Leyendas para la gente del futuro

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Si un discípulo de Falun Dafa permanece decidido en la cultivación debido a las historias de cultivación de otras personas en lugar de elevarse racionalmente a un entendimiento genuino del Fa, de lo cual se obtiene la fe recta “indestructible”  e “inamovible” en Dafa, todavía hay algo que falta. Lo siguiente es la historia real de mi vida, anterior a mi cultivación en Dafa. Un practicante hizo un libro de cuentos basado en mi experiencia y le mostró el libro a nuestro Shifu. Shifu dijo: “Para la gente del futuro esto es un cuento de hadas”.

Un cuento del futuro

Cuando tenía 14 años un maestro me encontró y comenzó a enseñarme la cultivación. En aquel tiempo seguía siendo una niña joven que acababa de entrar al instituto. Mi maestro había vivido más de 500 años y me enseñaba el Fa a menudo. Aunque normalmente empleaba varios meses para explicar un concepto, seguía sin entenderlo muy bien. Mi tianmu se abrió desde el comienzo y podía ver que zorros, comadrejas, serpientes y otros espíritus malvados estaban por todas partes en los templos y no había ningún fo en las estatuas de fo. Aquellas escenas terribles a menudo me asustaban tanto que siempre le decía a mi maestro que cerrara mi tianmu.

Cuando empezó la Revolución Cultural en China, todo el mundo fue a Beijing, mientras que yo, una mujer de 26 años, fui sola a la montaña Emei. En un templo a mitad de la montaña me encontré un abad que tenía más de 70 años. Le supliqué que me dejara quedarme en el templo. El viejo abad me dijo: “Joven budista, has venido en la dirección incorrecta, deberías ir al norte. Me apresuré a explicarle: “No vine en la dirección incorrecta, el norte es a donde va la gente mundana, vine al lugar apropiado”. El abad se puso muy contento al oír estas palabras y nos hicimos buenos amigos. Después de quedarme allí dos días, le pregunté al abad por la vía de los monos sana, ya que sabía que los monos en la montaña Emei tienen habilidades sobrenaturales. El abad dijo: “Solo grita hacia el valle, sana ven a comer”. Elegí un lugar donde se pudiera producir eco y grité hacia el valle: “Sana ven a comer”.

 Enseguida varios cientos de monos aparecieron cantando y bailando y tan contentos que hacían rodar ruedas de carro delante de mí. El mono más mayor se acercó y me dio un gran abrazo. No paraba de besarme las mejillas e incluso dejó su saliva en mi cara. Entonces escupió un dan, energía de cultivación en forma de píldora, de su boca y me lo dio. Pensé que estaba demasiado sucio como para tragarlo. El abad dijo: “Joven budista, todavía tienes un obstáculo en tu corazón, porque el dan es algo que el mono ha cultivado por varios cientos de años”. Entonces los monos formaron un puente de monos encima del valle. El mono de atrás sujetaba las piernas del mono de delante, uno detrás de otro. El mono viejo cargó conmigo y me llevó por el puente de monos. Estaba demasiado asustada para abrir los ojos. Me llevó al otro lado del valle donde había otro grupo de monos. Más tarde, el abad me dijo: “En toda la historia solo una persona se encontró con un recibimiento tan curioso, tu eres la segunda. Pero recibiste dos cosas más, una es el dan que el mono te dio. La otra es que el mono te cruzó al otro lado. Normalmente no se permite a los monos cruzar al otro lado.

Hay muchos cultivadores en la montaña Emei, pero la gente común no puede verlos. Todos tienen habilidades sobrenaturales y pueden ocultar los lugares donde están, tal como se dice en los cuentos de hadas. En la mitad inferior de la montaña estaban aquellos que se han cultivado durante 200 o 300 años. La persona que se cultivó por más tiempo no excedía los 500 años. Este grupo era la mayoría. Los pilares de gong sobre sus cabezas solo podían alcanzar parte de la montaña hacia arriba. Subiendo más allá de la mitad de la montaña el número de cultivadores eran menos y menos mientras que sus niveles de logro en la cultivación eran más y más altos y sus edades mayores y mayores. Al alcanzar la cima de la montaña los cultivadores eran menos y estaban más lejos entre ellos, todos ellos se habían cultivado por más de 2.000 años. Sus pilares de gong estaban más allá de la Vía Láctea, algunos más allá del nivel de rulai, pero seguían cultivándose ya que no habían alcanzado el final de su cultivación. Entre ellos estaba mi antiguo maestro. Más tarde supe que cuando nuestro gran Shifu, Li Hongzhi, fue a la montaña Emei todos los cultivadores allí salieron para darle la bienvenida. Sus pilares de gong juntos se lanzaban hacia los Cielos como coloridos fuegos artificiales. Había un daoísta que se había cultivado por más de 4.000 años en la montaña Tianshan.

Quería tomarme como su discípula. Lo rechacé bondadosamente diciéndole que ya tenía un maestro y que quería encontrar una vía de cultivación que pudiera capacitarme para obtener el estado de fo en esta vida. Me dijo que estuvo aquí cuando Sakyamuni, Jesús y Lao Zi reencarnaron en el mundo humano y que había presenciado cómo habían difundido sus Fa y ofrecido salvación a la gente. En sus lecciones de enseñanza del Fa, nuestro Maestro mencionó  que de camino hacia el norte desde la provincia de Sichuan hasta la ciudad de Xi´an, muchos cultivadores de las montañas bajaron de la montaña y le preguntaron por qué sus discípulos se cultivaban tan rápido. Más tarde Shifu permitió a los cultivadores de las montañas escuchar sus lecciones de Fa y uno de ellos era el daoísta que se había cultivado durante más de 4.000 años.

Al final de la Revolución Cultural otra cultivadora y yo fuimos a la región de Kangshang esperando encontrar en el tantrismo una vía de cultivación que permitiera a uno lograr el estado de fo en esta vida. Era bien conocido entre los cultivadores que la verdadera forma del tantrismo tibetano se podía encontrar en Kangshang y ya no más en Tíbet. Cuando llegamos a Kangshang nos encontramos con una persona que había caminado… desde Changchun hasta Kangshang buscando el Fa recto. Juntos encontramos un monasterio. En aquel tiempo había un gran lama enseñando el Fa allí. Cuando llegamos, el gran lama me pidió que me sentara cerca de él y le escuchara enseñar. Este era un recibimiento muy poco común y… en el tantrismo tibetano. Después nos preguntó por qué habíamos venido a Kangshang para buscar el Fa. Le dijimos que no había ningún Fa recto en el interior de China. En su lugar los templos estaban llenos de espíritus malvados y esa era la razón por la que habíamos ido allí buscando el Fa recto. El gran lama se detuvo y pensó un momento, después dijo: “Eso no es verdad, habrá un gran Fa que uno no encuentra en épocas sobre épocas. Ese Fa se difundirá pronto en el área continental, y se difundirá justamente desde Changchun. Pueden volver y esperarlo”. Al oír esto me apuré a bajar de la montaña y llegué a un acuerdo con mis compañeros de quien encontrara primero el Fa le hiciera saber a los demás. Pero la persona de Changchun no lo creyó y se quedó en Kangshang.

A comienzos de los 80 muchos niños con habilidades sobrenaturales aparecieron por toda China. Algunos podían leer con las orejas, algunos podían ver con las manos o con la parte trasera de la cabeza. Nosotros los cultivadores sabíamos que estas cosas eran reales, pero también sabíamos que estas habilidades sobrenaturales no deberían usarse en un espectáculo o para ostentar.   Así que encontré a muchos de los niños y le expliqué a sus padres por qué no deberían dejar a sus hijos hacer demostraciones. Todos los niños que no estaban protegidos empezaron a cultivarse en Dafa más adelante. Con respecto a los llamados críticos de las habilidades sobrenaturales, eran simplemente payasos. Cuanto menos crea la gente en los dioses, menos fenómenos sobrenaturales los dioses permitirán ver a la gente. Si un dios lo permite, que tu mente cambie es solo un asunto trivial, sin embargo los humanos siguen creyendo que su tecnología de hoy es tan extraordinaria. ¿Por qué todas las etnias y nacionalidades tienen cuentos similares a lo largo de la historia pero no hubo ningún aparato de comunicación moderno en aquel entonces? Es porque a medida que los humanos creen menos y menos en los dioses, las historias sobre los dioses se convierten en meros cuentos de hadas. Los niños que no estaban protegidos, más tarde me dijeron: “El Señor del universo pronto salvará la Tierra”.

A comienzos de los 90, seguía sintiéndome muy triste por no haber encontrado el Gran Fa. Un día mientras me arrodillaba frente a una imagen budista prometí encontrar una vía de cultivación que cultivara tanto la mente como el cuerpo, prometí obtener el estado de fo y salvar seres conscientes. Esa noche cuando meditaba, mi espíritu principal salió volando y estuve buscando en cada dimensión una por una: “¿Hay algún Fa recto que cultive la mente y el cuerpo y permita a uno lograr el estado de fo en una vida?” En cada dimensión había muchos cultivadores pero ninguno había tenido noticia de un Fa recto tan maravilloso. Todos me dijeron: “Si encuentras ese maravilloso Fa recto, por favor asegúrate de decírnoslo y venir a salvarnos”. Más tarde mi energía de cultivación no era suficiente por lo que uno de mis antiguos maestros me dio una grulla divina. Me llevó para continuar mi búsqueda hacia arriba preguntando por el Fa recto, dimensión tras dimensión, hasta que no pudimos ir más alto. Los cultivadores en cada dimensión todos esperaban sinceramente que pudiera encontrar un Fa tan recto y maravilloso y que regresara para salvarles. Justo cuando me sentía apenada y desesperada, una flor de loto bajó volando hacia mí desde los Cielos y me recogió. Me llevó a un espléndido y magnífico palacio donde un gran Fo estaba enseñando Fo Fa. Fila tras fila de fo a su alrededor estaban escuchando su lección. Cuanto más cerca estaban sentados los fo del gran Fo más grandes eran sus cuerpos. Los rulai estaban en la fila más externa y sus cuerpos eran los más pequeños.

Vi muchos rulai incluyendo Lao Zi y Confucio, y me quedé muy sorprendida al ver a Jesús allí también. Mientras entraba al palacio del Fo el encuentro terminó. Me sentí muy triste pensando que mi suerte predestinada con Fo Fa era muy pobre. La flor de loto me llevó a donde el gran Fo y mi cuerpo creció hasta ser muy grande por el poder del gran Fo. El gran Fo hizo señales de mano hacia mí y al momento salieron rayos de luz dorada. De la luz dorada volaron copias de escrituras brillantes. Estaba tan feliz; hice lo mejor que pude para tomar las escrituras con mis manos. Las primeras escrituras que tomé fueron Falun Gong y Zhuan Falun.  Pensaba: “¿Dónde puedo encontrarte abajo en la Tierra?” El gran Fo inmediatamente cambió a la imagen de Shifu Li en traje. Su aspecto era como el de la foto en Zhuan Falun. En un instante regresé a mi cuerpo físico en el mundo humano.

La espera en el mundo humano fue totalmente insoportable. En 1995 me encontré con la amiga que había ido conmigo a Kangshang. Su cara irradiaba un brillo rosado. Dije: “Ah, debes haber obtenido el Fa, muéstramelo ahora”. La insté a que me llevara a su casa y las palabras no pueden describir lo ansiosa que estaba. Una vez que llegamos a su casa vi una copia de Falun Gong en la mesa. Lo tomé y lo agarré fuertemente contra el pecho, pero mi amiga dijo que era su única copia y no me dejaría llevarme el libro. Así que le dije: “Dime donde compraste el libro y lo encontraré”. Me dio la dirección de una librería. Era casi la hora de cerrar. Le pregunté al dueño si todavía tenía el libro de Falun Gong. Dijo que se había agotado. No lo creí así que busqué el libro en los estantes yo misma. Finalmente cuando abrí la puerta de una estantería encontré dos copias del dorado y brillante Falun Gong. Las compré inmediatamente. Empecé a leer el libro tan pronto como llegué a casa. De repente entendí todo. Las cosas que mis antiguos maestros me habían enseñado, tales como la circulación celestial, la colocación del paso prodigioso, el tianmu, la capacidad de gong para ver el pasado y el futuro, cada una de las cuales les llevó un año explicar, y todavía seguían sin estar claras, estaban claramente explicadas en Falun Gong, en solo unas pocas frases.

¿Por qué la gente piensa que los libros de Dafa son demasiado elevados para entender? ¿Por qué la gente siente que nuestro Shifu es muy altisonante en sus lecciones? La razón es que estos son los secretos de los secretos que nadie ha discutido nunca en el círculo de cultivadores y fueron ocultados como tesoros. Pero nuestro Shifu los ha desvelado para nosotros en unas pocas palabras claras. No solo no puede comprenderlas una mente humana, sino que además las mentes de algunos dioses tampoco pueden comprenderlas, así que, por supuesto parece que es muy altisonante. Más tarde difundí Dafa en la región de Kangshang y a los niños que había protegido y a muchos cultivadores en las montañas. Los cultivadores de las montañas todos regresaron al mundo de la gente común y se están cultivando en Dafa. Algunos de ellos eran discípulos jóvenes que obtuvieron el Fa a través de discípulos más mayores; algunos eran maestros que obtuvieron el Fa de sus discípulos.

Cuando los practicantes de Dafa fueron a la montaña Emei a difundir el Fa muchos monjes en las montañas recibieron señales de una pusa la noche anterior. Bajaron de la montaña muy pronto por la mañana y se arrodillaron a lo largo de la acera para recibir Zhuan Falun. Shifu dijo una vez: “Todos los dioses saben que estoy difundiendo Dafa, solo los seres humanos no lo saben”. Hice una lista de todos los discípulos de Sakyamuni y dónde habían descendido al mundo humano después de su reencarnación. Les encontré y les transmití Dafa. Sin embargo algunos de ellos están demasiado perdidos entre la gente común y ya no son capaces de aprender el Fa. Uno de ellos es Anan Hun, sobre la que a menudo leemos en las escrituras budistas. Es realmente cierto que no todo el mundo está cualificado para obtener el Fa. Aquellos que se han cultivado durante miles de años y no han alcanzado la perfección quieren obtenerlo pero no pueden. Aquellos que obtienen el Fa han encontrado el tesoro más preciado que no se presenta en épocas sobre épocas, y todavía la gente no sabe atesorar este gran Fa del universo. Todos los dioses saben que perseguir a Dafa es un pecado imperdonable. La historia que acabo de contar no es ni una décima parte de lo que he experimentado, pero soy solo un miembro más entre los muchos cultivadores de Falun Dafa.

Versión en inglés: http://clearwisdom.net/html/articles/2001/4/9/7033.html