[Minghui Net] ¡Saludos venerable Shifu, Saludos compañeros practicantes!

Comencé a practicar Falun Dafa en 1996. Sufría de dolores severos de estómago y tomaba medicamentos todo el año. Shifu limpió mi cuerpo después de tres meses. Fui capaz de llegar hasta hoy bajo la protección y cuidado de Shifu. No puedo describir con precisión la divinidad y magnificencia de Shifu y Dafa, incluso usando todo el vocabulario humano.

Tratando las úlceras crónicas en la piel con pensamientos rectos

Después que el régimen comenzó a perseguir a Dafa el 20 de julio de 1999, pasé un buen tiempo visitando a otros practicantes. Juntos discutimos cómo podíamos apelar por Dafa. Mientras la rectificación del Fa empujaba hacia delante y los practicantes de Dafa maduraban, imprimimos materiales para exponer la persecución y hablar con la gente, explicándoles qué es Falun Gong realmente.

Yo era irracional y no prestaba mucha atención a la seguridad. Debido a mis apegos a hacer las cosas, ostentar, validarme yo mismo, y porque estudiaba poco el Fa, me arrestaron en el 2000, a principios del invierno. Los oficiales me prohibieron dormir por dos días y me torturaron "llevando la espada" (la víctima es esposada con las manos detrás de su espalda, con una mano cruzada por sobre uno de los hombros. Para hacer esto, la policía empuja al suelo a la víctima con el estómago hacia abajo, luego se para sobre su espalda, y estira las manos de la víctima y las esposa). Sin embargo, no vi la verdadera naturaleza del mal y revelé información sobre los practicantes, de lo cual luego me di cuenta estaba mal. Pero sabía que no serían capaces de encontrar a este practicante basados en la información que les di.

Los oficiales me enviaron a un centro de detención. Mientras estaba allí, los guardias instruyeron a los reclusos para que me desvistieran y me regaran agua helada durante 30 minutos. Mis mandíbulas temblaban descontroladamente. Mientras me tenían en el suelo reventaron mis costillas y continuaron golpeándome mientras me ponía la ropa. Probablemente rompieron mis costillas, porque sentí un dolor insoportable y durante varios días no pude dormir. Me vigilaban muy de cerca y abusaron de mí en los días siguientes, golpeándome repetidamente. Ellos acababan de "transformar" a un practicante e intentaban hacer lo mismo conmigo, pero yo persistí en mi fe.

Mi familia gastó dinero y usó las conexiones para conseguir permiso para visitarme. Cada vez, unas 20 personas, incluyendo mi madre, hermana, amigos y compañeros de clase, venían a verme. Lloraban, gritaban, y me amenazaban, intentando forzarme a escribir la declaración de garantía para que así me dejaran regresar a casa. No me permití hundirme en las emociones.

Luego fui retenido en un campo de trabajos forzados por dos años. Los practicantes de Dafa protestaron por la persecución haciendo una huelga de hambre y negándose a usar los uniformes de prisión.

Nunca cooperé con los guardias, sin importar cuán malvados fueran, incluso si me ponían en confinamiento solitario. Finalmente se dieron por vencidos y accedieron a no ponerme a realizar trabajo esclavo ni usar uniforme de prisión. Tenía relativamente más libertad en comparación con los otros practicantes allí detenidos.

Los elementos perversos en otras dimensiones nos persiguieron con ronchas, lo cual nos afectó a muchos, incluido a mí. Me salieron ronchas en las pantorrillas. Al principio no le presté mucha atención, pero el lugar comenzó a ulcerarse y empeorar. Llegó al punto en que la úlcera era del tamaño de una manzana y lucía espantosa. Mis piernas se hincharon y choreaban pus y fluido. Envié pensamientos rectos para eliminar la persecución, porque sé que los practicantes de Dafa no tienen enfermedades es el mal interfiriendo con nosotros. Están intentando debilitar nuestra determinación, nuestro poder de voluntad. Yo definitivamente no dejaré que tengan éxito. El médico me advirtió que si este estado llegada a mis huesos podría desarrollar osteomielitis. No dejé que este pensamiento entrara en mí y simplemente envié pensamientos rectos y recité el Fa diariamente.

Cuando el dolor estaba en su pico, fui rengueando a la cantina. Pensé: "Soy un practicante de Dafa y debo llevar la imagen de tal. Duele tanto que rengueo, del mismo modo duele para caminar derecho. Entonces, ¿por qué no puedo enderezar mi espalda y dejar un camino recto y puro para la posterioridad?" Cuando tuve este entendimiento, logré caminar como si no tuviera ningún problema. Porque creí firmemente en Dafa y constantemente desintegré al mal, mis piernas curaron completamente en seis meses.

El punto de inflexión fue cuando me retuvieron en confinamiento solitario. Los guardias me encerraron en una postura que me obligaba a estar parado por varios días seguidos, luego me encerraron en cuclillas cerca de una semana esta tortura duró cerca de dos semanas en total. Estaba encerrado en una caja de metal, esposado en una posición fija a las rejas. Las personas que están así por periodos largos desarrollan hinchazón, no obstante mi ulceración e hinchazón desapareció después de esta ordalía. No dudé de mis principios a pesar de la tortura, y no les quedó otra que dejarme salir.

Levantándome del piso, creando un ambiente, y validando Dafa

No estudiaba bien el Fa. En ese tiempo era difícil conseguir los nuevos jingwen de Shifu, y veía la persecución como algo que le hacían a otros humanos. Tenía la mentalidad de ostentar y competir y el fuerte deseo de validarme a mí mismo. No negué fundamentalmente la persecución y usé mis fuerzas humanas para combatirla. El mal se aprovechó de esto y escaló la persecución. Me sentenciaron a cinco años de prisión después de la estadía en el campo de trabajos.

Cuando llegué por primera vez a la prisión, hablé con el jefe político. Él aceptó rápidamente la idea de que Dafa es bueno. Entendía a los practicantes de Dafa. Me pidió que me sentara en una silla cada vez que hablábamos, y éramos como amigos. Las autoridades de la prisión lo castigaron porque yo no me "reformé", pero se lo tomó ligeramente. Yo le agradecí.

Sin embargo, relajé mis pensamientos rectos y dejé de ser diligente cuando ya no era perseguido. Dejé de recitar tan frecuentemente el Fa, aflojé con el envío de pensamientos rectos, y con los ejercicios, y aún pensaba que había creado un buen ambiente. Sin embargo, el mal comenzó a aprovecharse de mis brechas. Repentinamente me transfirieron a una prisión extremadamente perversa. Debido a que no tenía pensamientos rectos, me golpearon salvajemente los primeros días. Incluso perdí la consciencia una vez. Cuando recobré consciencia, los vi atravesando el punto de acupuntura hegu de mi mano con una alfiler largo, y mi mano comenzó a sangrar. Firmé un documento renunciando a mi fe cuando mi mente se desvió.

Luego, comencé a hundirme en una vergüenza extrema y me vine abajo anímicamente. Logré llegar hasta donde estoy hoy pero esta mancha es imborrable. Tenía una angustia mental tal que estuve cerca de destruirme yo mismo. Este estado mental duró bastante. En un punto me di cuenta de que estaba cayendo dentro de la trampa del mal. Estaban haciendo todo lo posible para evitar que yo me cultivara para que renunciara a la cultivación. Así que me levanté del piso y me determiné a compensar las pérdidas.

Comencé a recitar Lunyu, Hong Yin y Escrituras Esenciales para un Mayor Avance diariamente. Recité una y otra vez cada parte del Fa que recordaba. Al mismo tiempo enviaba pensamientos rectos con mucha frecuencia. Shifu dijo:

La cultivación depende de uno mismo, y el gong depende del shifu si tienes este deseo, ya está bien. Pero el que realmente hace esto es el shifu, tú no puedes hacerlo en absoluto

Zhuan Falun, Lección Primera

Cuando estábamos ansiosos por conseguir una copia de Zhuan Falun, Shifu arregló que consiguiéramos una escrita a mano. Más tarde recibimos algunos nuevos jingwen, libros electrónicos y reproductores de MP3.

En el 2005, dos practicantes y yo comenzamos a estudiar el Fa, hacer los ejercicios y comunicarnos mutuamente, y básicamente dejamos de hacer cualquier trabajo pesado. Era el primer paso en no cooperar con el mal. Dimos un paso tras otro para crear un ambiente. Enviamos pensamientos rectos 20 veces al día. Los oficiales no podían hacer nada con nosotros, así que nos dejaban hacer los ejercicios todas las mañanas en las duchas públicas. Asignaron a alguien para que nos abriera la puerta, porque las duchas son cerradas por la noche. Siempre hacíamos los 5 ejercicios enteros.

Es fácil que exploten tus brechas en un ambiente perverso cuando te descuidas solo un poco con los pensamientos rectos. Una vez no envié pensamientos rectos y un guardia repentinamente me sacó el libro mientras estudiaba. Un recluso luego me dijo: "Hace mucho tiempo que te está vigilando". Es difícil proteger los libros de Dafa en la prisión. A los practicantes en otra división les faltaban pensamientos rectos. Los guardias los registraron y encontraron un montón de libros de Dafa y los sumergieron en agua, estropeándolos. Yo estaba a cargo de cuidar los libros de Dafa en nuestra división y no me separaba de ellos ni un segundo.

Los oficiales nos registraban durante los días sensibles y escarbaban hasta nuestros bolsillos. Una vez yo tenía una bolsa llena de libros de Dafa y mantuve firme el siguiente pensamiento: "Dafa es más importante que mi propia vida no puedo permitir que los guardias se los lleven". Con el poder de los pensamientos rectos solo registraron mis bolsillos. Agarré mi bolsa y caminé entre el grupo que me había registrado. Esta fue otra manifestación del poder sobrenatural de Dafa.

Otra vez no esperé que me registraran y me pasé a otro grupo sin que nadie me cuestionara. Siempre que tengamos un entendimiento recto y actuemos rectamente, y nuestro pensamiento esté basado en el Fa, el mal no se atreverá a perseguir a Dafa o a sus practicantes. Somos nosotros mismos los que nos causamos las tribulaciones y pérdidas.

Aparte de cultivarnos nosotros mismos, también hablamos con los reclusos y les pedimos que renuncien al PCCh y sus organizaciones muchos lo hicieron. Copiamos a mano unos cuantos poemas de Hong Yin y se los dimos a los reclusos que los estudiaron y recitaron con el tiempo. Lavábamos la ropa de los reclusos y limpiábamos las celdas diariamente. Algunos reclusos y guardias admiraban nuestro desinterés. Ellos decían: "Si todos actuaran como los practicantes de Dafa, no habría criminales en el mundo". Cuantas más nociones y preocupaciones humanas uno tenga, peor se vuelve la persecución. El mal persigue a los humanos no pueden perseguir a los dioses.

Liberado de prisión y rescatando seres conscientes

Regresé a casa después de un largo periodo de encarcelación, pero entendí más la verdadera naturaleza de esta persecución a través del estudio del Fa constante y diligente. Esto me dejó transitar el camino arreglado por Shifu con un entendimiento más claro. Deshice los arreglos de las viejas fuerzas y los negué completamente.

Sufrí grandes pérdidas con la persecución y me quedé atrás en términos de rescatar seres conscientes, así que comencé a ir al mercado por la mañana y ayudé exitosamente a varias personas a renunciar al PCCh. Hasta hoy sigo hablando cara a cara con la gente y el número de personas que he ayudado a renunciar ha incrementado.

Mi ex jefe se negó a darme de vuelta mi trabajo, así que envié pensamientos rectos para desintegrar las restricciones financieras de las autoridades. Encontré un trabajo bien pagado. Mi familia no dijo nada porque estaban contentos con mi salario. También vieron que los practicantes de Dafa sí se preocupan por sus familias, y vieron los beneficios de la cultivación. ¡El cuidado omnipresente de Shifu está más allá de todo!

Inicialmente estaba un poco preocupado por mi nuevo lugar de trabajo cuando hablaba de Falun Gong con la gente, especialmente con los oficiales de alto rango. A medida que estudiaba el Fa con constancia y corregía mi estado mental, me determiné a rescatarlos. Le di poca importancia a su estatus social, ya que es solo una cosa humana y superficial. Hablé entusiasmadamente con ellos y ayudé a algunos a renunciar al PCCh. Fue fácil. Algunos eran ricos, y otros, jefes de secciones y divisiones. Ayudé a cada uno con quien me crucé. Ellos reconocían que los practicantes de Dafa son buenas personas y no toman sus posiciones o dinero muy seriamente.

Cada vez que llegaba casa, me tomaba más seriamente el estudio del Fa. En vez de aislarme, me comunicaba continuamente con los practicantes y descubrí un montón de fallas en mí, especialmente mi falta de entendimiento del Fa.

Shifu dijo:

Nosotros tenemos que rechazar incluso la aparición de las viejas fuerzas y sus arreglos todos tenemos que rechazar hasta sus existencias. Estamos fundamentalmente negando todas sus cosas, y todo, y solamente las cosas que tú haces para eliminarlos es la poderosa virtud. No se cultiven en las tribulaciones creadas por ellos caminen bien el propio camino sin reconocerlos a ellos, ni siquiera reconozcan la manifestación de las tribulaciones cuando las eliminen. (Aplausos) Entonces, mirando desde este ángulo, lo que tenemos que hacer es negar por completo a las fuerzas viejas. Ni yo ni los Dafa dizi siquiera reconocemos las manifestaciones de su última lucha antes de que mueran.

Exponiendo el Fa en el Fahui de Chicago, 2004

El estudio del Fa me hizo dar cuenta de la razón por la cual las viejas fuerzas tuvieron éxito en perseguirme por tan largo tiempo porque me estaba cultivando en medio de sus arreglos, aunque verbalmente yo los negaba. Inconscientemente reconocí la persecución del mal. Sufrí tanto innecesariamente, no obstante yo pensaba que había hecho un buen trabajo con la cultivación. Si hubiera mejorado en términos de entendimientos de los principios del Fa, hubiera sufrido menos y podría haber atravesado la persecución del mal y ser liberado de prisión con dignidad y respeto. Cuando mis piernas estaban hinchadas, incluso los oficiales me ofrecieron salir por tratamiento médico, pero yo no tuve pensamientos rectos de salir. Como resultado mi encarcelación continuó.

Las viejas fuerzas intentan destruirnos mental y físicamente. Intentan cualquier cosa para hacernos renunciar a la cultivación en medio de un ambiente perverso. Aunque fallaron conmigo, sin importar cuán bueno fuera el ambiente que creé en prisión, todavía estaba cultivándome en medio de una tribulación. Shifu nunca arreglaría que nosotros nos cultivemos en tal ambiente.

Rescatar a los seres conscientes es nuestra responsabilidad y misión. Deberíamos cultivarnos bien nosotros mismos y tener fuertes pensamientos rectos, desintegrar los arreglos y tribulaciones perversas en otras dimensiones antes que ellas ocurran en nuestra dimensión. Nuestra poderosa virtud proviene de salvar diligentemente a la gente del mundo y validar Dafa, esa es la mejor forma de convertirse en practicantes de Dafa realizados.

Lo de arriba es mi entendimiento personal. Por favor señalen cualquier cosa inapropiada.

¡Gracias Shifu! ¡Gracias practicantes!

Versión en inglés en: http://www.clearwisdom.net/html/articles/2009/11/14/112373.html