta bancaria. Estoy segura de que estos 40.000 yuanes no son nuestros. Tenemos que saber a quién pertenecen y devolvérselos". Su hijo estuvo de acuerdo.

Después de colgar el teléfono, ella no sabía cómo proceder para averiguar quién era el dueño de ese dinero. La siguiente idea pasó por su cabeza: "Estamos en unas fechas con muchos gastos. Las personas que han perdido el dinero deben estar muy preocupadas. Tengo que actuar con rapidez". Llamó a su hijo otra vez y le preguntó:"¿Le preguntaste al personal de la caja de ahorros por esto?". El hijo respondió: "El banco tiene muchos trabajadores y todos estaban muy ocupados en el momento y no tuve la oportunidad".

Entonces se dio cuenta de que los ingresos mensuales de su padre vienen de la administración de la seguridad social. Llamó al director de la sucursal local de la seguridad social en su ciudad y el director le dijo que iba a investigar el asunto. Poco tiempo después la llamó y le dijo emocionado: "Tienes toda la razón. El contratista a cargo de distribuir el dinero que recibimos del gobierno cometió un error". Luego le expresó su gratitud por hacerle saber sobre el dinero y le dijo lo agradecido que estaba.

Tenía que regresar a su casa para manejar las transacciones, ya que el dinero estaba en su cuenta bancaria. Ella se apresuró a regresar sin darse cuenta de que era domingo. Llamó al director de la seguridad social al llegar a casa. Le dijeron de reunirse en el banco de agricultores el lunes, porque nadie trabajaba el domingo.

Después del desayuno el lunes fue al banco de agricultores y devolvió 40.900 yuanes a la administración de la seguridad social. El contratista que cometió el error en la transacción quería darle las gracias ofreciéndole 1.000 yuanes, pero ella se negó. Pidió la dirección del practicante A y dijo que iba a ir a verla al mediodía del día siguiente.

Al día siguiente, el contratista fue con su hijo de cuatro años de edad y dijo a la practicante A: "No te puedes imaginar de la cantidad de problemas que me has salvado". La Practicante A sonrió y respondió: "Soy una practicante de Falun Gong y creo en Verdad-Benevolencia-Tolerancia. El Maestro nos dijo que debemos cuidar a las demás personas por delante de nosotros mismos. Esto es algo que un practicante debe hacer. Espero que recuerdes que Falun Gong enseña a la gente a ser buena. Si se ha unido al partido comunista chino (PCCh), le animo que renuncie a éste y a todas sus organizaciones asociadas". El contratista felizmente aceptó y pidió a su hijo recitar con ella: "Falun Dafa es bueno".

 

 

 

Versión en inglés: http://en.minghui.org/html/articles/2013/10/4/142525.html