[Minghui Net] En la noche del 11 de septiembre de 2005, la delegación de Hu Jintao se fue de Toronto para visitar México. El 13 de septiembre, Hu y su delegación viajaron a Nueva York para asistir a la Cumbre Mundial de la ONU, y se marchó el 16 de septiembre. Me uní a algunos de mis compañeros practicantes de Toronto para ir a Nueva York y formar parte de varias actividades, incluyendo presentar Falun Dafa a la gente local, esclarecer la verdad sobre Falun Gong, y elegir nuestro mensaje para la delegación de Hu.

Una escena maravillosa antes de partir de Canadá

A las 7 de la mañana del 11 de septiembre, dos practicantes occidentales de Canadá fueron en coche hasta el aeropuerto con la esperanza de esclarecer la verdad. Estuvieron dando vueltas dentro del aeropuerto con el auto hasta que finalmente encontraron el área de entrada de donde partiría Hu. Lograron entrar en ella. En realidad, era un área restringida del aeropuerto, pero ellos no lo sabían en ese entonces.

Esperaron dentro cerca de dos horas. A las 9 de la mañana, llegó un grupo de chinos. Mirando más de cerca, parecía ser Hu Jintao. Cuando pasó cerca de ellos, los dos practicantes occidentales inmediatamente desplegaron una bandera que decía en chino, "Hu Jintao, el tiempo en que Dios y la gente te sonríe, es limitado". Desplegaron lo que está prohibido enfrente de Hu Jintao y su comitiva. Al ver la bandera, Hu y su comitiva se quedaron asombrados.

Equipo de bienvenida decepción

El 13 de septiembre, la delegación de Hu se quedó en el Hotel Waldorf-Astoria en Nueva York. El equipo de "bienvenida" contratado por el Consulado chino se mantuvo todo el día ocupado. Se embrollaron solos en medio de la multitud, pero ni siquiera uno de ellos pudo ver la sombra de Hu Jintao. Después de las 5 de la tarde, les dijeron que Hu Jintao y la delegación habían entrado en el hotel por una entrada lateral. El equipo de "bienvenida" dejó tirado en el suelo banderas rojas por todos lados antes de irse.

Hu encuentra practicantes de Falun Gong


Los mensajes vio Hu con su comitiva al pasar cerca de los practicantes

La apelación de los practicantes de Falun Gong fue muy pacífica. Con la música de los ejercicios, hicieron la meditación sentada y los ejercicios parados, enviaron pensamientos rectos y esclareceron los hechos, lo que atrajo mucho la atención de la gente.
Los practicantes esperaron cerca del Hotel Waldorf-Astoria donde se alojaba la delegación de Hu. A las 4:30 p.m., la hilera de coches de Hu condujo a lo largo de la calle Lexington dirigiéndose hacia la 49 º. Un practicante que estaba esperando allí gritó de repente, "¡Falun Dafa es bueno!" y seguido de esto, todos los practicantes gritaron juntos continuamente, "¡Dejen de perseguir a Falun Gong", "Lleven a Jiang Zemin a la justicia", "Hu Jintao, el tiempo que te da Dios y la gente es limitado". Estos mensajes expresaron las preocupaciones de los practicantes de Falun Gong, y Hu las recibió tan pronto como llegó a los Estados Unidos.

Los policías vestidos de civil dan señales a los practicantes


La policía hace gestos a los practicantes para que desplieguen las banderas

A las 8:45 a.m. del 14 de septiembre, en la intersección de Lexington y la calle 49º, algunos coches de la delegación de Hu se marcharon. Todos se dirigían a la conferencia de las Naciones Unidas. Muchas delegaciones de varios países partieron de allí, así que era difícil reconocer cual era la delegación de Hu.

Un oficial de policía estaba dirigiendo el tránsito en el centro de la calle. Repentinamente, se dio vuelta y le hizo gestos a los practicantes para que desplegaran las banderas. Los practicantes entendieron y se apuraron a sacar las banderas y las desplegaron y gritaron a la fila de coches, "¡Falun Dafa es bueno!", "¡Dejen de perseguir a Falun Gong!" Los practicantes que esperaban en las otras intersecciones escucharon los gritos y también se apresuraron a desplegar las banderas.

La hilera de coches de Hu podía ver a los practicantes con sus ropas amarillas brillantes que sostenían las banderas. Viendo que los coches pasaban, los practicantes estaban tan excitados, "Él escuchó", "Él lo vio". Mirando la situación, un practicante no pudo evitar cantar con emoción, "Nuestros practicantes son realmente puros y compasivos".

"Lo verán definitivamente"

En la mañana del 15 de septiembre, los practicantes desplegaron las banderas en las cuatro esquinas de las intersecciones entre Lexington y la calle 49º. Un oficial de policía se acercó y le dijo a un practicante, "es una regla que no debería haber mucha gente parada aquí. Mejor se van a la otra calle". Algunos practicantes eran renuentes a irse. El oficial dijo pacientemente, "Sé lo que están haciendo, pero si no cooperan, la policía les pedirá que se vayan al lugar designado para ustedes en el Park Avenue. Entonces no podrán ver nada. Les garantizo, quédense en esa esquina sin moverse y lo verán definitivamente".

Los practicantes aceptaron su sugerencia, y fueron a la otra esquina. En menos de diez minutos, la hilera de coches de Hu pasó por ahí. Nos quedamos en la intersección y estuvimos cara a cara con la comitiva de Hu. Los practicantes gritaron sus mensajes mientras sostenían banderas. Yo también usé toda mi fuerza y grité, sentí nuestras voces estremecer el Cielo y la Tierra. La comitiva desapareció en la distancia. Un practicante me preguntó, "¿Sacaste una foto?" Yo contesté, "Grité solamente, pero me olvidé de sacar fotos".

"La llamada de Dios"

A las 10 a.m. del 15 de septiembre, una practicante veterana estaba parada en la entrada lateral y vio a Hu Jintao escoltado por dos guardaespaldas que salía caminando del hotel. Ella inmediatamente caminó hacia ellos, cuando estaba a dos metros de Hu, gritó enfrente de él, "¡Falun Dafa es bueno!" "Dejen de perseguir a Falun Gong" y "Hu Jintao, el tiempo que te ha dado Dios y la gente es limitado". En ese momento, una mujer se dirigió hacia la practicante y la empujó bruscamente, intentando evitar que dijera algo. El grito de la practicante trajo a más practicantes que estaban cerca. Hu Jintao entró en su coche en medio de una oleada de gritos. Su comitiva despegó del hotel en los coches, pasando por la calle 50º y 49º, los practicantes parados a lo largo del camino siguieron gritando. Los oficiales de policía en dos de los vehículos escoltas, saludaron a los practicantes que estaban al lado del camino. Dos policías en los vehículos de anti disturbio que venían detrás, dieron palmadas a los practicantes para expresar su admiración.

Los oficiales de policía vienen a aprender la verdad


Los oficiales de policía escuchan la verdad


Oficial de policía en servicio escucha a los practicantes en vigilia sobre la verdad de la persecución

Como había una Cumbre Mundial de la ONU, muchos policías eran cambiados de un lugar a otro, y muchos de ellos no sabían nada de Falun Gong. Un practicante dijo, "Le pregunté a diez oficiales de policía y sólo uno de ellos sabe de Falun Gong". Por eso, los practicantes enfocaron sus esfuerzos en esclarecer la verdad a la policía que nos protegía.

Cada policía que escuchaba el esclarecimiento de la verdad decía: "Gracias por decirme esto". Un oficial de policía dijo, "A pesar de que no tengo ninguno de vuestros materiales, he leído las banderas desplegadas de principio a fin, ahora entiendo".

"Ustedes son tan pacíficos, me pregunto porque los funcionarios chinos les temen tanto". Un oficial de policía dijo, "Tantos manifestantes, sólo ustedes quedaron. Los admiro, también los apoyo".

Un oficial de policía se acercó antes de terminar su servicio y dijo, "Estuve de servicio todo el día, estoy muy cansado y me quiero ir a casa. Pero no sé porque parece que todavía me quiero quedar con ustedes".

Tres días y tres noches


Los practicantes se quedaron allí por tres días y tres noches

En una intersección entre la calle 48º y Park Avenue cerca del hotel donde se alojaba Hu, la policía designó un área para que nosotros apelemos. Los practicantes de todos lados del mundo se quedaron allí por tres días y tres noches, hasta la mañana del 16 de septiembre cuando el grupo de Hu se fue.

Los practicantes llevaron comida y bebida, sin importar el viento o la lluvia, o el sol ardiente. Con tales tribulaciones y semejante firmeza, sólo queríamos dejar que el grupo de Hu pueda escuchar nuestra voz, que prenda la verdad de Falun Gong, y elijan un futuro hermoso para sí mismos. En tres días, cada vez que Hu entraba o salía del hotel, podía encontrarse con la brillante ropa amarilla de los practicantes de Falun Gong. Creemos que el vio y escuchó. También esperamos que él entienda que todo esto que los practicantes de Falun Gong hicieron.

Fecha de edición: 25/9/2005
Fecha del artículo original: 23/9/2005
Categoría: Noticias y eventos alrededor del mundo

(Versión en chino: http://minghui.ca/mh/articles/2005/9/20/110819.html)
(Versión en inglés: http://www.clearwisdom.net/emh/articles/2005/9/23/65220.html)