Mientras estemos en el Fa, no hay ninguna prueba que no podamos pasar

[Minghui Net] He estado queriendo escribir mi experiencia desde hace tiempo, pero siempre siento que no tengo nada que escribir. En los últimos años, mis experiencias parecen más bien simples, nada fuera de lo común y pasar las pruebas ha sido fácil. Mirando hacia atrás veo mi camino de validar el Fa, mi entendimiento es el siguiente: mientras estemos en el Fa no hay prueba que no podamos pasar.

Cuando fui arrestada e interrogada la primera vez en 1999, mi corazón latía fuerte y me sentía mareada y apenas podía ver. Mi cuerpo temblaba y mi voz también. Aunque trataba de controlarme, seguía temblando. Sentía como si estuviera cargando un gran peso y que no podía respirar. Recitaba para mí misma el poema de Shifu "La verdadera naturaleza revelada". Me decía a mí misma que pase lo que pase, debía continuar determinada y no permitirme hacer alguna cosa de la que me arrepintiera por el resto de mi vida.

Cuando la policía me preguntó si era una practicante de Falun Dafa, junté todo mi valor y dije: "definitivamente voy a seguir al Maestro Li en la cultivación de Falun Dafa". Cuando las palabras salían de mis labios, vi salir de mi cuerpo muchas piedritas negras que cayeron en el piso de tierra. Inmediatamente me sentí liviana, como si pudiera flotar en el aire. Había una luz brillante frente a mí. Supe que mi yeli había tratado de interferir conmigo así como que el mal estaba ejerciendo presión sobre mí. Ya que tuve pensamientos rectos, Shifu me ayudó a eliminarlos.

Lo que observé en ese instante me alentó inmensamente, dándome la confianza para dar bien cada paso en el futuro. Desde ese momento he entendido muchas cosas con el poder de Dafa y la mente racional de un Dafa dizi: como Dafa dizi, ¿cómo debo tratar las cosas que están pasando frente a mí? Cada vez que hay una prueba, recuerdo lo que Shifu dijo en Zhuan Falun. Mientras estuviera determinada, pasaba todas las pruebas bien.

Además, debemos tener fe en Shifu y en el Fa. Una noche después de las 8 p.m., mientras estaba en prisión, me di cuenta de pronto que no podía mover ni mis brazos ni mis piernas. Los oídos me zumbaban. Mi mente estaba clara, pero otras partes de mi cuerpo parecían estar fuera de control. Me eché despacio y pensé que simplemente debía dejar que se pasara solo, que Shifu iba a hacer los arreglos necesarios para que eliminara el yeli. Cuando ya iba a ser hora de levantarme para hacer los ejercicios pensé "Shifu, debo hacer los ejercicios". De pronto sentí nuevamente mis manos y pies. Unos minutos más tarde ya me podía sentar, sólo que el lado derecho de mi cara y mi cabeza todavía estaban adormecidas. No podía escuchar nada con mi oído derecho, no podía ni siquiera sentirlo cuando lo tocaba. Después de dos días regresé gradualmente a la normalidad. ¡Qué milagro! Si me hubiera asustado en ese momento, si Shifu no me hubiera protegido, no me imagino que hubiera podido pasar.

Nuestro benevolente Shifu supo que los dizi iban a cargar grandes responsabilidades desde la prehistoria y enfrentarse con un mundo de diez demonios. Es por eso que en Zhuan Falun nos instruye paso a paso cómo caminar bien nuestro camino, cómo iluminarnos a las tribulaciones que encontramos y cómo mantener nuestro "xinxing", así como si hubiera estado enseñando a niños pequeños cómo caminar. Mientras estudiemos el Fa más y sigamos el camino de Shifu, es seguro que caminaremos bien nuestro camino.
Lo arriba escrito es sólo mi entendimiento. Por favor, señalen amablemente cualquier cosa inapropiada.

Fecha de publicación: 15/10/2006
Fecha original del artículo: 12/10/2006
Versión en inglés disponible en: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2006/10/12/78883.html