[Minghui Net] Antes de las Olimpiadas, especialmente durante el mes de abril, el PCCh emitió órdenes a las Oficinas 610 de todos los niveles para que intensifiquen la persecución a los practicantes de Falun Gong. Como resultado, el personal de la Oficina 610 fue a mi oficina a perseguirme. Mi supervisor no cooperó con ellos.
Cuando aparecieron en mi oficina, el supervisor de nuestra división les dijo amablemente que tomaran asiento. Entonces les dijo directamente: ¿Vienen aquí por el practicante de Falun Gong de esta oficina? Todos saben que él trabaja muy duro, y nunca ha hecho nada malo. No necesitan preocuparse, no irá a Beijing a molestar. Sería bueno para nosotros si más personas practicaran Falun Gong. Varios años atrás, no fui capaz de ver la verdadera situación, y como no los entendí, dije muchas cosas malas sobre ellos. De hecho, ellos no son como se los mostró en la TV. Hasta dónde sé, estas personas gozan de buena salud y tienen una alta moralidad, y hacen muy bien su trabajo. Con mi mente clara de supervisor, nunca los acosaría, o despediría, así que espero que no vengan más a molestarme.
Sin palabras, los agentes de la Oficina 610 siguiendo la línea del partido, dijeron: De hecho, Falun Gong es sólo una creencia. Nos obligan a venir aquí. Sólo queremos dar un vistazo, sin ninguna otra intención.
El supervisor continuó: Nuestra fábrica tiene miles de empleados, y es difícil para nosotros emplear eficientemente nuestra mano de obra. Normalmente hacemos planes para el uso de la mano de obra con uno o dos años de anticipación. Cuando la policía viene y arresta a nuestos empleados practicantes de Falun Gong, todos nuestros planes quedan patas para arriba. ¿Quién diablos es el que realmente está perturbando el orden social? El practicante de Falun Gong es el empleado más trabajador de nuestra compañía. Ha sido arrestado tantas veces y ha sufrido tanto, y su familia ha quedado destrozada. ¿Por qué vienen por él otra vez? La última vez nos mintieron diciendo que lo podíamos traer de vuelta al trabajo, pero luego lo arrestaron de nuevo. La última vez que lo liberaron estaba muy maltratado. Ahora está un poco mejor, pero vienen de nuevo para lastimarlo.
Los agentes se quedaron en silencio y dijeron, Ve y trae al practicante de Falun Gong. No le haremos daño. Después de verlo nos iremos.
El supervisor le pidió a alguien que me buscara. Uno de los oficiales, el secretario de la sección legal y política, me dijo: No queremos molestarte de nuevo, así que estamos aquí para decirte que tengas cuidado y no les des a ellos una razón para hacerte algo. Otro oficial me dijo: Si te interrogan intentarán engañarte, así que debes estar alerta para que no puedan usar nada en tu contra. ¡Recuerda esto! El secretario agregó: Ve a casa rápido y pon tu casa en orden. Me temo que la registrarán y confiscarán sin que sepamos.
Mi supervisor les dijo: Deberían devolverle sus pertenencias, cosas como su computadora que se llevaron. Ellos dijeron, La estación de policía debería haberle devuelto esto hace rato.
No tenían nada más para decir. Desde entonces, ningún oficial de la Oficina 610 regresó a molestarme.
Fecha de edición: 19/1/2008
Fecha del artículo original: 18/10/2008
Versión en inglés en: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2008/10/18/101569.html
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