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A menudo me recuerdo que soy un cultivador del Gran Fa del cosmos y lo afortunado que soy de vivir en la era de la rectificación del Fa del Maestro de la rectificación. Ninguna fuerza puede impedir mi avance en la cultivación.

Antes de empezar a practicar Falun Gong, había estado viviendo con medicación y hospitalizado la mayor parte del tiempo. De hecho, aprendí la práctica mientras estaba hospitalizado. Haciendo los ejercicios todas mis enfermedades desaparecieron en un mes. El Maestro estaba ajustando mi cuerpo y pude sentir el Falun rotando por encima de mi cabeza y en la parte baja del abdomen. Diecisiete de mis amigos y familiares también comenzaron a practicar Falun Gong después de ver los cambios drásticos en mi salud.

Cuando vi que el Partido Comunista Chino (PCCh) había iniciado su campaña de propaganda para difamar y calumniar a Falun Gong y al Maestro, lloraba y estaba decidido a ir a Beijing para hablar de la práctica. En el camino hacia la estación de autobuses, vi policías a lo largo de la calle. Tan pronto como me senté, vi la imagen del Maestro sonriendo frente a mi. Casi lloro en voz alta, sabía que el Maestro me estaba alentando. Yo nunca antes había salido de mi ciudad natal, y esto me dio más confianza y determinación para ir a apelar por justicia para Dafa.

Treinta practicantes fueron en el mismo bus a Beijing ese día. El conductor del autobús en varias ocasiones anunció que todos los practicantes que iban para Beijing debían bajarse del vehículo. La policía detuvo el coche en la estación de Tiemenguan en la ciudad de Tianjin, y exigió que todos mostraran sus tarjetas de identificación. Yo no había llevado ningún documento conmigo. Me acordé de lo que el Maestro nos dijo:


"Si tú verdaderamente te cultivas y refinas, nuestro Falun te protege".

“Mis raíces están todas atadas al universo, y si alguien puede tocarte, entonces puede tocarme a mi;  hablando claramente, puede tocar a este universo". (Zhuan Falun)


Tuve el pensamiento: soy practicante del Maestro Li y no estoy bajo el control de la policía. Me bajé del autobús y me marché sin que nadie tratara de detenerme. Tuve que cambiar de vehículo cuatro veces antes de llegar finalmente a Beijing. Cuando llegué a la plaza de Tiananmen, empecé a hacer los ejercicios, y después de comenzar el cuarto ejercicio, un policía me vio y me dijo que parara. Le dije: "Viajé miles de kilómetros sólo para decirle a la gente que Falun Dafa es bueno y para exigirle al gobierno que limpie el nombre de nuestro Maestro".

Me llevaron a un centro de detención, y me encerraron en una celda con dieciocho personas. Ocho que no eran practicantes estaban condenados a muerte. Traté de decirles la verdad sobre Falun Gong y enseñarles la práctica. Les dije que si hubieran aprendido Falun Gong, no habrían terminado aquí. El entorno cambió después de hablar con ellos, y le pedí al Maestro que enviara los libros al centro de detención. Más tarde ese mismo día, un compañero practicante llevó a escondidas el libro Zhuan Falun al centro, y después del desayuno del día siguiente lo abrimos. Puse la foto de Maestro en el radiador y me senté en la posición de loto con las palmas unidas, "Maestro, por favor, tómeme como su practicante. Definitivamente iré a casa con usted". Los cuatro presos condenados a muerte comenzaron a llorar. Uno de ellos dijo: "Maestro, por favor, llévenos como sus practicantes. Mientras vivamos un día más, seguiremos con la práctica de Falun Gong".

La celda se transformó en un sitio de estudio del Fa. Estudiamos hasta ocho lecciones de Zhuan Falun en un día. Uno de los condenados a muerte, dijo: "Es verdaderamente un libro magnífico. Cuanto más lo leo, más cómodo me siento". Un preso  condenado inicialmente a una pena de ocho años fue puesto en libertad antes de tiempo. Otro condenado a muerte también fue liberado. Una sentencia de muerte de un preso se pospuso, y el plazo de otro preso, de siete años se redujo a tres.

Cuando el Maestro publicó el artículo sobre el envío de pensamientos rectos en 2002, seguí las palabras del Maestro y traté de deshacerme de mis apegos humanos para que no afecten mi envío de pensamientos rectos.

Estuve detenido una vez en un campo de trabajo forzado, y vi a un guardia arrastrando a un practicante fuera del campo. Comencé a tirar de los barrotes de hierro de la ventana, mientras les gritaba a los guardias. Las barras se soltaron después de varios intentos, y nos las arreglamos para salir y seguirlos. El líder de los guardias me sorprendió, me esposaron las manos detrás de la espalda y me ataron a un árbol. Grité: "renunciamos a nuestras vidas y profesiones con el fin de salvar a la gente, incluyéndolo a usted. Pero nos tratan de esta manera. Lo que están haciendo está siendo grabado en la historia del universo". El jefe de guardia dijo: "Suéltelo". Justo en ese momento, mis esposas se abrieron solas. La gente que nos rodeaba se sorprendieron cuando vieron esto. Un guardia dijo: "Debe ser su maestro que abrió las esposas para usted". Tomé las esposas y luego hablé con los guardias sobre Falun Gong.

Pongo especial énfasis en el envío de pensamientos rectos donde quiera que vaya. Antes de salir a hablar con la gente acerca de Falun Gong, envío primero pensamientos rectos para limpiar el campo en otras dimensiones.

El Maestro dijo,


“Esclarezcan la verdad,
espanten los fantasmas podridos.
Difundan ampliamente los Nueve Comentarios,
y renuncien al perverso Partido Comunista".

Salven al mundo - Li Hongzhi - 15 de junio de 2006, Filadelfia


Como muchos de los chinos son engañados por la propaganda del PCCh, debemos exponer su verdadera naturaleza. Hablé con los compañeros practicantes y decidí distribuir los "Nueve Comentarios sobre el Partido Comunista" a cada hogar en nuestra ciudad. Durante los Juegos Olímpicos de 2008, muchos policías se desplegaron por toda la población, pero como nuestras acciones eran justas y mantuvimos nuestros pensamientos rectos, pudimos realizar nuestra tarea sin ningún tipo de interferencia.

Tomó un año terminar la distribución de los Nueve Comentarios en nuestra ciudad, y hemos mejorado nuestro xinxing y nuestros pensamientos rectos durante el proceso. Como resultado, no arrestaron practicantes.

Agradezco al Maestro por guiarme en cada paso en el camino de la cultivación durante los últimos doce años. Me he beneficiado con la firme convicción en el Maestro y en el Fa, y he sentido el poder de los pensamientos rectos.

Por favor, amablemente señalar algo inapropiado en mi limitada comprensión.