[Minghui Net] Después de empezar a practicar Falun Gong en 1997, mi visión del mundo cambió completamente. Ya no me ponía enfermo tan fácilmente como antes. Bajo el cuidado meticuloso de Shifu, nunca dejé de practicar Falun Dafa y continué mandando pensamientos rectos y aclarando la verdad cada día. No hay palabras en la tierra para describir la infinita compasión de Shifu. Me di cuenta de que, con el fin de ayudar a otros a obtener el Fa, debemos estudiar el Fa adecuadamente, aclarar la verdad abiertamente y ser sinceros en nuestros esfuerzos de aclarar la verdad a la gente. Ahora deseo compartir mi experiencia personal con todo el mundo y con el querido Shifu.  

1.      Usando sinceridad para llegar a la mente humana

Antes de jubilarme, llevaba un enorme complejo de empresas estatales y conocía cada lugar como la palma de mi mano. Conocía a todo el mundo que trabajaba allí y todos nos llevábamos bastante bien. Esto me dio la oportunidad de ayudarles a renunciar al partido comunista chino (PCCh) y también hacerlo en un ambiente agradable. Algunos de los trabajadores, después de una o dos palabras estaban dispuestos a renunciar. Sin embargo, el proceso de ayudar a otros a renunciar al PCCh no siempre era tan fácil y una persona en particular me llegó al corazón y me dio un entendimiento hacia un nivel más elevado. Esto fue cuando estaba aclarando la verdad a un soldado desmovilizado. Después de explicarle los hechos, le aconsejé que renunciara al PCCh. Sabía que estaba parado, así que pensé que no estaría a favor del partido y no que habría ningún problema en ayudarle a renunciar. Al final resultó que le había juzgado completamente mal. No creía los hechos y no podía entender por qué uno querría renunciar al PCCh. No tuve un corazón sincero cuando  intenté convencerle para que renunciara al PCCh y estaba tan confiado que olvidé el propósito inicial de aclarar la verdad.

Shifu dijo en “Enseñando el Fa en Manhattan”:

“Durante la aclaración de la verdad, si tu corazón es movido por la gente común, ya no puedes hacer nada. Durante la aclaración de la verdad, si la gente común escuchó y creyó la difusión de mentiras de los medios de comunicación del PCCh en el periodo inicial y tiene un mal entendimiento sobre los Dafa dizi, se muestra feroz contigo o no quiere escuchar lo que dices, en este momento, si la persona mueve tu ánimo, si te enojas por la injusticia, si estás descontento o hasta te vuelves irracional, entonces ya no puedes aclarar la verdad, y tampoco puedes salvar a la gente”.

Me di cuenta de que aclarar la verdad, no era solo un término que apenas tocaba la superficie de lo que hacían los practicantes de Dafa, y que era más profundo que solo palabras apasionadas. Después de esto, siempre me aseguraba de ser sincero al salvar a la gente con el fin de llegar a sus corazones y sus mentes, para dejar una impresión duradera y positiva. Me sentí mucho mejor después de aclarar la verdad de esta manera por varios días y producía mejores resultados. Después, regresé al soldado desmovilizado que no pude salvar antes. Me sonrió, un poco avergonzado y dijo que ya había renunciado al PCCh. Le bendecí por haber hecho las cosas bien y le felicité al ser salvado.

Una vez un hombre estaba conduciendo y deliberadamente aparcó su coche delante de mí para preguntarme unas direcciones. Le pregunté si era miembro del PCCh y dijo que sí. Le sugerí que renunciara inmediatamente al PCCh y lo hizo sin problemas ni vacilación. Después de un rato, confesó que muchos otros practicantes se habían acercado a él para que renunciara al PCCh, pero que siempre rehusaba. Le pregunté por qué renunció cuando le ayudé y me dijo que vio mi compasión y honestidad, sin engaño. Le dije que todos aquellos que habían intentado ayudarle a renunciar eran buenas personas y practicaban los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

2.      Usar la compasión para ayudar a la gente a entender la verdad

Con el fin de tener más tiempo para salvar seres conscientes, me fui de mi trabajo estatal a una empresa privada. El jefe entendió mi situación e hizo los arreglos para que fuese guardia, pero en realidad mi trabajo era llevar los registros del personal y de los vehículos que venían a la fábrica. Tenía mucho trabajo y me encontraba con todo tipo de personas y vehículos. Estaba dedicado a hacer bien mi trabajo. Mi jefe incluso me dejó ayudar a contribuir con ideas para mejorar el sistema de gestión y, como resultado, la fábrica sufrió un gran cambio. Después mi jefe, en una reunión de personal grande, me halagó y dijo que creía en mí. En ningún momento fui capaz de ayudarlo a renunciar al PCCh.

La gente de China ha sido tan envenenada por el PCCh, que a menudo solo reconocen el dinero y nada más. Tuve que aclarar la verdad de forma diferente a los co-trabajadores que eran mayores versus aquellos que eran más jóvenes, para que todos ellos pudieran ser guiados a actuar como buenas personas. También les ayudé a renunciar al PCCh. Cuando hablaba con los operadores más jóvenes, usaba mi habilidad y les llevaba a una conversación donde intercambiaríamos las historias de nuestra vida. A veces, les llevaba agua mientras trabajaban. La inmensa mayoría de ellos estaban dispuestos a renunciar al PCCh y lo hacían inmediatamente. Todos sus parientes también me creían cuando iba a visitarles para aclararles la verdad y exponer los crímenes perversos del PCCh. Algunos de ellos incluso me decían que les enseñara a sus nietos, puesto que no tenían ningún mal hábito.

Los trabajadores ancianos inmigrantes eran muy amigables y nos llevábamos muy bien, estaban dispuestos a que fuéramos amigos. Algunos de ellos envidiaban mi estado libre de enfermedades. Rápidamente les decía que era por practicar Falun Dafa y que todos los que practican Dafa consiguen un cuerpo saludable y todas sus enfermedades desaparecen. Luego les explicaba que personalmente me beneficiaba de Falun Dafa y que antes tenía mala salud, con muchos dolores de cabeza, úlceras duodenales, hemorragias estomacales y otras enfermedades. No podía dormir ni comer bien y me sentía letárgico todo el día, estaba escuálido y pálido. Sin embargo, desde que practico Falun Dafa no me he descompuesto, ni he necesitado medicinas durante diez años. El año pasado no necesité tomarme ni un día libre para recuperarme de ninguna enfermedad. Les conté que habían atestiguado personalmente un milagro. Algunos estaban interesados y preguntaban: “¿esto es real?"

Otros me preguntaban en privado si Dafa era verdaderamente bueno o no, así que les hablaba sobre los actos malvados del PCCh contra la humanidad, la persecución a Falun Dafa y su mundo de pecado y escándalo. No había ninguna persona que no creyera esto. Un joven inmigrante dijo que la primera vez que me conoció, podía decir instantáneamente que era un practicante de Dafa. Cuando alguien decía que Falun Dafa no era bueno, inmediatamente lo defendía. Puesto que creía en Verdad-Benevolencia-Tolerancia y que Falun Dafa es bueno. Cuatro generaciones de su familia pudieron escapar de una vida amenazada por catástrofes.

3.      La paciencia ilumina a la gente para escapar del alcance del malvado partido

En la fábrica, seguía entrando en contacto con gente de diferentes ciudades y provincias. Algunos venían persiguiendo un trabajo en marketing o adquisiciones, mientras otros llegaban en camiones y carros para hacer entregas a la cafetería de la fábrica. Cada día me encontraba con gente nueva y les ayudaba a renunciar al PCCh. Aprovechaba cada oportunidad que podía para aclarar la verdad y salvar seres conscientes.

Un día, un estudiante de doctorado de una universidad local prestigiosa vino a la fábrica para vender algunos softwares. Llegó apurado adentro de la planta para evitar la fuerte lluvia. Le dejé entrar para que no tomara frío. Después de hablar con él durante un rato, pude determinar que estaba dentro del PCCh, así que le aclaré la verdad y le animé a que renunciara. Inmediatamente accedió, contestando que estaba en libertad condicional y que no tenía una buena opinión del PCCh.  También me dijo que la mayoría de su familia no tenía un punto de vista positivo del PCCh. No paraba de agradecerme, diciendo que lo que le había dicho tenía mucho sentido y que estaba muy convencido. Me comentó que había aprendido muchas lecciones de la vida. Le dije: “Esto es lo que el Maestro Li Hongzhi me dice que haga, ser una buena persona. Nunca le daría al PCCh una oportunidad para cometer cualquier acto malvado”. Cuando se marchaba, se iba girando, y le vi marchar hasta que fue una mancha en el horizonte.

En un domingo primaveral, la temperatura era baja, había mucho viento y poco sol. Un hombre, que parecía ser granjero, llegó a la fábrica y me preguntó si la cafetería de la fábrica necesitaba repollo o patatas. Le dejé entrar para que se pudiera calendar un poco. Me di cuenta de que tenía un problema en la pierna al caminar. Mientras hablaba con él le aclaré la verdad y le dije que era practicante de Falun Dafa. Después de escuchar que era practicante, me dijo que una vez practicó por poco tiempo antes de que el PCCh lo prohibiera en 1999. Luego dijo que todavía tenía una copia de Zhuan Falun y otros materiales de Falun Dafa. Luego se animó a seguir practicando y a no escuchar la propaganda calumniosa del PCCh. Preguntó si realmente estaba quebrantando las leyes y yo le dije que Shifu tiene el Fa y que no tenía que preocuparse. Luego le pregunté que le sucedía en la pierna y me dijo que tuvo un accidente de coche hacía un par de años y que se fracturó el fémur. Me dijo que tenía una placa de acero en la pierna y que por eso no podía flexionarla. Estaba preocupado de que su pierna le impidiera practicar, pero le dije que no había ningún problema y le prometí ayudarlo. Luego se marchó diciendo que vender repollo y patatas no era su prioridad, puesto que había mucha gente dispuesta a comprar cerca de su casa. Apunté su número y me aseguré de mantener el contacto con él. Varios días después le compré DVDs baratos de alta calidad que contenían las lecturas de Shifu y los ejercicios. En aquel momento, estaba cojeando al hacer el trabajo de la granja por la mañana. Por la noche, estudió, escuchó el Fa e hizo los ejercicios. Me dijo que le encantaba leer Zhuan Falun y que no se había separado prácticamente del libro. Dijo que su pierna ya no le dolía tan fuerte como lo solía doler. Venía a mi casa de vez en cuando con su moto. Su cara siempre desprendía alegría desenfrenada y me dijo que nunca escuchó de nuevo las palabras del malvado PCCh. Me dijo que creía que sin Dafa y mi consejo, su familia se podría haber encontrado con muchos sucesos desafortunados. Algunos jóvenes necesitan muchos ánimos para empezar a practicar Falun Dafa. Yo únicamente le di a este hombre el libro y el DVD, y eso era todo lo que necesitaba.

4.      Usando la perseverancia para eliminar las dudas de la gente

Cuando mi esposa y yo fuimos a un distrito rural para aclarar la verdad, conocimos a una granjera de 52 años. Después de aclararle la verdad, me comentó que se lo tenía que contar a su marido. Iba a llevarse los materiales de aclaración de la verdad que le dimos en su casa, sin importar lo que sucediera. Después de leerlos, puso uno de los folletos en su casa. Desde entonces, a menudo visitaba a estos granjeros para darles más materiales. Cuando no estaban allí, se los dejaba en una esquina discreta en su vivienda.

Un día, antes de que alcanzara su entrada, me hicieron pasar dentro de su casa para sentarme un rato. Sabía que estaba alimentando a las vacas y cabras todo el día y no tenían tiempo para descansar desde el amanecer hasta el anochecer, así que no quería molestarles. Sin embargo, el marido agarró mi mano suavemente y me dijo que tenía que preguntarme algo. Me preguntó: “¿Los practicantes pueden realmente derrotar al PCCh?” Le contesté que los cielos se encargarían del PCCh. Le dije que la gente debería renunciar al PCCh en cuanto le fuera posible para que no fueran más influenciados por él. Les dije que el PCCh engañaba y desinformaba a la gente sobre Falun Dafa y que el PCCh era una amenaza para el mundo. Le dije que muchos practicantes de Dafa estaban trabajando intensamente cada día para ayudar a la gente a renunciar al PCCh, para que no sufrieran bajo la influencia de este. Exclamó: “¡Asi que eso es realmente el PCCh!” Luego preguntó: “Así que ¿Fue el PCCh el que llevó a este desastre a nuestro país?” Le dije que los arreglos de los cielos no serán interferidos con esto y que el PCCh es un caos y una desorganización absoluta. Reconoció esto como un hecho y me dijo que no permitiría que sus hijos se unieran al partido. De repente me di cuenta de que mi trabajo era ayudar a los demás, no recorrer este laberinto terrenal a ciegas. Debería ayudar a disipar la confusión y aclarar la verdad para que los demás puedan navegar a través del laberinto de deseos y apegos. Ayudar a los demás a entender la verdadera naturaleza del PCCh, salva a los seres.  

Un día, estaba caminando por la ciudad, cuando me encontré a un cocinero que anteriormente trabajaba en la fábrica hasta que le despidieron. Sabía que era miembro del PCCh y que tenía muchos prejuicios contra Falun Dafa. Sin embargo, cuando le vi caminar por la carretera, le saludé de forma entusiasmada y le pregunté que cómo le iba. Me dijo que se había tenido que jubilar por una enfermedad y que ni la medicación podía ayudarle. Le comenté que antes yo estaba enfermo, pero que desde que practicaba Falun Dafa ya no me había puesto mal. Asintió con la cabeza pero no dijo nada. Luego le pregunté si había renunciado ya al PCCh y me contestó que no. Le dije que había que renunciar pronto y accedió inmediatamente. Le comenté que recitara “Falun Dafa es bueno” y “Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno” cada día. Accedió sin titubear.

Me di una vuelta a pie para aclarar la verdad a otro y ayudé a docenas de personas a renunciar al PCCh. Llegué hasta uno de mis antiguos colegas e intenté ayudarle a renunciar. Dijo que esa era la cuarta vez que me había acercado a él por el mismo tema y que sabía que yo me estaba preocupando por él. Le comenté que dejara que el Maestro Li le ayudara a renunciar al PCCh. Luego  refunfuñó: “Tal vez si hubiera renunciado antes no me habría tenido que operar de la mano”. Me reí y contesté: “Si, ese pensamiento es más fuerte que cualquier cosa en el mundo”.

Siempre he perseverado en aclarar la verdad. Sin embargo, el número de personas que sigue necesitando ser salvado es bastante grande. Debemos continuar haciendo diariamente los tres requisitos que Shifu ha establecido para nosotros hasta que alcancemos la consumación.

Si hay algo inapropiado en lo mencionado anteriormente, por favor señálenmelo de forma compasiva.