[Minghui Net]
14 de marzo de 2007
Importantes cirujanos están avisando a los neozelandeses de no ir a China por trasplantes de órganos - por seguridad y razones éticas.
China está bajo un examen cuidadoso en medio de las afirmaciones de que los órganos de miles de prisioneros ejecutados están siendo sustraídos cada año, sin consentimiento, para uso en la floreciente industria del trasplante.
El Colegio Real de Cirujanos Australasia está avisando a los pacientes de Nueva Zelanda que piensan hacerse un trasplante en China que consideren de dónde puede provenir el órgano. John McCall de la Unidad de Trasplante de Hígado en el Hospital de Auckland dice que China no tiene sistemas bastante desarrollados, como los de Nueva Zelanda y los de otros países Occidentales, para trasplantes de donantes muertos.
El profesor McCall dice que se da por sentado que los órganos usados para trasplantes en China vienen principal o exclusivamente de prisioneros ejecutados. China rechaza las afirmaciones del movimiento prohibido Falun Gong de que pueden haber sido sustraídos para el comercio de órganos.
El médico de trasplante renal Ian Dittmer dice que conoce a dos pacientes que han ido a China por riñones y regresaron con problemas de salud.
Los cirujanos están instando al gobierno de Nueva Zelanda a actuar, pero el portavoz del ministro de asuntos exteriores dice que el gobierno no puede verificar las afirmaciones.
Fecha del artículo original: 16/3/2007
Versión en inglés en: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2007/3/16/83573.html
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Categoría: Sustracción forzada de órganos