[Minghui Net] Hace varios meses, la policía se llevó a un practicante de Falun Gong de Shandong, de 66 años. Ese día estaba muy enfermo y se encontraba inconsciente. Le enviaron a un hospital para que le examinaran. Los resultados de las pruebas mostraron que tenía un cáncer de hígado en fase terminal y dos tumores malignos. El practicante volvió de nuevo a su casa pero era incapaz de levantarse de la cama. Todos los días tenía el estómago inflamado, lo que le causaba un gran dolor. No podía comer y cada día perdía alrededor de un kilo. Sentía como si estuviera al borde de la muerte. El médico del hospital solo le dio unos días de vida. Su hermano menor, profesor de medicina del hospital, lloraba mientras revisaba el informe médico de su hermano mayor. Su familia vio que no tenía posibilidad de curarse y empezó los preparativos para el funeral.

Permaneció así tumbado en la cama durante 21 días y escuchaba las lecciones de Shifu en un reproductor de MP3 todos los días. A la vez, no dejaba de mirar en su interior para encontrar los apegos que no había eliminado. Cada vez que encontraba un apego, hablaba con Shifu de forma sincera. "¡Shifu, a pesar de mi apego, seguro que mejoraré. Entrego mi cuerpo a Shifu. No importa si muero o no. Sin embargo, tu discípulo no ha completado la misión histórica que le fue asignada, tu discípulo todavía necesita salvar a más seres conscientes!"

Así, tiró de su cuerpo marchito y se levantó de la cama. Su familia le ayudó a encontrar su bicicicleta y se aventuró a salir aún sin estabilidad y con la bicicleta balanceándose de un lado a otro. Se sintió inquieto y comenzó a marearse. Incluso en esta situación, ya que creía firmemente en Shifu y Dafa, continúo pedaleando. Después de siete u ocho kilómetros, comenzó a estabilizarse y se le pasó el mareo. De nuevo se sentía como una persona sana. Aclaró la verdad a todas las personas con las que se encontró e instó a la gente para que renunciara al Partido Comunista Chino (PCCh). Esa tarde, convenció a cuarenta y cuatro personas para que renunciaran al PCCh.

Desde entonces, tiene una gran y firme creencia en Shifu y Dafa. Ha eliminado muchos apegos, y ha continuado haciendo las tres cosas. Su salud es cada vez mejor. Yo le vi unos meses más tarde y le encontré en muy buena forma y parecía mucho más joven. Este anciano de casi setenta años parece un joven. Le dice a todo el mundo que se encontró con Shifu y Dafa que le ha dado una vida nueva.

Con toda seguridad, escucharé a Shifu, haré las tres cosas que los discípulos de Dafa deben hacer y completaré nuestra misión histórica.

Versión en inglés: http://clearwisdom.net/html/articles/2010/9/27/120287.html