(Minghui.org) (Continuación de la Parte 1)

Examen de los meridianos a través de un hilo

La reina Zhangsun, esposa del emperador Taizong, estuvo embarazada durante más de 10 meses y no se había puesto de parto. Se enfermó y quedó postrada en cama. Muchos médicos imperiales la trataron, pero su condición no mejoró. El emperador Taizong estaba visiblemente preocupado por esto e inquieto. Siguiendo la sugerencia de un oficial llamado Xu Maogong, el emperador invitó a Sun Simiao a venir a ayudar.

En la antigüedad, el contacto físico entre un hombre y una mujer estaba prohibido a menos que fuera dentro de un matrimonio. No había excepción para los médicos. Incluso cuando se realizaba un examen médico, los médicos imperiales no entraban en contacto cercano con las mujeres del palacio. Después de obtener información sobre el estado de salud de la reina a través de una de las criadas, Sun revisó la historia clínica y las recetas dadas por los otros médicos. Luego sacó un hilo rojo y le pidió a una criada que le pusiera un extremo alrededor de la muñeca derecha de la reina. El otro extremo del hilo pasaba a través de una cortina que los separaba, y era sostenido por Sun, quien examinó el sistema de meridianos a través del hilo.

Los médicos altamente calificados en la antigua China eran en realidad cultivadores del Dao, y tenían habilidades sobrenaturales. Pero no revelarían este hecho ni lo harían público de ninguna manera, y simplemente aplicarían sus habilidades para hacer buenas obras para salvar a la gente. Sun era un médico muy hábil. A través del uso de un hilo rojo, Sun revisó el sistema de meridianos de la reina e identificó la causa de la enfermedad. Luego usó una aguja para pinchar el dedo medio de la mano izquierda de la reina. El parto se realizó sin contratiempos y el príncipe nació.

Resolviendo la duda

Durante una guerra en los primeros años de su reinado, el emperador Taizong estaba luchando contra invasores cuando quedó rodeado por fuerzas enemigas en la cima de una montaña. Mientras bebía agua de un charco en la montaña, se sintió fatigado y mareado. El adorno en forma de dragón en su corona arrojó un reflejo en el agua y él lo confundió con una serpiente. Empezó a sospechar que se había tragado una pequeña serpiente mientras bebía. Después de regresar con sus tropas a la capital, cuanto más lo pensaba, más náuseas sentía. Comenzó a vomitar y se puso enfermo.

Los médicos imperiales prescribieron diferentes dosis de medicina, pero sin éxito. El canciller Wei Zheng entonces invitó a Sun a ayudar. Sun descubrió que el Emperador Taizong no tenía ninguna enfermedad en su cara ni ninguna materia extraña en su cuerpo. Primero le recetó una medicina para calmar la mente. Cuando el Emperador se puso la corona con el adorno de dragón que había usado antes, Sun le pidió a alguien que trajera una palangana de agua para que el Emperador viniera a ver. Cuando el Emperador Taizong vio la sombra del ornamento como una serpiente, supo lo que había pasado. Su duda desapareció y se recuperó de la enfermedad al instante.

(Continuará...)

Parte 1