(Minghui.org) Una mujer en la ciudad de Mudanjiang, provincia de Heilongjiang, falleció tras padecer durante 11 años las complicaciones de un derrame cerebral que sufrió mientras estaba detenida por su fe en Falun Gong.

Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual con cinco ejercicios de meditación y que enfatiza los principios de Verdad, Benevolencia, Tolerancia. La práctica ha sido perseguida desde julio de 1999 debido a su inmensa popularidad en China.

La Sra. Zheng Xuanshu sufrió un derrame cerebral hace dos décadas. La mitad de su cuerpo estaba paralizada y claudicaba al caminar. Con frecuencia se mareaba y no podía tomar trenes o aviones debido al vértigo. Después de aprender Falun Gong, experimentó una recuperación total. Su esposo la apoyó mucho para que ella hiciera la práctica.

Por haberse negado a renunciar a su fe, fue arrestada en 2008 después de que comenzó la persecución. Sufrió otro derrame mientras estaba detenida y estuvo en estado crítico. Aunque sobrevivió después de una craneotomía, permaneció paralizada y postrada en cama durante los siguientes 11 años. Murió el 16 de enero de 2019, a la edad de 69 años.

El segundo derrame se desencadenó por la detención

La Sra. Zheng fue arrestada el 20 de julio de 2008 mientras leía libros de Falun Gong en su casa con otra practicante de apellido Zhao. La policía extorsionó con 5.000 yuanes a la hija de Zhao y la liberaron esa noche. La Sra. Zheng, entonces de 58 años, permaneció encarcelada.

Su familia fue a la estación de policía de Qianjin todos los días para exigir su liberación. Los oficiales de policía Liu Jun y Liu Zhigang exigieron 10.000 yuanes a cambio de su liberación, pero su esposo dijo que su familia solo tenía 7.000 yuanes. Más tarde pagó a cada oficial 3.000 yuanes, pero aun así se negaron a liberarla, a pesar de sus repetidas solicitudes y la preocupación por su salud en el centro de detención.

La Sra. Zheng sufrió otro derrame cerebral el 24 de agosto de 2008 y quedó en coma. La policía informó esto al esposo después de enviarla al hospital.

Un médico de apellido Wang le dijo al marido que las posibilidades de supervivencia eran muy pocas. El médico le preguntó si aun así quería reanimarla, y añadió que incluso si sobrevivía a la cirugía cerebral, podría permanecer en estado vegetativo por el resto de su vida.

Su marido insistió en la cirugía. Firmó la exención de responsabilidad y pagó el costo médico total de 78,000 yuanes para el rescate. Durante la cirugía, la policía lo vigiló de cerca.

La Sra. Zheng permaneció en coma después de la cirugía. Su esposo estaba tan enojado que casi comenzó una pelea con los dos oficiales quienes le quitaron dinero pero se negaron a liberar a su esposa.

Los oficiales afirmaron que solo seguían órdenes de arriba al arrestar a la Sra. Zheng. Dada su condición física, abandonaron el plan para enviarla a un campo de trabajo forzado y acordaron liberarla.

La Sra. Zheng, más tarde, recobró el conocimiento y fue dada de alta del hospital el 6 de octubre de 2008. No podía moverse, comer ni hablar. Su esposo la cuidó muy bien.

A medida que envejecía, su propia salud comenzó a declinar. Más tarde se sometió a dos cirugías de corazón y finalmente llegó a estar incapacitado para cuidar de su esposa. La Sra. Zheng fue enviada a un asilo de ancianos y eventualmente falleció allí.