Una vida de cultivación feliz y sencilla

(Minghui.org) Mi vida es muy sencilla como cultivador, me ejercito todos los días y estudio las enseñanzas del Fa, y hago bien las tres cosas. Utilizo las enseñanzas del Fa para medir todo lo que hago. Puedo tener una nueva comprensión de las enseñanzas cuando estudio el Fa.

Salvando a mi amigo de la infancia

Hace varios años, cuando la persecución estaba ocurriendo con toda su fuerza en todas partes, escuché que uno de mis amigos de la infancia estaba involucrado en la persecución de los practicantes de Falun Gong.

A mi familia le aterrorizaba que quisiera aclararle la verdad. "Es tan malvado. ¿Y si te denuncia?".

Pensaba que estaba en una posición clave, así que si nadie le informaba de la persecución, podría cometer aún más pecados y perseguir a más practicantes. Decidí visitar a sus padres y luego a él.

Cuando nos pusimos al día, recordamos los buenos viejos tiempos. Le dije que Falun Gong es una gran enseñanza de la escuela de Buda. Se ha extendido a más de 100 países. También le hablé de los casos de quienes participaron en la persecución y recibieron retribución.

Sacó una carta escrita por un practicante de Falun Gong. Me dijo que tenía un sentimiento de temor mientras hacía su trabajo durante mucho tiempo. Me prometió que ya no estaría involucrado en la persecución. Más tarde hizo una solemne declaración de que él y toda su familia renunciarían al PCCh y sus organizaciones relacionadas.

Nuestro poder viene de una firme creencia en Dafa

Mi entendimiento sobre Shifu es que ya nos ha concedido todo el poder que viene de la cultivación antes de que comenzara la persecución. Mientras tengamos una firme creencia en Dafa, podemos superar todas las tribulaciones.

Una vez fui arrestado y retenido en una estación de policía. Cuando la policía estaba lista para interrogarme, vi las palabras "informe de interrogatorio" en la pantalla del ordenador. Pensé: soy un practicante de Dafa, no un criminal. ¿Cómo pueden interrogarme? Me levanté y me fui. Un policía me siguió y preguntó: "¿A dónde vas?".

Cuando levanté el pie derecho, desaparecí. Cuando volví en sí, estaba en un lugar a dos cuadras de la estación de policía. ¡Shifu me recogió! Un practicante me preguntó qué estaba pensando en ese momento. Dije que no había pensado en nada: mi mente estaba completamente vacía. Solo pensé que yo era un practicante de Dafa y no deberían interrogarme.

Me enteré de un practicante que sufrió mucho en la cárcel y cuando salió, otros le preguntaron cómo era por dentro. Dijo: "No recordaba haber sufrido mucho, estaba feliz".

A lo largo de veinte años de cultivación, Shifu me ha protegido y me ha tomado de la mano paso a paso. Siempre que me encontraba con dificultades y tribulaciones, el poder del Fa se manifestaba para inspirarme y animarme.

Creo firmemente que el poder de Verdad-Benevolencia-Tolerancia me ayudará a superar todas las dificultades, y seguiré a Shifu para volver a casa.

Aprendí a mirar dentro de mí, a acomodarme a los demás y a disfrutar de una vida sencilla y feliz. Soy tan afortunado y feliz de tener la gracia del Maestro resplandeciendo sobre mí. Estoy profundamente agradecido ¡Gracias Shifu! ¡Gracias Dafa!