Mejorando el xinxing al rescatar compañeros practicantes

[Minghui Net] Comencé a practicar Falun Dafa en 1996. Fui un asistente local responsable de coordinar proyectos luego de que empezara la persecución el 20 de julio de 1999. Al comienzo de este año un practicante que tenía un sitio de distribución de materiales fue perseguido y el sitio fue cerrado. Miré hacia adentro tan pronto escuché esta situación.

El Shifu dijo:

“…con la elevación del estándar de tu xinxing, el gong sube” (Zhuan Falun, Lección Primera, Características de Falun Dafa)

Me di cuenta que no le presté atención a elevar mi xinxing. No había compartido con mis compañeros practicantes ni me había elevado junto con ellos. Por ejemplo, sentí que el practicante A podía encargarse de trabajo importante por que era educado y sofisticado. Pero ¿acaso eso no es una noción?

El Shifu dijo:

“Aunque alguien hubiese dominado el conocimiento de toda la humanidad, sería aún nada más que una persona común”. (“Qué es la sabiduría”, Escrituras esenciales para mayor avance)

La cultivación es solemne. El practicante A es una ejecutiva y casi no tenía tiempo para estudiar el Fa. Esto causaba que tuviera problemas, y las viejas fuerzas se aprovechaban de ella. Estaba muy asustado cuando miré para adentro. Sentí que fui el culpable de que fuera perseguida por las viejas fuerzas. Estaba equivocado y necesitaba rectificar la situación. Debería aceptar al Fa como maestro y retornar al camino recto. El practicante A y yo compartimos experiencias muchas veces, y nuestros pensamientos se alinearon. Estudiamos el Fa desde la perspectiva del Fa. Solamente estudiando bien el Fa pudimos cultivarnos y hacer bien las tres cosas. El practicante A mejoró rápidamente, y resolvió benevolentemente los problemas con su familia. Su esposo pasó de tener miedo a entenderla y finalmente apoyar su práctica de cultivación. Ella desarrolló una actitud tolerante, flexible y benevolente, digna de un practicante de Falun Dafa, hacia su hijastra, y vivió en concordancia con los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia.

Como dijo el Shifu:

 “La luz fo ilumina todo, volviendo todo recto, perfecto y brillante” (Zhuan Falun, Lección Tercera, Campo de Energía”)

Su hijastra aceptó felizmente la copia de Zhuan Falun que le dio, y hace poco el centro de producción de materiales de la practicante A comenzó a operar de nuevo.

Arrestaron a tres practicantes mientras clarificaban la verdad sobre Falun Gong y la persecución, y los encarcelaron en la estación de policía local en julio de 2011. Sus familias fueron a la estación inmediatamente, clarificaron la verdad a la policía, y exigieron que fueran liberados. La oficina 610 se negó a liberarlos y los transfirió secretamente a un centro de detención esa noche. Estaba muy ansioso cuando recibí estas noticias y sentí urgencia por rescatarles. Era ya de media noche. ¿Qué podía hacer? Me sentí desesperado y surgieron muchos apegos. Busqué las faltas de otros practicantes, y me quedé dormido mientras buscaba sobre qué quejarme de mis compañeros practicantes. 

Me levanté a las 3:30 a.m. e hice los cinco ejercicios. De repente me di cuenta que había estado culpando y criticando a mis compañeros practicantes, así que no había cumplido con mi responsabilidad de coordinar, y en vez de eso había seguido los arreglos de las viejas fuerzas. Mis pensamientos negativos habían emitido sustancias negativas hacia mis compañeros practicantes. Me pregunté: “¿Esto es lo que necesitan mis compañeros practicantes? ¿Es esto lo que quiere el Shifu?”, y comencé a sudar. Miré adentro y encontré muchos apegos, entre ellos, una mentalidad de queja y crítica. Suelo sentirme apenado y temo perder mi reputación al señalar donde se quedan cortos otros practicantes. Le dije al Shifu en mi corazón: “Shifu, me equivoqué. Sé lo que tengo que hacer”.

Contacté a cada practicante a primera hora y les pedí enviar pensamientos rectos para desintegrar el mal y rescatar a los practicantes detenidos. Luego compartimos experiencias en grupo y nos dividimos las tareas por hacer. Los adultos jóvenes fueron a todas partes a clarificar la verdad sobre Falun Gong. Algunos esperaron fuera de la estación de policía desde la mañana hasta la noche, otros fueron al departamento de policía y a la oficina 610, y otros visitaron a familiares de los policías. Siempre mantuvieron en mente el deseo de salvarles e intentaron aconsejar a las autoridades no cometer crímenes en contra de practicantes de Falun Dafa. Su comportamiento era benevolente, digno, admirable, valiente, y lleno de aspiraciones nobles.

Compartimos experiencias con los hijos de los practicantes que estábamos en proceso de rescatar. Ellos recordaron respetuosamente las enseñanzas de Shifu, y consideraron rescatar a sus padres como una oportunidad para clarificar la verdad y salvar seres conscientes en el curso de su cultivación. Uno de ellos habló con el director de la estación de policía sobre Falun Gong y exigió que se liberara a los practicantes. El director dijo: “¿Puedes garantizar que tu madre dejará de repartir volantes sobre Falun Gong?”. Él respondió: “Mi madre es un discípulo de Dafa. ¿Crees que puedo prevenir que salve seres conscientes?”. Sus palabras retumbaron en las mentes del director y de la policía y se quedaron impresionados.

El Shifu usó esta detención y persecución ilegales como una oportunidad para que los practicantes mejoraran. No decepcionaron a Shifu por el dolor que Él soportó en nombre de ellos. Todos los que participamos en el rescate de compañeros practicantes estudiamos bien el Fa, enviamos pensamientos rectos, y aclaramos la verdad. Fuimos al distrito donde vivía el director y entregamos materiales de clarificación de la verdad. Esto realmente asustó a las autoridades.

Los tres practicantes fueron muy diligentes mientras estaban detenidos. Miraron dentro, regresaron a su ser original, recitaron el Fa, hicieron los ejercicios, enviaron pensamientos rectos, y clarificaron la verdad para salvar seres conscientes. No cooperaron con el centro de detenciones porque no habían cometido ningún crimen. Uno de los practicantes buscó al director y le clarificó la verdad, advirtiéndole que tratara bien a los practicantes de Falun Dafa. Le dijo que los practicantes son inocentes en base a la ley y que es una violación de la ley encarcelarles. Los tres se comportaron muy bien.

Al tercer día de detención, la oficina 610 llamó a sus familias para informarles que serían liberados al día siguiente. Esto fue el resultado de los arreglos y el gran poder de Dafa

Mirando hacia atrás, los practicantes se iluminaron a que todo estaba bajo el control de Shifu.

Shifujo dijo:

“Todo está pavimentado, lo que falta es lo que tú haces” (“Los Dafa dizi tienen que estudiar el Fa”)

Todos progresamos, vimos un nuevo comienzo, y lo que lograremos es mejorar y elevarnos como un cuerpo.

Gracias, Shifu, por todo el trabajo duro que ha hecho por los Dafa dizi.