[Minghui Net] Shifu menciona en Enseñando el Fa a los practicantes Australianos, ".siete años de mijo y ocho años de arroz entero". Sonreí cuando oí esto y pensé en cómo se podría traducir esta frase para los practicantes de occidente. No entendía el verdadero significado de esta frase en mi cultivación y no le ponía mucha atención. Shifu nos dice con frecuencia que miremos en nuestro interior ya que cuando surgen conflictos entre practicantes y gente común debe ser nuestra culpa. Pensé que tenía un buen entendimiento sobre lo que Shifu decía, ya que estaba haciendo lo que Shifu nos decía que teníamos que hacer. Sin embargo, un acontecimiento que me ocurrió recientemente, me hizo reconsiderar mi entendimiento.

Era sobre la relación con mi marido. Siempre ocurría el mismo problema y cada vez que pasaba intentaba "tolerarlo". Entonces, ¿Por qué se repetía el problema una y otra vez?

Todos los días, cuando llegaba a casa, mi marido se enfadaba sin ningún motivo. Me insultaba y discutíamos sin importar lo que yo dijera o hiciera. Cada vez que discutíamos, sacaba a colación el divorcio y la separación. También me pedía que le diera mi tarjeta salarial que utilizo para poder comprar todas las cosas que necesitamos para la casa. ¿Cuál era el problema? Decidí estudiar las conferencias de Shifu.

El Maestro dijo:

Si consideras todos tus sufrimientos, tus tribulaciones demoníacas, y demás de ese tipo de situaciones por las que pasas como cosas malas, entonces eres una persona común. (Enseñando el Fa en la Conferencia de Nueva York 2008)

Cuando leí esas palabras, pude darme cuenta de que los conflictos con mi marido eran causados por mi propio corazón. Esto de repente me recordó la frase de "siete años de mijo y ocho años de arroz entero" que Shifu utilizaba. Había tomado conciencia. Recordé cómo me habían decepcionado las diferencias de estilos de vida y educación entre mi marido y yo. Me puse en su lugar y sentí que la vida era injusta. Después de que empezara a practicar Falun Gong, intenté tolerarlo porque pensaba que esto era lo que un practicante debía hacer. Si lo hiciera de otra forma, todo el estudio del Fa y la práctica de los ejercicios que había hecho, hubiera sido en vano. Sin embargo, lo había hecho con un propósito de búsqueda y desde el egoísmo. No era una paciencia genuina. Como verdaderos practicantes, necesitamos llevar a cabo "Verdad-Benevolencia-Tolerancia" desde lo más profundo de nuestros corazones, y los conflictos surgen cuando nuestros corazones no son rectos. Cómo trates a los demás así serás tú tratado. Como yo siempre empezaba siendo irritable, el también era irritable.

Para mí, la razón principal del porqué de mis discusiones y de no ser compasiva era que yo tenía la mentalidad de presumir. Siempre, desde que era joven, me permitía comprarme lo que quería y no ponía cuidado a la hora de gastar dinero. Cuando algunos compañeros practicantes me señalaron esto, pensé que tenían que cuidar de sus propios asuntos y no meterse donde no les importaba. También me enfadaba con mi marido cuando comía fuera con otros y gastaba dinero. ¿Si él puede gastar dinero, por qué no puedo yo? Mi resentimiento aumentó. Otra razón era mi insatisfacción con mi matrimonio. Antes de practicar Falun Gong, me decía a mi misma que cuando mi hijo creciera tenía tres cosas que podía hacer: una era divorciarme, la segunda morir de mala salud y la tercera irme a un convento y convertirme en monja. Mi hijo era el único motivo que me hacía seguir con mi matrimonio. Así que, cuando mi marido hablaba de divorcio no hacía que me sintiera muy triste. El único pensamiento que tenía era que los practicantes no deben divorciarse, pero si era él quien lo pedía, no sería mi culpa si nos divorciáramos. Esta reflexión era muy irresponsable, y mi comportamiento no alcanzaba el nivel de un practicante.

Me impactó darme cuenta de esto. ¿Estaba realmente cultivándome en "Verdad-Benevolencia-Tolerancia"? ¿Dónde estaba mi compasión? Los problemas que había en mi matrimonio eran mi culpa. Después de darme cuenta de esto, le dije inmediatamente a mi marido, "Si eres feliz, vivirás conmigo. Si no eres feliz, nos podemos divorciar. Te daré mi tarjeta salarial". Después de decir esto, sentí como mi corazón se liberaba. Curiosamente, su actitud también cambió. Nunca más volvimos a regañar y nuestra relación de nuevo volvió a ser armoniosa. Me iluminé al significado profundo de "siete....". Cuando miramos en nuestro interior, tenemos que observar nuestros apegos desde la raíz y eliminarlos completamente. Tenemos que tratar a los otros con compasión y tolerancia, con bondad y desinterés. Vamos a hacer nuestra propia rectificación con el nivel de Dafa y a hacer las tres cosas bien y con compasión.

Fecha de edición: 23/11/2008
Fecha del artículo original: 17/11/2008
Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2008/11/17/102329.html