[Minghui Net] Mi hija más pequeña tiene 14 años y obtuvo el Fa hace tres años. Está en 8.º grado y se ha estado preparando para ingresar a un colegio secundario muy competitivo el año que viene. Este requiere tener buenas notas, actividades extracurriculares como deportes, y el test de aptitudes estándar para el ingreso (SAT). 

Por más que ella haya sido una alumna muy atenta y de un corazón compasivo, nunca se ha desempeñado bien en las pruebas estándar, con un puntaje promedio del 60%. Anteriormente, debido a que es practicante y sigue los arreglos de Shifu, sus buenas características salieron a luz al ser entrevistada y pudo ingresar en una escuela primaria muy competitiva, por más que sus puntajes de exámenes no eran tan altos.

Mi esposa, que recién comienza a practicar, compró una gran pila de libros de preparación y contrató a una tutora muy cara para preparar a nuestra hija para el examen. Esto le consumía mucho tiempo y generaba muchas tensiones para mi esposa y mi hija. En Estados Unidos, los colegios privados son muy deseados, así que mi hija tenía mucha presión para hacerlo bien.

Durante el primer examen, mi hija estaba muy nerviosa, y los resultados fueron bastante malos, con puntajes de un 30%. Mi esposa temía que nunca pudiese ingresar a una escuela privada, así que empezó a utilizar más tiempo repasando con ella las palabras y cuestiones de matemáticas más dificultosas de los libros de preparación del examen. También hizo que pase más tiempo con los tutores.

Una semana después, nos dijeron que había habido un error en el examen. Nuestra hija supuestamente tenía que tomar el examen de 8.º, ¡pero le habían dado el examen de 11.º por equivocación! Por supuesto, esto tuvo un enorme impacto en los estudiantes, que terminaron con notas muy bajas y ahora sufren más ansiedad por los exámenes.

Otro practicante dijo algo que me conmovió: “Si no haces los ejercicios o estudias el Fa, eres una persona común haciendo cosas de Dafa”. A esta altura, me di cuenta de que mi hija había aflojado en el estudio del Fa y la práctica de los ejercicios. La hice sentar y le dije que yo la ayudaría. Me di cuenta de que su madre, que recién comenzaba a ser practicante, la mantenía tan ocupada con la preparación de un examen común, tareas, y deportes, que no tenía tiempo libre para estudiar el Fa y hacer los ejercicios. Es muy difícil para los practicantes más jóvenes. Sin embargo, se arregló que estén con nosotros para que los cuidemos y les otorguemos un buen ambiente de cultivación en nuestras casas.

Compartí con mi esposa que no deberíamos preocuparnos por este examen, y que nuestra hija ingresará a donde deba ir, siempre y cuando siga los arreglos de Shifu y sea diligente en su cultivación. Supe que también nosotros mismos debíamos abandonar cualquier apego, como ser a que escuela quisiésemos que vaya. Está todo arreglado por Shifu, y nuestra hija tendrá que elevarse y atenerse a un estándar más alto de xinxing para seguir su camino.

Por más que mi hija y yo hablamos sobre esto y estuvimos de acuerdo, sentí que aún no estábamos siendo lo suficientemente diligentes.

Fue como dijo Shifu:

“…muchos sienten que el Fa es bastante bueno pero que es difícil actuar de acuerdo con él” (Zhuan Falun).

Pronto vino la próxima oportunidad para tomar el examen. Los resultados de mi hija fueron aún peores. Sacó un 13% en general y un 9% en matemáticas. ¡Era como si no hubiese ido a la escuela en varios años! Este puntaje fue tan malo que mi esposa ni quería decirle a mi hija los resultados. En ese momento mi esposa se dio por vencida y se resignó a poner a nuestra hija en una escuela privada. “Las escuelas públicas son igual de buenas”—empezaba a afirmar.

Ahora que mi esposa ya había agotado todos los métodos comunes de preparación de exámenes, era mi turno. Empecé a echarle un vistazo a los libros de exámenes. Estos exámenes son duros, y cuando yo intentaba responder a algunas de las preguntas, alrededor de la mitad me salían mal, también. Luego de analizarlas más a fondo, me di cuenta de que la intención detrás de cada pregunta no era comprobar el conocimiento o la habilidad. Sino más bien, las preguntas premiaban a un pensamiento ingenioso e intentaban hacerles un truco a los estudiantes.

Me di cuenta de que estos exámenes están de hecho arreglados por las viejas fuerzas y estimulan a las personas a volverse más materialistas y más inescrupulosas para obtener cosas sin ganarlas. Este tipo de mentalidad también daña la forma en que las personas consideran a otras. En vez de ver el carácter moral de una persona, utilizando el estándar del Fa, lo cual es la mejor forma de juzgar si una persona es buena o mala, estos exámenes deshumanizan a los estudiantes y los convierten en un número, alejándolos del Fa. Debido a que tantas cosas en la vida de una persona ahora están basadas en este tipo de desempeño de exámenes, esto ha contribuido con el declive de la sociedad.

Shifu dijo en Zhuan Falun:

“Digo que según el punto de vista del materialismo, cuanto más conocimiento se acumula en la vida del hombre, tanto más ágil se vuelve el cerebro humano con el uso”.

La gente común está ahora atrapada por este materialismo. Para ilustrar este problema a mi hija, le hice una pregunta engañosa: “¿Qué es más pesado, un kilo de oro, o un kilo de plata?”. Mucha gente elige uno o el otro, como hizo mi hija. Sin embargo, es una pregunta engañosa porque los dos son un kilo, pesan lo mismo.

¿Cómo podría aprobar el examen sin utilizar las formas astutas de la sociedad común y sin bajar su nivel? Ella tendría que iluminarse a ciertos principios de acuerdo al Fa, para obtener la sabiduría requerida para pasar el examen. Empezamos a hacer los ejercicios y estudiar el Fa todos los días. También escuchamos las lecciones de Shifu cada día cuando la llevaba en automóvil al colegio, y su mente comenzó a estar limpia y clara.

Cuando estaba llevando a mi hija al colegio en la mañana de su examen final, le recordé que se considere una practicante y que solo siga los arreglos de Shifu. También le dije que envíe pensamientos rectos antes de abrir la hoja de examen para eliminar cualquier factor del mal que quiera interferirla. Mientras tomaba el examen, envié pensamientos rectos desde casa para eliminar cualquier interferencia hacia ella.

Una semana después, mi esposa llamó y me dijo emocionada: “¡Se sacó un 96% en matemáticas y un 86% en general!”. Yo le dije: “¡No hay dudas de que este es un milagro de Dafa!”. Y ella estuvo de acuerdo. Los profesores de mi hija también estaban maravillados con su mejoramiento; esto fue arreglado sin dudas para ayudar a que mi hija aclare la verdad acerca de Dafa a todos ellos y que pueda invitarlos a ver Shen Yun.

Estos resultados deberían ser suficientes para hacer que mi hija ingrese en cualquier colegio que quiera, pero ella irá al colegio que Shifu arregló para ella.

¡Gracias Shifu!