[Minghui Net] Hoy leí sobre la envidia cuando estudiaba el Fa. Shifu dice: “Una persona común no puede ver este punto y siempre siente que debe hacer exactamente las cosas que ella misma piensa que debe hacer”. (Zhuan Falun). De repente entendí las palabras “siente que debe hacer exactamente las cosas que ella misma piensa que debe hacer” y me di cuenta de que era la raíz de mi envidia. Pensaba que no tenía el apego a la envidia, porque no tenía envidia de aquellos que tenían una mejor educación que yo o que eran más capaces. También tengo simpatía por aquellos que son pobres o están en peores condiciones, pero creo que debería tener lo que me merezco. Por lo tanto, estoy envidiosa de aquellos que son iguales que yo.

Muchos de mis compañeros de universidad tienen trabajos estables, pero yo perdí mi trabajo por la persecución a Falun Gong en China. Era una de las mejores estudiantes de mi universidad, así que siempre me sentía irritada cuando pensaba en esto. Siempre pensaba: “Si esta persecución no hubiera tenido lugar, sería mejor que todos vosotros…”. Cuando veía que mis compañeras tenían familias armoniosas, pensaba: “Soy más bonita que tu. Nadie entre mis antiguos pretendientes estaría…”. Cuando veía que algunos de los practicantes eran ricos, pensaba: “Soy más capaz que tú. Es por esta persecución que lo he perdido todo”.

Creía que debía tener unos ingresos estables, una casa y tener a otras personas admirándome por mi educación y mi apariencia. No estaba celosa de aquellos que tienen buena salud, mansiones o altos rangos porque pensaba que no podía tener eso con mis capacidades. En realidad, solo quería tener lo que me “merecía” en mi vida. Tener lo que podía conseguir y estar satisfecha con ello. Pensaba que estaba siendo realista y lo que obtuve es lo que me merecía.

Ahora mirando atrás, las viejas fuerzas arreglaron mi vida e hicieron esta noción muy persistente. Casi pensaba que era el principio de la vida. Así que sentía resentimiento después de perderlo todo por la persecución. Incluso me sentía peor cuando mis amigos y parientes se reían de mí, sentían pena por mi o me malentendían. Es el apego de envidia. Llegué al entendimiento de que no podía solo tener las cosas que estamos destinados a obtener. La noción de “Obtuve lo que me merezco” debe ser eliminada. La envidia es el resultado de creer en el igualitarismo absoluto. En la época antigua, el Emperador Fundador apreciaba a los dioses por las bendiciones, pero la gente actualmente piensa que son capaces cuando obtienen pequeños beneficios. Piensan que merecen las cosas que reciben y se olvidan de que todo fue intercambiado por el de (virtud) en otras dimensiones.

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