Desde pedir dinero hasta dar dinero y otros ejemplos de concienciar de la gente

[Minghui Net]

Desde pedir dinero hasta dar dinero

En estos últimos años, en varias ocasiones que estaba aclarando la verdad, hubo gente que me pidió dinero. Una vez, después de aclarar los hechos sobre Falun Gong a un hombre de cincuenta años, le pregunté si quería un amuleto (1). Este hombre dijo: “¿Puedes darme también  dinero?”. Si me das diez yuanes por cada amuleto, entonces quiero diez”. En otra ocasión, le aclaré la verdad a un campesino de mediana edad. Agarró el amuleto que le había dado y dijo: “Dame algo de dinero, o te denuncio a la policía”. Yo le contesté: “¿Quieres dinero? ¿Cuánto vale tu vida? Ese amuleto puede protegerte cuando algo malo te ocurra. Puede ayudarte en los momentos malos. ¿Crees que vale la pena?”. El hombre se quedó en silencio.

Entonces, hubo alguien que fue el primer ser consciente que me dio dinero para expresar su apoyo a Dafa. Una mañana me encontré con un joven de veintitantos años que iba por el borde de la carretera. Llevaba su caja de herramientas. Solo con verle, podría decir que se trataba de un trabajador a tiempo parcial. Tenía un aspecto decente y limpio. Me acerqué a él, le saludé y le dije: “Permíteme que te de un amuleto. Guárdatelo porque te puede salvar la vida y mantenerte a salvo”. Me interrumpió y me dijo: “Te entiendo, comprendo Falun Gong”. Cuando me estaba diciendo esto, sacó un par de billetes de cien yuanes de su bolsillo. Me dio dos y sonrió: “Estos doscientos yuanes son para ti, como muestra de mi sincero apoyo. Comprendo lo que es Falun Gong y te entiendo”.

No esperaba una respuesta así y estaba tan nervioso que no supe que decir. No lo acepté y le dije “¡Eres estupendo! Seguro que obtendrás bendiciones en el futuro. ¡Le contaré la verdad a más gente y salvaré más gente!”.

Parecía que su deseo se había cumplido, y sonrió asintiendo.

 

Seres conscientes con una relación predestinada

Un día del mes de agosto cuando iba de camino a mi trabajo, iba a hablarle a la gente de la calle sobre Falun Gong. Vi a una mujer que parecía que tenía más de ochenta años. Pensé, “Tiene una relación predestinada y debo salvarla hoy”. La alcancé y me bajé de la bicicleta. Justo cuando estaba a punto de hablar con ella, la reconocí y me di cuenta de que era una persona a la que ya había aclarado la verdad en varias ocasiones, pero que nunca me había escuchado y había sido mal educada. Me sentí disgustado y quise irme. Entonces pensé, “Bueno, no pierdas mas tiempo”. Sin embargo, justo cuando iba a darme la vuelta en mi bicicleta, me reconoció. Sorprendentemente, parecía que le agradaba verme y dijo: “¿Por qué siempre quieres hablar conmigo?”. Has hablado conmigo cuatro veces y ahora me siento avergonzada. Me uní a los jóvenes pioneros en primaria. ¡Ayúdame hoy a renunciar!” Enseguida sentí una sensación cálida en mi corazón. Así, seguimos hablando como hermanas sintiéndonos cada vez más cerca una de la otra.

Más tarde, recordé que la primera vez que le aclaré la verdad y le insté para que hiciera las tres renuncias, fue antes del Año Nuevo Chino. Estábamos cerca de un centro comercial, y ella me dijo de muy malas formas: “Vete. No me creo nada de esto”. No podía recordar las otras dos ocasiones en las que me había encontrado y también me había dicho que me fuera. Habían pasado seis meses y ahora pude salvarla. Se trata, en conclusión, de que Dafa salva seres conscientes con una relación predestinada”.

 

Vamos a llamarla “Despertando”

Un día me encontraba cerca de una obra en construcción. Cuando terminé de aclarar los hechos a un joven, le ayudé a realizar las tres renuncias y estaba a punto de marcharme, vi a un hombre de mediana edad que parecía un oficial. Fui a aclararle la verdad. Por nuestra conversación, comencé a darme cuenta de que podía ser un policía, así que le pregunté si era un oficial vestido de civil. Me contestó: “Trabajo en el departamento de la policía”. No tenía miedo y le dije tranquilamente: “Algunos de mis ex-compañeros de colegio trabajan también en el departamento de la policía”. Esto nos llevó a sentirnos más cercanos.

El oficial dijo: “No estoy en contra de Falun Gong. Cuando la policía detiene a practicantes de Falun Gong, le digo a mi gente que no sean duros con ellos y que son todas buenas personas. Sé que tu eres una buena persona”. Entonces le dije: “¡Parece que hay gente del departamento de la policía que no es cruel. Hay gente como tú que apoya Falun Gong!”. En nuestra siguiente conversación, me estuvo llamando “hermana” todo el rato. Me acompañó a dar un paseo largo, y le contesté a algunas preguntas que tenía sobre Falun Gong. Tenía un gran conocimiento y profundo entendimiento del partido comunista. Mantuvimos una conversación agradable y, al final, le dije que recordar: “¡Falun Dafa es bueno! Y ¡Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno!” le podría traer bendiciones, ayudarle en sus malos momentos, y mantenerle a salvo. Él comentó: “Cuídate y ten cuidado. Si la persona con la que te has encontrado hoy no hubiera sido yo sino uno de esos tipos malvados del departamento de la policía, te hubieran detenido y te habrías metido en problemas”.

Le agradecí su preocupación y le ayudé a renunciar al partido comunista chino. Le dije: “Tu mujer también debería renunciar y sería estupendo si los dos estuvieran a salvo. Solo es efectivo si ella está de acuerdo sinceramente”.  Me contestó: “¡Sin problemas!”, entonces le pregunté, “¿Qué nombre quieres para ella? Debe ser preciosa. La podríamos llamar ‘Belleza’. Si se trata de una esposa encantadora y una madre capaz, la podríamos llamar ‘Compasión’”. De repente elevó la voz y dijo, “¡Ninguno de esos nombres! Vamos a llamarla  ‘Despertando’”.

 Nota:

(1) Amuletos – En China, los practicantes algunas veces aclaran la verdad dándole a la gente algo pequeño para llevar o conservar, con algunas palabras grabadas que recuerdan la grandeza de Dafa.

Versión en inglés: http://clearwisdom.net/html/articles/2010/12/6/121802.html