Con el fin de rescatar a Lu Tong, madre y esposa esperaron durante un año delante de la comisaría (Foto)

[Minghui Net] El Sr. Lu Tong, practicante de Falun Gong de la ciudad de Suzhou, provincia de Jiangsu, fue condenado ilegalmente a cuatro años de cárcel. Su madre tiene unos setenta años y su mujer tiene un ojo incapacitado. Durante el pasado año, ambas han apelado en reiteradas ocasiones a la comisaría de Caixiang, en el distrito de Jinchang, pidiendo visitarlo y también que lo liberaran de inmediato. Su petición fue denegada sistemáticamente, las mujeres pidieron justicia a la comisaría de Caixiang más de 100 veces

Sr. Lu Tong

El 4 de julio de 2008, agentes de la comisaría de policía de Caixiang, arrestaron ilegalmente al Sr. Lu Tong. El 17 de diciembre de 2008, el tribunal de Jinchang lo condenó a cuatro años de cárcel, y lo envió a la prisión de Wuxi. Su hermano e hija fueron muchas veces a la prisión para solicitar una visita sin embargo, los oficiales de la prisión siempre se la denegaban, únicamente les contestaban que tenía prohibida las visitas para siempre.

Un abogado justo, proporcionó asistencia y llevó algo de esperanza a la familia, se reunió con el Sr. Lu Tong vigilado muy de cerca por el personal penitenciario en la prisión de Wuxi. Durante la reunión con el abogado, estaba muy firme, tranquilo, con la cabeza gacha, y sólo respondía con un movimiento de cabeza o contestaba con una o dos palabras. El abogado dijo que podía sentir la fuerte presión sobre el practicante, y a juzgar por el comportamiento, estaba preocupado ya que lo habían maltratado físicamente, amenazado y le habían dado educación especial antes de la reunión.

Posteriormente, la prueba demostró que Xu Linxin, jefe de la Sección de Asuntos Penitenciarios, amenazó a Lu Tong y le prohibió contratar a un abogado. En ese momento, el practicante estaba vigilado continuamente en la sala 14 de la cárcel de Wuxi, causándole estrés intenso. Nadie puede realmente entender este tipo de persecución mental, excepto aquellos que lo han experimentado personalmente. Además, le prohibían utilizar el baño y hasta dormir. A menudo sufría humillaciones. Con el fin de conseguir la llamada reforma o transformación, los agentes de la prisión amenazaban y castigaban a los presos que se relacionaban con él, e incluso, arrestaron a su hija con el fin de hostigarlo.

Su anciana madre y la esposa del practicante de Falun Gong, fueron mediante muchas lagunas jurídicas burocráticas, a pedir justicia para una visita y la liberación inmediata del Sr. Lu. Sin embargo, oficiales de la prisión de Wuxi, detuvieron su solicitud, e incluso lo trasladaron a la cárcel de Hongzehu, ubicada a varios cientos de kilómetros lejos de la ciudad de Suzhou.

A pesar de su pobre estado de salud, su mujer y su madre apelaron en reiteradas ocasiones a la comisaría de Caixiang, con el fin de poder verlo. Durante más de un año de su encarcelamiento en mayo de 2009, la mujer y madre del practicante han apelado más de 100 veces.

Al principio, Zhang Laiyong, ayudante del jefe de la comisaría de Caixiang, trataba con buenos modales a la madre y a la esposa del Sr. Lu. Posteriormente, los funcionarios de la comisaría las ignoraban debido a la presión de la oficina 610 local. Desde entonces, ambas mujeres sólo han sido autorizadas a esperar por una respuesta delante de la comisaría, cerca de la entrada. Los funcionarios han permanecido impasibles, e incluso, las han amenazado y se han burlado de la discapacidad de la mujer del practicante. Algunas policías de la tropa han tratado respetuosamente a la madre y a la esposa.